Capítulo 8.

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Hace tres años

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Hace tres años.

Suspire con calma mientras me dedico a observar el techo de mi habitación, casi como si en él pudiera contar estrellas, y realmente no podía ni acomodar mis pensamientos, aquellos que alejan cicatrices pero atraen heridas. Las cosas seguían igual, casi un poco mas cerca del final, ya que en una semana me despido de todo aquello que conozco, y me gustaría poder decir que las cosas mejoraron con Valen pero sería mentir descaradamente, ya que casi no hubo si siquiera un saludo de compromiso, cosa que me hace mal al alma, por que es triste perder una conexión de tantos años, es casi irónico, como olvidar lo mejor que te paso o fingir que tus mejores recuerdos de pronto se borraron. 

Estoy a nada de cumplir esos sueños que ahora mismo son metas que están más cerca que nunca, y aunque soy feliz me duele. Se que es mucho pedir el apoyo completo de Valen y más después de tantas peleas, pero quisiera más que nadie tenerla al lado mío, pero la siento tan lejos y eso que todavía ni me fui.

Es extraño decir que siento, por que todavía no lo sé bien, pero se siente como perder una parte de ti que jamás creíste poder extraviar. Nunca imagine distanciarme de esa persona que tantas veces reparo mi alma y ahora mismo estaba apagándola y sin intenciones de hacerlo, por que Valen jamás me haría daño, pero me estaba lastimando sin querer y yo la quería tanto.

Cerré los ojos y comencé a tararear una nueva melodía que hace días tengo en la cabeza, y que sin darme cuenta ya le comencé a poner letra.

"Me pongo a escribir en tu nombre
Y te pienso toda la noche
Es que no hay como tú, uh-uh
Ya no hay nadie que me haga sentir esto que siento

Y estoy totalmente feliz por dentro
Pareciera que es todo un sueño y pensar
Que solo es el comienzo me hace alucinar"

Cante con tranquilidad en la oscuridad de mi habitación y realmente mi alma sanaba cada que lo hacía, y si bien no eran los abrazos de Valen, me servía para mantenerme viva. Por que por más que me duela, debía de entender que desde ahora era yo sola contra el mundo, y mi música debía de ser mi única medicina.

Perdón, Valen, pero debo de pensar en mí y por mas que quisiera ayudarte, no puedo salvar a quien no quiere ser salvado. Intente comprender tu dolor, pero solo te cerras y me demostras que no puedo hacer nada ante eso. Quiero que seas libre, pero quizás yo no soy la indicada para ayudarte, y aunque me duela eso, deseo que encuentres quien te haga ser vos misma sin temor, por que mereces más que nadie sonreír con soltura y sin inseguridades.

Suspiro y cuando me estoy por dar vuelta para dormir y para intentar olvidar un poco mis quilombos mentales, mi celular suena y aunque me queje y no quise contestar, decidí al menos verlo y cuando lo hice mis cejas se fruncieron y miles de dudas aparecieron, por que era un mensaje de Valen, solo que era indescifrable por que había palabras cortadas y con números. ¿Qué carajo?

Sin pensarlo y quizás con preocupación la llame rezando que encuentre bien, pero cuando finalmente me atiende lo primero que le recibe que no es voz, son fuertes ruidos de música, gritos y cantos haciendo que niegue con la cabeza.

—¿Valentina donde estás?—pregunte poniéndome mis zapatillas.

Yo estoy aquí, borracha y loca—canto alegre mientras reía y era obvio que estaba borracha—pero mi corazón idiota siempre brillará.

—Deja de cantar y decide donde estás, por favor—hable preocupada, por que Valen no podía estar sola en una joda y encima borracha, no cuando las cosas están muy feas ahí afuera.

—No quiero decirte, Nicole—bajo su tono y a mi me dolió, pero no iba a dejar de insistir, por que primero esta su seguridad.

Perdón, Valen, por no ser lo que esperas.

—¿Por que?—pregunte suavemente.

—Por que mi vida es un desastre y no te quiero en él.

El corazón se me estrujo mientras agarraba mis llaves y salía de mi casa mientras el sol me empezaba a asomar, y ya fuera de mi casa suspire con dolor, por que ya no éramos las mismas y sabía cuan efímero será esto, pero no iba a dejarla sola por que se que ella jamás lo haría.

Valen, sin importar que tan desastre sea tu vida o incluso vos misma, no te dejare a la deriva.

—Solo decime donde estás.

Escuche su suspiro y finalmente obtuve mi respuesta.

—En la casa de Ezequiel.

Confeso y emprendí viaje a la casa del chico que hace semanas supuse que le gustaba y que era el culpable de sus poemas, y agradecí que no quedaba tan lejos. Mientras rezaba por que Valen empiece a cuidarse y más ahora que yo me voy.

Valen, lo único que quiero es que estés bien, pero pareces que vos sola te complicas la vida.

Aunque sin duda siempre iba a ir hasta el fin del mundo por ella y por su sonrisa, que aunque aún no la vi en su esplendor sabía que era preciosa.
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Hola, aparezco, boe. Na pero quería actualizar y aunque no son horas, no puedo dormir y use mi tristeza para este cap y el siguiente. Espero que les guste este pequeño desastre de Valen <3

𝑷𝒂𝒓𝒕𝒆 𝒅𝒆 𝒎𝒊 |𝑵𝒊𝒄𝒌𝒊 𝑵𝒊𝒄𝒐𝒍𝒆| (𝑻𝒆𝒓𝒎𝒊𝒏𝒂𝒅𝒂)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora