22

148 15 2
                                        


[Narra T/N]

Mis ojos se abrieron lentamente debido a los rayos de luz que golpeaban mi cara.

Me senté en mi cama y vi la hora, era bastante temprano, me levanté y me puse unas pantuflas blancas que estaban al lado de mi cama.

"Seguro mamá las puso ahí" pensé y me dirigí a la cocina.

Papá estaba desayunando un café y unas tostadas con mermelada.
Y yo desayuné lo mismo. Después de un rato apareció mamá, tenía una cara de sueño y el cabello todo revuelto.

Reí internamente y seguí comiendo. Después de terminar lavé mi taza y limpie las migas que había dejado en la mesa.

Luego me volví a sentar y me sumergí en mi celular.

- A qué hora tienes que ir a la academia?- preguntó papá.
- Oh, emm falta un poco, la primera clase es a las nueve.- respondí y mientras mi mirada seguía en el teléfono.
- Y tus amigos?- río un poco mientras creo que recordaba la llamada.- esos los graciosos..- adquirió en la pregunta.
- Oh, Jimmy, Petey y Gary supongo que están bien, de echo ayer no pase mucho tiempo con ellos, si no con mis otros amigos...- expliqué.
- Quienes son los otros amigos?- preguntó..
- Pues, ya sabes, emm unos chicos de allí que me cayeron super bien- dije sonriendo.
- Porque no tienes alguna amiga mujer? siempre te juntas con puros hombres T/N- dijo mamá y rodeé los ojos esperando el sermón.- T/N si hay algo en lo que eh fallado como madre, es a intentar que seas ,aunque sea, un poco femenina, puedes tener una pizca de eso y tener al menos una amiga?- ya estaba algo cansada de la palabra femenina...

Terminando ese discurso erupté y mi madre se giro molesta a mi dirección, y mi padre simplemente se rió.

- Agradezco con toda mi alma que hayas intentado volverme un poco más femenina mamá, pero como vos misma lo dijiste.. fallaste.- dije con una sonrisa mientras ella me veía frustrada.- y respondiendo a tu primera pregunta, si tengo amigas mujeres, y son las más amables que encontré en ese lugar. No hablo mucho con ellas pero me caen muy bien.- respondí, mi mamá recupero su compostura y se preparó un té.

Luego de unos minutos me tomé una ducha rapida, mamá me dio unos pantalones parecidos a mis pantalones negros anchos, solos que estos no estaban rotos en las piernas, aburrido. También me dio una camina blanca bien planchada. Y a la que tenía antes junto a mis otros pantalones me los lleve en una bolsa.

Me acomode bien el chaleco azul y me dirigí a la camioneta donde estaba mi padre esperándome, para llevarme a la academia.

Luego de unos minutos nos detuvimos en las puertas de la academia y me despedí de él antes de ingresar.

Tenía clases de educación física así que me dirigí corriendo hacia la parte de atrás, donde quedaba el gimnasio.

Cuando llegue pensé que ya estarían todos pero faltaban algunas personas así que está bien.

Me dirigí a la parte de los vestuarios y de mi casillero agarre unos pantalones cortos negros y una camiseta blanca con el escudo de la academia a un lado.

Luego de eso me puse mis zapatillas y subí nuevamente al gimnasio solo para ver qué casi todas las mujeres tenían atuendo de porristas.

Solo dos que no estaban así y eran Beatrice y Zoe.

Me acerque a ellas ya que no veía a nadie conocido. Los chicos no han venido todavía, creería que tengo esta clase compartida con los tres chicos.

- Oh a ti tampoco te gustan las porristas?- preguntó Zoe cruzada de brazos sentada en las gradas.
- Debo admitir que no es lo mío hacer cosas tan femeninas- dije con una sonrisa egocéntrica sentándome al lado de las dos chicas.
- Por fin una que me entiende- dijo levantando sus brazos.
- Bueno a mi me asusta cualquier cosa deportiva en general- dijo Beatrice acomodando sus gafas.
- Por que? Es divertido!- dije.
- no lo sé, no es mi fuerte.

Bienvenida a BullworthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora