Te Encontraré

Capítulo 21

Will

Observo como Kira retira la mano ya fría de Kevin del alrededor de la suya. Coloca la mano sobre el pecho de Kevin y luego agarra la otra para colocarla igual. Mira con los ojos llorosos el cuerpo sin vida y luego me mira a mí. Hay mucho de lo que tenemos que hablar, pero ahora no es el momento. Tenemos que salir de aquí lo antes posible e intentar llevarnos el cuerpo de Kevin.

- Kira - la llamo y ella se sobresalta como si recién se diera cuenta de que soy real. - Tenemos que salir de aquí. ¿cómo has venido?

- Coche - susurra ella con los ojos aun muy abiertos y tocando todo el rato su colgante con forma de sol.

- Bien. Tienes que ir a por él y traerlo hasta la boca del callejón. ¿De acuerdo? - ella asiente pero se muerde el labio mirando entre la salida y yo. - Estaré aquí cuando vuelvas.

Vuelve a asentir y sale corriendo en dirección al coche. Dejo un segundo solo y me dirijo hacia el cuerpo sin vida de Richard. Su cara ha quedado con una mueca de dolor y los ojos completamente abiertos. Me agacho frente al que era mi mejor amigo y cierro sus ojos.

- ¿Por qué? - le pregunto aunque parezca inútil ya que no puede contestarme.

Escucho un claxon y cuando levanto la mirada veo a Kira saliendo del coche para abrir las puertas traseras. Me levanto y me dirijo hacia Kevin al mismo tiempo que ella.

- No podemos dejarlo. Otra vez no. - susurra y se limpia una lágrima que cae por su mejilla.

- No pensaba hacerlo - respondo limpiando la lágrima y haciendo espacio para cargar a Kevin sobre mi hombro como el hizo una semana atrás.

Kira corre al coche de vuelta y me ayuda a acomodar a Kevin en el asiento trasero. Luego se monta detrás del volante y yo a su lado en el asiento del copiloto. Arranca rápidamente y circula por las calles a gran velocidad. Esquiva un coche por aquí y otro por allá y recibimos varios insultos desagradables por parte de otros conductores. En un semáforo pega un frenazo y se detiene por poco antes de pasárselo. Suelta el volante y recién noto que sus manos tiemblan mucho.

- Tranquila - digo sujetando una de sus manos.

- Tengo miedo - susurra. - Tengo miedo de estar volviéndome loca. De que en realidad no estés, que nada de esto esté pasando y solo sea mi mente jugándome una mala pasada. Tengo miedo de estar muerta y no darme cuenta. Tengo miedo de tantas cosas.

El verla así me rompe. No parece la chica fuerte que ha sido durante sus veintitrés años de vida, parece una niña rota y desprotegida. Me duele que gran parte de todo esto es culpa mía. Acaricio los nudillos de su mano y luego deposito un beso en su mano antes de que un coche nos pite por detrás. Kira se suelta de mi mano y comprueba que el semáforo ya se ha puesto en verde. Acelera un poco más tranquila pero los dedos siguen tamborileando en la goma negra del timón.

- Estoy aquí. - respondo.

- ¿Cómo? - pregunta ella mirándome fijamente a los ojos antes de devolver su atención a la carretera.

- Ni siquiera yo estoy seguro - tomo una gran bocanada de aire y luego la suelto lentamente antes de contestar - Lo último que recuerdo es ver como Tomas levantaba el mechero con la sala llena de gas y lo siguiente es despertarme en un piso adolorido y con varias vendas alrededor de mi pecho. Segundos después apareció Kevin con un vaso de agua y me explico que nos había estado vigilando desde que salimos de lo de Kurz. Dijo que me vio salir a mucha velocidad y que sospechó que algo no iba bien conmigo. Me siguió y se quedó en el callejón escuchando todo. Me contó que rompió el cristal segundos antes de la explosión y que me sacó tirando de mi manga en el último momento. - suelto un suspiro planteándome si quiero contarle lo que sigue o no, pero no quiero guardarme nada - Dijo que tuve bastante suerte, que estuve lo suficientemente cerca de la ventana como para poder salir a tiempo. La onda expansiva solo hizo que chocara con la pared del edificio del frente y me diera un fuerte golpe en las costillas.