(2) Lo que de verdad es para ti, te encuentra

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Antes de que pueda girarme para ver quien ha entrado, una voz femenina interrumpe el silencio.— Hola, ¿Es aquí la reunión?— Es en ese momento cuando me giro. Mi mirada se posa en una chica de tez morena y cabello ondulado, mirándome fijamente.— Al parecer he llegado un poco tarde.—Dice con indiferencia.

—Si para ti un poco tarde es una hora...— Digo vacilándola mientras miro el reloj de mi muñeca. Puedo ver como mi respuesta parece no afectarle.—Al no estar presente durante la reunión, debes ir a reclamar tu informe en el despacho de coordinación y justificar tu ausencia.— Ella tan solo sigue mirándome con indiferencia. Luego veo como su mirada desciende hasta mis manos, dónde están los informes.

—¿No son esos los informes?.—Me pregunta con aire de superioridad. Yo asiento con la cabeza.—Pues dámelos y ya está, mira qué fácil. Lo veo una tontería eso de hacerme ir al despacho.—Veo como se aproxima lentamente a mí haciéndome sentir inquieta. Mi cuerpo reacciona dando un pequeño paso hacia atrás.

Finalmente, deja de avanzar cuando se encuentra plantada a escasos centímetros de mí. Su mirada penetrante sigue a la mía. Mi respiración se para por unos instantes. En ese momento, me fijo en el color de sus ojos, verde. Un verde tan hipnotizante que hace que me pierda en su mirada. Sin embargo, no dejo que me intimide. 

Reúno fuerzas y le respondo lo más calmada posible.— Lo siento, si no has asistido a la reunión, debes ir a buscar los informes al despacho, como te he dicho antes.— Hago una pausa para ver su reacción, pero sigue indiferente.— Son las normas, lo siento.— Esa respuesta sí que parece hacerla reaccionar porque rompe esa coraza y sonríe.

—No te tomaba por una persona que sigue las normas.— Dice ella ahora separándose de mí. Noto como esa tensión se esfuma en el momento que se aparta de mí.—Voy a hacerte caso esta vez. Pasaré luego, sobre las 12, a buscarlo. Ahora tengo cosas más importantes que hacer.

—Pero a las 12 tenemos Genética Humana.— La interrumpo cuando veo que empieza a marcharse.— ¿No piensas ir? Es una de las asignaturas más importantes.—Ella se gira otra vez. Puedo ver en su cara esa expresión de indiferencia, de superioridad. Se queda plantada durante unos instantes, mirándome de arriba abajo antes de contestar.

—Lo sé.— Dice cruzando los brazos. Luego sonríe otra vez.— Pero prefiero que otros hagan el trabajo duro por mí. Nunca he sido de esas de mancharse las manos.—Me mira otra vez de arriba abajo.—Como tú.— Después de decir esto, simplemente se va, dejándome aquí plantada asimilando lo que me acaba de decir. ¿Quién sé cree que es esta tía? La gente que se cree superior me ofende. Decido ignorar a esa chica y sigo con lo mío.

Después de cerrar el aula voy a dejar los informes en el aula de coordinación. No puedo dejar de darle vueltas a todo. ¿Quién era esa chica y porque no la había visto nunca? Estoy caminando tranquilamente por el largo pasillo, inmersa en mi pensamiento cuando, de repente, alguien me abraza inesperadamente por detrás asustándome. No lo puedo evitar y mi instinto reflejo, es girarme y darle una bofetada.

—¡Joder Lía!.— Dice Hugo poniéndose la mano en la mejilla después del golpe.— Tienes que dejar de ir repartiendo ostias por ahí, que no es la primera vez.

—Lo siento Hugo, perdón.— Le digo a mi novio mientras reviso su mejilla ahora enrojecida.— Ya sabes que cuando estoy concentrada me sale reaccionar así si me asustas.— Él me da un abrazo y me dice que no pasa nada. Durante los próximos minutos, le pongo al día de todo lo de hoy. Procuro obviar la discusión con mi padre de esta mañana. No me juzguéis, nunca hablo del marrón que llevo encima. Ni con él ni con Emma. Prefiero guardármelo para mí, contar mi situación puede hacer que pierda a Alex para siempre.

—Entonces ¿Estás diciéndome que todo el grado de medicina ha visto nuestra presentación del curso? Emma seguro que tiene la culpa.—Yo simplemente me rio y eso es suficiente para afirmar su suposición. Hugo ya conoce de hace tiempo a Em y sabe de sobras cómo es.— Hablando de la presentación, entonces por lo que me has dicho, ya has podido terminarla.

Flores Bajo la LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora