Nada más un día.

Cap 10

Compañía y nuevos amigos.

<SOL>

— Si, invite a un par de amigos, o ¿creías que nos quedaríamos sólitos?

— No, es que..— No termine de decir cuando me interrumpió emocionado.

— Pero, si quieres le puedo decir que se diviertan aparte, y nos vamos nosotros solos, no hay problema.

— No pongas palabras en mi boca Raul, como no lo mencionaste por eso pensé que solo estaríamos los dos, pero ahora que me dices que somos más, es excelente.

— ¿Disculpa? No quieres pasar conmigo solos y prefieres que haya más gente, eres muy mala, Sol.

Yo me puse a reír cuando el habló así, me pareció muy tierno.

— No seas dramático vamos y ve a presentarme tus amigos.

— Claro, claro. Por aquí, dijeron que estarían en este hotel.

— ¿Cuantos seremos en total?

— Como cuatros, según mis cálculos y lo que me dijo un amigo, que invitaría a la chica que también quiere conquistar.

— Mm, ya veo, ¿así que ustedes dos se pusieron de acuerdo?

— De hecho no, solo le comente la idea que tenia de traerte aquí y pasar el día excelente, el me comento que quería lo mismo y nos aliamos.

— Bueno, ¿supongo que la chica no sabe así como yo tampoco sabía no?

— Exacto.— Nos sentamos en un lugar apartado de la gente, una mesa cubierto por la sombra de una palmera.

— ¿y si le chateas para saber si por lo menos están aquí?

— Tienes razón, Solo..

— Aquí estas, Raul. No sabes cuanto dimos vuelta para allarte.

— Porqué no le llamaste Sebastian, así que caminamos porque quisiste.— Dijo, la chica que lo acompañaba de manera molesta, vio hacia nosotros y golpeó el costado de su amigo.— Oye, ¿no nos presentarás?

— ha si, si Porsupuesto, el es Raul mi amigo ella es su novia, perdón ¿como te llamas?

— soy Sol, y no soy su nov...

— Me alegra mucho que hayan llegado con bien.— me interrumpió Raul y yo le quede viendo de mala cara.— ¿Quien es esa hermosa señorita que te acompaña Sebastian?— no se por que pero, me puso de mal humor que le haya dicho hermosa, si lo es pero, me incomodó.

— Si, mi acompañante se llama Soe, y esta mujer es mi mejor amiga y la que sostendrá a mis futuros bebes en sus brazos.— Dijo, y ella se atragantó con su propia saliva.

— Oye, calma baquero que te dije que no estoy buscando novio y lo sabes muy bien.

— Porsupuesto, pero eso no quita que yo trate de robar tu corazón, probar no cuesta nada.

— Un corazón roto.— se me salio sin pensar y me tape la boca como intentando retener lo inevitable ya todos en la mesa lo habían oído.— Lo siento, pero se me salió la verdad.

— No te preocupes, pronto verás que hay un lugar en ese corazoncito de piedra para mí.

— oye, ¿sabes que te estoy oyendo no?

— Lo se, por eso lo digo.— me pongo a reír, realmente si son buenos siendo ellos mismos, no les conozco pero lo poco ya me cayeron bien.

— Pues busquemos que comer que tengo hambre— Habla Raul, tomándome de la mano y llevándome con el a la cafetería del hotel, Sebastian y Soe nos siguen el paso.