Perfecto || lukamos

Treehouse

Las vacaciones volaron con las estaciones, tan rápido como llegaron, se terminaron y ahora debían volver al trabajo.

No había mucha presión sobre ellos, los partidos más cercanos que tenían eran amistosos por lo que no habían motivos de desgastarse entrenando y jugando, al menos por ahora.

Sin embargo, también estaban cerca de la final de la supercopa de Europa y la supercopa española, siendo una seguida de la otra, haciéndolos enfocarse más en ello que en los próximos cuatro partidos amistosos que tenían en Estados Unidos.

Había que admitir que llegaban con los músculos fríos luego de semanas de relajación, el poco entrenamiento que tuvieron antes de que les tocara viajar hasta el otro continente no les ayudó a calentarse, pero no había presión cuando la mayoría de los titulares ni siquiera jugarían los 90 minutos durante estos partidos.

Sergio no era una excepción, luego de disfrutar de su estadía con Luka en Sevilla y regresaron a Madrid, estuvo flojo y bromista durante los días de prácticas, los demás estaban en un estado parecido, pero las buenas vibras en la cancha eran agradables.

Algo que notó es que era fácil fingir con Luka, todos parecían acostumbrados a su extraña amistad, que tenían normalizado su forma de ser con el otro, pero aún así se enfocó en no cruzar esa línea.

Del mismo modo, los entrenamientos eran divertidos si quitaban el hecho de que estaban bañados de sudor al terminar cada día, claro, hacían lo que se les indicaba para no recibir regaños, pero no había presión a que se mantuvieran concentrados, y si alguno le hacía una broma a otro, o como el caso de Luka, se lanzarán sobre otros para que lo cargaran, entonces solo se rieron y siguieron con lo suyo.

No obstante, decir que viajar desde Madrid a California fue agradable era decir una mentira, nunca era agradable tomar un vuelo de 12 horas y llegar al hotel con los músculos tensos como una roca, el cambio del aire acondicionado del avión al aire caliente de Los Ángeles era lo peor y solo les dió a todos dolor de cabeza debajo de los ojos.

Todos querían bajar lo más pronto posible en cuanto el avión del Real Madrid aterrizó en tierra estadounidense, solo querían estirar los huesos y llegar a sus dormitorios para tirarse en las camas del hotel. En momentos así, deseaban ser Cris para no ser convocados y quedarse en Madrid.

- "El calor aquí es horrible"- vió a Lukita quejarse mientras apresuraba su paso para caminar a su lado, llevando sus cosas en su mano.

- "Ni que lo digas"- el acento tico de Navas hizo presencia detrás de ellos.

Puso los ojos en blanco, porque si bien el calor era notorio no encuentra mucha diferencia con el clima que dejaron en España. -"Está solo un poco más caliente que en Madrid"-.

- "Sergio, vengo de Croacia, me fue difícil acostumbrarme a Madrid ¿así quieres que no note el cambio?"-

Le revolvió el pelo como respuesta, riéndose por el acento tan marcado al decir una palabra grande y pasó el brazo al rededor de los hombros de Luka, caminando uno al lado del otro, el croata siendo cubierto por su presencia, pero sin intenciones de parecer posesivo o algo así, él no era de esos, no lo cree al menos.

- "Eres un gruñón"-.

Lo vió rodar los ojos y soltó una risa nasal como reflejo mientras lo observaba acomodarse el cabello con su mano libre, fue entonces que se dio cuenta que estaban siendo grabados para la historias de Instagram del equipo y saludó a la cámara con una sonrisa sin apartarse.

Otra cosa de la que se dió cuenta fue que Luka se reía de todos sus chistes, sin importar cuán malos fueran; tampoco se apartaba de él, no importaba lo muy pegajoso que podría llegar a ser, fingía molestarse, pero se relajaba debajo de su tacto, se sentía bien.

Pero, retomando los partidos, era innegable decir que no se sintió mal perder contra el Manchester United aunque solo fuera un amistoso, ni siquiera jugó un solo minuto pero le sabía mal la derrota.

Sin embargo, les fue peor contra el Manchester City, perdiendo con una notoria diferencia. No jugar los partidos le permitió ser espectador desde fuera y notar más lo que deben mejorar como equipo, porque aunque fuera un amistoso podrían necesitarlo en un partido oficial.

Eso se guardó en su mente incluso después de que el día terminara, una cosa lleva a otra y ahora estaba a media noche pensando en todo lo que ha pasado en su año. Se siente bien, se siente raro, es una mezcla de emociones extraña porque han pasado muchas cosas buenas en su vida y lo apreciaba, pero estaba esta sensación de que no todo puede ser bueno, no todo puede ser sonrisas y felicidad, no siempre va a ir bien, algo iba a pasar quiera o no y sabe que sus secretos al final del día se van a revelar, era un cronómetro en retroceso.

- "¿Sergio? ¿Pasa algo?"- escuchó la voz medio dormida de Luka a través del celular, era rasposa y con el acento más notorio de lo normal-"Mañana debemos levantarnos temprano para ir a Florida ¿recuerdas?"-

Ahora es cuando se cuestiona porqué llamó a Luka en primer lugar, pudo ir a su habitación a unas cuantas de la suya a buscarlo, pero fue como un mecanismo de defensa para dejar de agobiarse por su propia ansiedad que le apretaba el estómago y no le permitía dormir. Ahora no solo sentía el presentimiento del caos después de la calma, sino que sentía vergüenza por ser un adulto llamando a su pareja porque no puede dormir.

- "Mmh"- es ridículo, tenía 31, debería poder contar ovejas y dormir, no buscar comfort en alguien más.

Entiende que aunque la sensación de estabilidad y amor era agradable para su cuerpo, su mente y principalmente para su corazón, no era permanente, en algún momento tambaleará y no sabe si está preparado para ello.

- "¿No puedes dormir?"-.

Se dio cuenta que se quedó en silencio por demasiado tiempo y aún se sorprende de lo bien que lo conoce su pareja, sonó la estática del móvil en sus oídos como lana enredándose y desenredándose constantemente, pero todavía así Luka comprendió lo que le pasaba y estuvo abierto a preguntar con calma después de haber sido despertado a mitad de la noche.

- "Sí"- dijo suave para que las palabras fueran arrastradas por el viento seco del verano, yéndose a pasar tiempo con las estrellas.

Entonces estaba esta pausa cómoda entre ambos que lo dejó escuchando el sonido blanco del móvil y el carraspeo del aire acondicionado. No era molesto, pero se sentía extraño, por tanto silencio en un hotel.

- "¿Quieres que hable hasta que te duermas? Podría ayudar"- Luka sonaba cansado y eso lo hizo sentir culpable, pero sonrió en la completa oscuridad porque solo escucharlo eliminaba cualquier pensamiento en su mente enredada.

- "Eso suena bien"-

El reloj siguió girando mientras escuchaba a Luka hablar sobre cosas de Croacia, era relajante, como una manta pesada y cálida en una noche de invierno o como el ventilador en un día caluroso, no sabe cuando ni cómo se quedó dormido escuchándolo, pero cree que podría dormir así por siempre.

Realmente quiere dormir así por siempre.

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Lamentó el relleno, es necesario porque ya vamos a entrar a la recta final del fanfic :^

Ya casi llegamos a las 20k vistas y 3k votos, muchas gracias de verdad, ha sido una completa aventura escribir esto y agradezco el apoyo de todos ustedes, son lo mejor.

También recuerden que pueden unirse al discord de Lukamos, el link está en el capítulo anterior o en mi perfil. Nos vemos :]