Me convertí en el Efecto Mariposa (+21)

✔Capítulo 11✔

Título: Los protagonistas me reconocen (4)

Pov Seth

Avanzaba por los pasillos luego del desayuno agobiante, dos de las mujeres regodeándose en ellas mismas y la otra es demasiado callada, como si deseara desaparecer.

« Me da pena ajena. »

Erika es muy hermosa, pero le falta chispa y personalidad, se deja pisotear por sus rivales, debería comenzar a tomar más carácter.

Me sorprendo al doblar en un pasillo y ver entrar a la fogosa pelirroja a la biblioteca, a donde yo también me dirigía.

Mis pies comienzan a moverse solos y antes de lo pensado estoy abriendo la gran puerta para seguirla, ella no parece darse cuenta de mi presencia.

Conversa con Héctor, el bibliotecario de la mansión, y este se sonroja mientras hablan.

Aprieto mis puños a los costados de mi cuerpo, me molesta que hable tan animadamente con otro hombre cuando nos ha estado evitando con tanto empeño durante toda la semana.

Ella se aparta poco después y sigue su camino, haciendo que por fin pueda respirar con normalidad.

— Saludos al Príncipe Levison —El bibliotecario hace una inclinación respetuosa pero solo paso de él.

Camino entre los estantes y más adelante veo a la pelirroja, subida sobre una escalera, su dedo índice repasa los títulos y una de mis comisuras se eleva mientras apoyo mi hombro de uno de los estantes.

« ¿Estará consciente del contenido de esos libros? »

Me pregunto pero rápidamente confirmo que si lo sabe.

— ¡Bingo! —exclamó por lo bajo y sus ojos parecen brillar como si hubiese encontrado un tesoro.

Agudizo mi visión, logrando leer el título de una de las historias con clasificación adulta y jugosa.

« Esta chica mi agrada. »

— ¿Por qué tomó ese libro? —pregunto y esto hace que se sorprenda y pierda el equilibrio, haciendo que su cuerpo caiga hacia atrás con un pequeño grito.

« ¡¿Qué?! »

Me sorprendo y antes de siquiera pensarlo mi cuerpo ha reaccionado, me muevo a una gran velocidad y la atrapo en mis brazos.

Ella tiene los ojos cerrados y se aferra al libro, poco después abre sus ojos y su mirada rubí choca con la mía. Sus ojos brillan mientras me observa con detalle, es realmente hermosa.

Dirijo mi mirada al título del libro y una de mis comisuras se eleva.

« Pequeña calenturienta, ¿qué pensabas hacer mientras lees ese libro? »

Mi boca se seca cuando mi imaginación va más allá de lo permitido.

— ¿"La princesa es una ninfómana" ? —leo el título, intentando dispersar mis pensamientos—,  no sabía que le gustara este tipo de lecturas, Lady Videl.

— Ammm..., yo no —Sus mejillas toman el mismo color que su cabello cuando es atrapada con aquella lectura en manos.

« Es tan linda cuando se avergüenza. »

— Solo, lo tomé sin querer —respondió.

— Qué extraño, su rostro decía lo contrario —Me burlo al recordar su sonrisa cuando lo tomó.

Ella carraspea y desvía su mirada.

— De todas formas, ya puede bajarme.

« No quiero. »