Valeria Scaloni, como su apellido deja en evidencia, es la hija de Lionel Scaloni, director técnico de la selección Argentina. Valeria vuelve de España tras terminar la universidad. Conoce a los chicos nuevos de la selección, uno en particular le ll...
Valeria Scaloni Subimos al taxi que nos llevaría al departamento de Emi en Londres, ya estábamos en Inglaterra hace casi media hora, yo miraba a todos lados con cara de nena feliz, no podía creer que estaba acá y con el. Miré a mi costado, Emi estaba respondiendo mensajes en su teléfono. Notó que lo estaba mirando y puso su atención en mi dejando el celular. -¿Te gusta? -Me encanta. Yo era la más feliz, todo era hermoso y como en las películas. -Gracias por venir conmigo nena. -Gracias por querer traerme grandote. Se acercó y me dió un beso, varios minutos después llegamos al departamento de Emi, era grande y muy lindo. Corrí a la habitación y me tiré en la cama, lo escuché reírse desde el comedor y después fue hasta donde yo estaba. Me arrodillé en el colchón y lo miré sonriendo. -¿La querés estrenar?- preguntó pícaro. -Ay si- dije riendo. El corrió y se acostó, puso sus manos en mi cintura y me acostó encima de el. -Hace mucho no tenemos un momento como este. -¿A qué te referis?- me hice la boluda. -Tengo unas ganas de darte. -¿De darme que?- me reí. -De darte nada- dijo riendo. Sellé nuestros labios en un beso y el obviamente lo correspondió. Desde que nos volvimos a ver no tuvimos ningún encuentro sexual, estábamos en casa con Lau y los chicos, no podíamos hacer eso ahí... Aunque el quería e insistió varias veces pero yo me puse firme porque no sabía si ellos podrían llegar a escuchar algo. Los besos dejaron de ser en la boca y pasaron al cuello, bajó las tiritas de mi top por mis hombros y dejó besos en mis clavículas. Suspiré, hace meses no sentia sus besos y estaba más sensible de lo normal por ello. -Te extrañé tanto. -Yo te extrañé más. Optó por sacar completamente mi top rojo y lo tiró. -Emiliano eso es ropa de marca- traté de no sonar agitada porque lo que le decía era verdad. -¿Y? Sacamos la ropa de marca y te dejo MÍ marca- me guiñó el ojo y volvió a dejar besos y chupones por todos lados. No pude evitar reírme por el comentario. Y de un segundo a otro ya no tenía nada que cubra mis pechos, o bueno si, la boca de Emi y su mano izquierda. Solo la izquierda porque la derecha claramente estaba en su parte favorita de mi cuerpo... Mi culo. No reprimí los jadeos que quisieron salir de mi garganta, el sonrió contra mi pecho al escucharme y dió una leve moridida haciéndome soltar un gemido. -Te sigue gustando lo mismo nena. -Me seguís gustando vos nene, esa es la cosa.
Estábamos bañándonos juntos, el me estaba poniendo shampoo en mi pelo mientras yo tenía los ojos cerrados. -Amor. -¿Si mi amor?- le pregunté abriendo los ojos para mirarlo. -Mas tarde vamos a salir. -¿A dónde? -A varios lugares, salimos tipo 16pm ¿Dale? -Dale. -¿Que me pongo? -Algo marrón, me gusta mucho. Me reí, por alguna razón le sigue gustando verme de marrón.
Después de bañarnos me fuí a vestir, el se había llevado la ropa al baño. Miré la ropa adentro de mi valija. <Marrón marrón marrón> Y ví la minifalda del día que nos conocimos<¿Me seguirá quedando?> Me la probé y si me quedó. Salté feliz y busqué un top negro de mangas largas, en Londres hace bastante frío y además tengo chupones en todo el cuello y hombros. Maldito, cómo lo amo. -Amoooor mirá- dije saliendo de la pieza. El se giró y me miró, sus ojitos brillaron. -Que buenos recuerdos me trae esa pollera. Sonrió y se me acercó, puso sus manos en mi cadera y yo pasé mis brazos por sus hombros haciendo puntitas. -Me encantas nena. Me sonrojé y lo besé.
Un rato después salimos, me dijo que primero íbamos a ir a un spa así que me puse una bikini abajo de la ropa antes de salir. Llegamos al lugar y lo primero era una sesión de masajes, fue increíble, super relajante, después un sauna, lo había rentado solo para nosotros así que como no... Tuvimos sexo ahí, voy a aceptar que fue algo increíble. Ahora estábamos en un jacuzzi, saqué mi celular traté de sacarle una foto. -Dale boludo posa. -No, dejame- se reía. -Dale, dale, dale, dale- empecé a repetir y el me hizo una seña para que me caye. Le saqué una foto así y la subí a mi Instagram.
@_Valuscalonii
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El se rió cuando se lo mostré. Después de estar ahí nos fuimos a un restaurante a cenar, era todo muy lindo. Me pedí algo con un nombre bastante extravagante que sonaba rico, sorpresa me llevé cuando era pollo a la plancha con papas fritas. Emi se tentó. -Pensabas que era algo re gourmet. Lo miré con un puchero. -Ay mi bebé, pobrecita. Estaba rico igual, después de comer me dijo que faltaba un lugar más y me llevó a una torre que arriba tenía un mirador, se veía casi toda la ciudad y era increíble. -¿Te gusta?- preguntó desde atrás mío con sus manos en mi cintura. -Me encanta, se ve hermoso. -Ni la belleza de londres ni la de todo el mundo se compara a la tuya. <Ay me hago pis> Me reí un poco. -Sos un tierno. -Digo la verdad nomás. Tiré mi cabeza para atrás para así apoyarle completamente en su cuerpo. -¿Viste que siempre los novios le dicen a su novia que es la octava maravilla del mundo? -Si- dije algo confundida. -Vos no sos la octava, vos sos la primera y las otras siete son irrelevantes, a tu lado siquiera merecen ser llamadas maravillosas. Me di vuelta y lo miré sonriendo, seguro yo estaba toda roja, el estaba súper serio pero con un brillo en sus ojos más intenso de lo normal. -Valeria, te amo desde que te conozco, me volviste loco y me torturaba no saber si te iba a volver a ver- tomó aire -cuando logré volver a verte me enamoré todavía más y pude confirmar mis sentimientos cuando te besé en tu casa- me sonrió -sos la mujer de mi vida, la persona que quiero que me acompañe en todo, en lo bueno y en lo malo. Siento que te necesito para respirar. Lo ví alejarse un paso y meter una mano en su bolsillo. Yo fruncí el ceño confundida. Hasta que lo entendí, entendí todo cuando lo ví arrodillarse frente a mi y sacar una cajita roja y abrirla, lo entendí cuando ví el anillo brillando bajo la luz de la luna que entraba por la ventana del mirador. -Valeria Scaloni ¿Me puedo casar con vos? Me reí ante su forma de pedirlo y lo obligué a pararse. -Sabes que si. El me besó y me puso el anillo, nunca había visto algo tan lindo, o bueno si, el, el era más lindo que ese anillo, el es más lindo que todo. Volví a besarlo y nos abrazamos siendo iluminados por la luz lunar con la ciudad de fondo.
------------------------------------------------------ Awwww más tierno.
Gente... Este es el último capítulo de esta serie.
No es joda, es el capítulo final, yo tampoco quiero que esto termine, pero bueno, así es la vida :(
Igual no sé preocupen, queda mejor que seas vos para un rato más, voy a ir sacando capitulos especiales y eso ¿O esperaban no leer la boda entre Val y Emi? No soy tan mala.
También podrían no ser solo una familia de 2... Quien sabe.
Gracias a todos los que apoyaron el fanfic desde un inicio.
Gracias a los nuevos que leen hace poco.
Y gracias a todos los que comentaron cosas lindas en algún capítulo.
Los invito a leer las demás cosas que escribo, por ahora solo hay subido este y un fanfic de Enzo pero voy a empezar otro con Lean Paredes.
