Capítulo 8

151 19 1
                                    

~Childe~

Sonrío cuando la veo cruzar la puerta cojeando y con una mueca hastiada en los labios. Lleva puesto un vestido vaporoso de color azul marino muy corto, dejando ver perfectamente la venda que cubre su muslo, consecuencia de la misión de hace unos días.

Lumine frunce el ceño cuando ve mi sonrisa y se acerca hasta mí, dejándose caer en la esquina más alejada de mí del sofá y soltando un suspiro. Supongo que el simple hecho de haberse sentado y no tener que hacer fuerza con la pierna le tiene que saber a gloria.

Sopla hacía arriba, intentando apartar el flequillo que ya casi le tapa los ojos y me mira de brazos cruzados.

- ¿Qué te parece tan gracioso? – me encojo de hombros como respuesta, pero parece ser que hoy viene molesta. - ¿Para qué me has llamado?

- Bueno, ahora somos un equipo, ¿no? Tendré que compartir la información contigo.

Ella parece aceptar mi respuesta con resentimiento y utiliza sus brazos para moverse más cerca de mí, intentando mover la pierna lo menos posible.

- ¿Y no podrías haberme mandado esa información? O haber venido tú, teniendo en cuenta mi condición.

- Me gusta más esto que esa taberna de mala monta.

También me gusta como se ve el contraste de ella en si con la habitación, pero está claro que eso no voy a admitirlo en voz alta.

- Pero no eres tú el que ha recibido un disparo que le ha dejado cojo.

- Por lo que he visto has llegado bastante bien.

- Y por lo que he visto yo eres un auténtico gilipollas. Cállate ya y enséñame esa información que dices tener.

- Un respeto, que estas en mi territorio – le recuerdo.

- Qué te calles ya.

Me arrebata las fotos de las manos y comienza a observarlas, deteniéndose una por una para analizarla a fondo. Las fotografías se encuentran con el filtro de visión nocturna, dando un efecto espectral a las personas que aparecen en ellas.

Lumine se detiene durante más tiempo en una de ellas, justo la última que hice antes de que comenzaran los disparos. Es la fotografía en la que aparece el cabecilla de la operación, mirando fijamente el punto donde nosotros habíamos estado por encima del hombro.

Me acerco un poco más al cuerpo menudo de la rubia y un escalofrío recorre mi espina dorsal. Sé que ha Lumine le ha pasado lo mismo porque puedo ver como se le han puesto los pelos de punta. En la foto claramente se ve la cara del chico bajito mirándonos con unos ojos feroces y llenos de rabia a punto de explotar, y el filtro de visión nocturna solo lo hace ver más escalofriante.

- ¿Quién es? – la voz de Lumine rompe el silencio y yo la miro por un momento sin saber bien a lo que se refiere – No intentes hacerte el loco, Tartaglia. No conmigo. Vi como lo miraste el otro día y también he visto como lo has hecho ahora. Tú sabes quién es.

¿Siempre soy tan transparente? Ella me mira convencida y esperando una explicación, así que no sirve de nada negarme o inventar cualquier otra excusa. De todas formas, ya tengo un plan pensado y sumándole que somos socios es inevitable que sepa la identidad del sujeto en cuestión.

- Es Scaramouche, el hijo de la jefa de Inazuma.

Veo como por un segundo el aire se escapa de sus pulmones y vuelve a fijar la mirada en la fotografía que aun sostiene entre sus manos.

Abre la boca un par de veces, intentando buscar algo que decir, pero solamente boquea como un pez fuera del agua. Se agacha un poco, dejando la foto sobre la pequeña mesa que hay frente a nosotros y vuelve a reclinarse en el sofá.

En busca de El Abismo // CHILUMI (Genshin Impact)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora