Autismo | Wenclair

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Wednesday llevaba media hora buscando un púlpito reversible para su menor Enid, Días atrás miraba en su instituto a todas las parejas y amistades con aquellos peluches de estado de ánimo.

Y ella ansiaba darle algún regalo a la linda Omega que al cabo de meses se convirtió en su amiga, aunque ella no la vea de esa manera.

El rojo y rosa se veían bonitos, pero no sabían si esos colores serían del agrado de la Omega Con un puchero compro la roja y rosada, haciéndola envolver en una funda de regalo con estampado de fresa.

Hoy era el día del amor y la amistad, apesar de que hoy no sería su confesión no se permitiría no darle nada a su futura Omega

Guardando los regalos encontró a sus amigos con sus parejas y en sus estudios, hoy abría un campeonato del equipo. Xavier y Wednesday liderarian en el campeonato.

Toda la escuela estaría invitada, Wednesday tomo sus cosas y se dirijio a su clase, sin molestar a la Omega pues ya sabía que su rutina debía hacerse al pie de la letra por qué ocasionaría confusión y molestia en la Omega.

Por otro lado Enid pintaba en su clase de arte un bonito jarrón con fresitas en los lados y cerezas decorativas, su madre le había informado de lo sucedido ese día, y por sugerencia de su abuela decidió hacer ese jarrón para su mayor,

-Te queda bonito Enid - Un beta de cabello castaño se acercó a ella con una sonrisa tímida.

-Gracias Yuu, Tu plato es lindo-Dijo sonriente sin mentir, Enid le gustaba mucho como pintaba Yuu, con mayor razón tenía buenas notas.

-¿Veras el partido?- El beta le miro curioso.

-Mami dijo que debería ir por qué estaba Wednesday Wen, pero es mucho ruido. Chasqueo su lengua eh hizo un pequeño puchero, haciendo que se vea adorable ante los ojos de Yuu.

- Enid podemos verlo por la tele, en la cafetería - Explico dulcemente El beta.

Enid sonrió y siguió haciendo respondiendo a un curioso Omega al final de la clase descubrió que, Yuu era novio de BamBam, ahora comprendia la insistencia de su amigo en entrar a clases de arte y era para conocer a su novio que le caía muy bien.

El receso llegó y con ellos la competencia en el campus del instituto, Yuu compro todo tipo de dulces en la cafeteria y Enid seguía con su tarea de nombrarlos.

-Este gusanito es Pinki -Explico Enid, decorando su cuaderno y poniendo los nombres, en la mesa gente a la gran televisión situada en la cafetería con exclusividad para los partidos, estaba Yuu comiendo las gomitas nombradas de Enid y está le reclamaba sin enojarse en realidad, ella hacia lo mismo.

- Pinki a mi boquita-Abrió su boca como un patito y mordió con una tierna sonrisa haciendo reír a Lisa por lo gracioso que se veía el beta con azúcar en sus labios.

El partido comenzó, Wednesday tomaba el balón con diestra dando un pase alto a Xavier quien lo tomo y esquivo a sus rivales con una estrategia confundiendolos Y terminar con un aro de tres.

En el primer tiempo, Wednesday trató de mirar al público y buscar a su Omega, sin éxito.

Su loba aulló molesta, Wednesday debería dejar ese estúpido balón y estar con su Omega.

Empezó otra vez. Los mismos pases y alguna jugadas sorpresas

4-2 el instituto gritaba de felicidad al sentir que tendrían una nueva victoria en contra de un instituto de Alfas muy estratega. En el segundo tiempo entro una Alfa ya conocida la famosa Alix.

Riana más bien conocida una Alfa pura con un gran intelecto en sus estudios, el partido siguió, Riana tiraba aros de 3 muy rápido, era muy ágil Wednesday empezaba a frustrarse.

Xavier trato de quitarle la pelota, sin darse cuenta que lu tenía un plan, Tiro la pelota parando en un aro de 3 otra vez.

4- 10 Xavier lo daba por perdido, Ajax miraba a la Alfa con mucho odio y Wednesday analizaba la situación.

El último tiempo para poder ganar o perder. Todo o nada, Riana tomo la delantera y Wednesday decidió meterse, me quito la pelota, dando pases largos altos y la técnica de la trenza.

Un último aro y el instituto ganó, todos celebraron, Riana miraba con enojo a la alfa su orgullo quería matarla ay mismo.

-Buen trabajo Addams, no resultaste ser un fracaso completo.

- Buen partido para ti también Riana - Wednesday sonrió, mirando a lo lejos a su bonita Omega con un beta y cargando algunos dulces.

Riana giró y sus ojos brillaron viendo a su amor de años atrás, aún se acordaba de que a sus 5 años lloraba por comida, su familia tenía bajos recursos y no podían mandarle el almuerzo por lo que la alfa terminaba sin nada en su barriga y apenas pan en la tarde.

Ese mismo día una Omega de cabello rubio corto y labios abultaditos se le acercó con una funda de gomitas y dulces.

-¿Por qué lloras?- Enid le miraba confundida, Riana era muy buena no debía llorar, sentándose en la misma blanquita celeste que ella me miro, acariciando los pliegues de su faldita blanca.

Es... Es.... que Mi mami no tiene ... No tiene para dar de comer a Riana- Entre pequeños guípidos, con sus puñitos quitó las lágrimas que tenía . Enid sacó su mochila dónde llevaba una galleta y un juguito dado por su madre por si tenía más hambre.

-Toma, mami dice que es para mí, pero no tengo mucha hambre -Se lo entrego a la Alfa y está le miro con ojitos brillosos.

Y así paso dos años en ese instituto con la hermosa Omega cuidando la y enamorándose más de ella

Había prometido hacerla feliz en un futuro, así como ella le hizo feliz por dos años demostrándole que no todo es feo en el mundo como lo pintaba su abuelo.

-¡Wedns!- Riana miro como Enid abrazaba a Wednesday, esa molesta alfa y un beta corría detrás para darle su mochila.

- Hola Wednesday, Pensé que te habías olvidado de mi.

Enid negó y le abrazo más.

-No Wedns, es que había mucho ruido y me molesta.

-Esta bien, vamos quiero darte algo.

Riana pudo sentir que su corazón se destrula, había pasado la mayoría de su tiempo en busca de su Omega Enid y al encontrarla pudo ver qué compartía lazo del destino con Wednesday, con ojitos llorosos salió del instituto hacia el puente tan conocido como el puente de suicidios. No sé lanzaría, pero quería pensar un rato.

Unos minutos pasaban y pudo ver a una chica sentarse al borde de este y llorar Riana utilizando sus instintos decidió ir a verla. Al acercarse pudo divisar que era una Omega muy bonita, y algo desarreglada.

-Si saltas, morirás.

- Eh?, Dios, no fijate que si salto salgo volando,alfa tonta - la Omega frunció el ceño parandose frente a la alfa.

Y Riana entendió que había perdido su tiempo buscando un amor que no correspondería, en sus ojos estaba una Omega que al parecer compartía lazo con ella.

Y su lobo hablo.

-Es nuestra Omega.