┗•❅•°•❈ EPÍLOGO •°•❅•┛

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El embarazo de Jimin había sido bastante caótico, empezando por el hecho de que los síntomas los había tenido Jeon y no Park. Siendo así que Jimin además de tener que llevar la carga de estar embarazado también tenía que aguantar los cambios de humor, antojos, vómitos y demás que el alfa sufría.

Eras bastante gracioso a decir verdad, ya que debido a ello ni el uno le podía contradecir al otro sin que las hormonas hicieran que lloren. Por otra parte, el pequeño Soobin quien ya hablaba no como tanta claridad, pero lo suficiente bien para que se le entendiera, parecía estar feliz con la noticia de su nuevo hermanito o hermanita, no sabían habían decidido esperar al día de nacimiento para saber aquello.

El pequeño cachorro se había vuelto demasiado sobreprotector con su padre omega, impidiendo así que cualquiera se le acercara, incluso su padre alfa.

Aún ahora cuando el omega ya contaba con 8 meses de gestación.

—Pero yo quiero sentir a mi bebe —se quejó Jungkook haciendo un puchero mirando a su hijo quien le gruñía por haber intentado acercarse a su padre.

—No —ese fue Soobin quien le miraba juzgadoramente.

—Te compro un carrito nuevo —trato de convencerlo.

—No quiero —se negó

—Un chocolate —recibió una negativa nuevamente —un videojuego, una cobija, un tetero, una salida al parque —así siguió tratando de convencer a su hijo sin obtener resultado alguno.

Estaba a punto de quejarse nuevamente hasta que el timbre de la casa sonó, sin más remedio y con la cabeza gacha se dirigió a abrir la puerta mientras era observado por su hijo y su omega.

Al abrir un Yoongi con un bebé en brazos se hizo notar.

—Hola, ¿Qué tal? —saludo el omega.

—Hey bien ¿Y tú? Pasa —saludo haciéndose a un lado para que entrase.

—Me alegra, yo bastante bien, a decir verdad —sonrió y mirando a Jimin y Soobin de acercó a ellos a saludar —hola —menciono feliz.

En ese instante Soobin quien no había dejado a su padre omega corrió en dirección del nuevo invitado, pero no precisamente corrió a dónde el omega. Lo hizo justo al bebé que este llevaba en brazos.

Extrañamente Soobin siempre solía ser así cuando Yoongi o Namjoon llegaban de visita con el pequeño, Jungkook pensaba que talvez se debía a que lo veía como un amigo más.

En cambio, Min y Park pensaban que podrían ser otros los motivos, pero para saber aquello debían esperar que Soobin presentase su rango y que ambos fueran mayores de edad o por lo menos que tuviesen la edad necesaria para explicarles.

Yoon aprovecho para dejar a su hijo en la acolchada alfombra mientras Soobin jugaba con el, Kook había ido a la cocina y había traído café y galletas para todos y aprovechando que su hijo estaba distraído tocar la pancita de su Omega.


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3 meses después.

Una hermosa niña había nacido a la cual le habían puesto de nombre Miri.

Jeon Miri.

A decir verdad, todos estaban felices con la cachorra, tenerla ya en brazos era todo un proceso de aprendizaje y diversión. Más aún cuando tú alfa se llama Jeon Jungkook y es un torpe de primera.

—¡¡JIMINNNN!! —aquel grito había hecho a Jimin alarmarse, así que apagando la estufa y tomando a Soobin en sus brazos por cualquier cosa corrió a dónde sabía estaba su alfa.

—¿Qué paso? ¿Estás bien? —inquirió nervioso entrando al cuarto que era de la bebé.

Fue allí que se percató de que su hija estaba en el lugar en dónde se cambiaba el pañal y más allá estaba Jungkook con la cabeza sacada por la ventana mientras sostenía el pañal con dos de sus dedos. Allí Jimin entendió todo.

—Jeon Jungkook —empezó —¿Qué te dije de andar exagerando las cosas? —inquirió.

Fue entonces que él alfa metió la cabeza nuevamente —pero Mimi, el olor es terrible —se quejó —son como gases tóxicos —siguió diciendo.

Park simplemente negó con la cabeza Jungkook seguía siendo un caso.

—Mejor deja yo la cambio tu ve a hacer la cena —ordenó entonces.

Y como si fuese la mejor noticia Jeon salió corriendo de la habitación dejando a Soobin, Miri y Jimin allí.

—Su padre es todo un caso —dijo entonces a sus dos hijos sonriendo.

Bin le dio la razón como si entendiese las palabras de su padre, mientras que la bebé sonrió son sus hermosas encías sin dientes.


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Tiempo después ya se encontraban los cuatro en le mesa mientras degustaban la comida, las risas no podían faltar debido a las ocurrencias de sus dos pequeños, definitivamente ellos eran el complemento perfecto.

El alfa era quien más feliz estaba de poder tener una familia y ser feliz con ella, después de todo lo que habían tenido que pasar, saber que ahora tenía al amor de su vida y a sus hijos le llenaba el corazón de orgullo.

Más tarde cuando los pequeños ya se habían dormido y ambos estaban en la habitación acostados en la cama dándose tiernos besos y caricias, supieron que no necesitaban nada más que estar junto al otro.

—Te amo alfa —dijo Jimin al separarse del beso que se había estado dando hace unos momentos.

—También te amo mi amor, mi hermoso omega —respondió el contrario.

—Juntos hasta el final de nuestros días.

—Así será, lo prometo.

Y con ello volvieron a besarse.

Quien lo diría, que gracias a que un alfa se quedó sin trabajo y gracias a ello tuvo que hacerse cargo de las labores domésticas conocería al amor de su vida.

Nadie podría llegar a imaginar que aquel omega que lloraba en silencio y aguantaba todos los desplantes que le hacía el que se supone era su alfa, conocería a alguien que con su torpeza le enseñaría que podía ser feliz.

Nadie podía pensar que gracias a que un Alfa En Casa conoceríamos está hermosa historia de amor.

Fin.


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Ahora si hemos llegado hasta aquí con esta bella historia, nuevamente infinitas gracias por su apoyo no saben lo agradecida que estoy de que estuviesen hasta el final de esta.

Los amo y nos leemos en otras historias.

‧₊˚꒰┊ Blu・୨୧

🗓️:: 01 - 06 - 23 ᥫ᭡ FINALIZADA.

𝐀𝐥𝐟𝐚 𝐄𝐧 𝐂𝐚𝐬𝐚 ⦙⦙ 𝐾𝑀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora