...PAIN... (Andy Strucker)

𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟑

𝕿𝖔𝖗𝖒𝖊𝖓𝖙𝖆

Llegamos al edificio, pero todos parecen alterados, mientras las puertas del elevador se abren, puedo oír a las trillizas gritar.

—¡Corran!, ¡Es hora!—Grita Esme y entiendo al instante de que están hablando, pues Lorna aparece en mi campo de visión y justo en el momento en que ella grita por una contracción, las luces explotan y las paredes se tornean.

—¡Ayudala!—Grito y Andy la toma de los hombros, guiandola a la salida, Dorian viene detrás, al parecer su malestar ya se le pasó.

(...)

—Esta bien, resiste—dice Andy mientras la ayuda a caminar una vez entramos a dónde ella dará a luz.

—No es tan simple, ¡no puedo controlarlo!—Ella grita y varias herramientas metálicas salen volando hacia Andy, pues es quien más cerca está de ella, lo protejo usando mis poderes y él continúa caminando. —Lo siento Andy...

—No te preocupes, todo estará bien—dice él metiendola a la caja.

—Estamos aquí Lorna—Digo tomando su mano y ella la aprieta con fuerza pues otra contraccion llega.

—Puje otra vez—ordena el médico y ella grita de dolor al hacerlo. Me hace replantearme la idea de tener un hijo algún día, no gracias.

El dolor se incrementa, puedo sentir sus emociones, su desesperación porque pare.

Afuera, todo es una locura, las cosas chocan contras las paredes, incluso el mismo lugar se resiste a sus poderes.

—Algo está mal.—Suelta el doctor.

—¿Qué?, ¿Qué tiene?—Pregunta Reeva algo preocupada, una emoción que no es característica en ella.

—No está dilatada, no aguantará mucho más.

—¡No la perderemos!—Exclama Reeva.

—No es algo que yo pueda hacer, es un bloqueo mental, suele pasar pero no sé cómo remediarlo.

Reeva se voltea y habla con las gemelas, para finalmente haber tomado una decisión.

—No, alto, quiero saber exactamente qué harán, ¡no dejaré que pongan en riesgo al bebé!—las detengo.

—Lilith, necesita saber porqué está luchando, le mostraremos, nada más, lo prometo—Afirma Reeva pero yo dudo...

—Amor, las necesita, mírala—Suelta Andy y al ver a Lorna se que no sobrevivirá mucho más.

—Bien, háganlo...

Y las Frost se meten en la cabeza de la mutante.

—¿Quieres eso?—pregunta Reeva.

—Más que nada...—Responde Lorna cómo puede.

—Entonces muéstrame que puedes lograrlo.

Y Lorna puja una vez más, desgarrando su garganta en un fuerte grito. Todo tiembla a nuestro alrededor, las luces explotan, las paredes igual y lo único que nos mantiene a salvo es la crisálida que acabo de crear.

  Lo único que puedo oír son los gritos de mi amiga y los latidos acelerados de Andy, él realmente está asustado.

Tomo su mano y en ese momento Lorna deja de gritar, lo próximo que oigo es el llanto de un bebé...

Miro la cara de la chica en la camilla y está sonriendo, ella me mira, puedo ver cómo me sonríe, buscando aprobación creo.

—Lo hiciste, estoy muy orgullosa de ti —Digo volviendo a sostener su mano.