Ellos se conocen desde la adolescencia, pero nunca se han llevado bien, a ambos les encanta hacer rabiar al otro con sus ingeniosos comentarios, pertenecian al mismo grupo de amigos y todos ya estaban acostumbrados a que se llevaran como perros y ga...
Desde la huida de Gulf de casa de los Noppakao ya había pasado un mes, un mes que no había sido para nada fácil para el pelinegro, uno en el que se había escondido de Kao, tenía miedo de enfrentarse a él y escuchar algo que no quería, tenía miedo de las consecuencias de sus actos y ahora se encontraba frente a un nuevo dilema en su vida.
—No te preocupes todo va a estar bien—. Ese era Prem que estaba a su lado mientras esperaban a las afueras de un consultorio médico.
—Pero tengo miedo de los resultados—. Suspiro cansado —Y no sé porque debería tenerlo, sé muy bien que va a salir en ellos, los mareos, cansancio y vómitos no pueden estar equivocados.
—Solo relájate, todo va a salir bien, además nos tienes a nosotros para lo que necesites.
— ¡Gulf Kanawut!—. Lo llamo la enfermera indicándole que ya podía pasar.
—Ya tengo los resultados—, hablo la doctora con una sonrisa — ¡Felicidades!, ¡vas a ser papá!—. Esas palabras resonaron en la mente del pelinegro, lo único que lo mantenía entero era la mano de su amigo que lo apretaba para que no se perdiera de la realidad, ¿qué iba hacer ahora con bebé?
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—Aun no puedo entender que sigas siendo tan obstinado— Boun estaba cansado de mirar el estado de su amigo y escuchar las tonterías que salían de su boca, estaban tomando un café en su negocio mientras trataba de hacerlo entrar en razón y que no se rindiera en la búsqueda del otro pelinegro.
— ¡Él se fue!, se fue sin avisarme... Me dejo allí en la casa de mis padres ¿cuantas veces te tengo que explicar que fue Gulf el que tomo una decisión sin consultarme?
—Y yo voy a seguir diciéndote que debes buscarlo, hablar con él, escuchar sus razones y después tomas una decisión, no sabes porque se fue de esa manera...
—Evidentemente se fue porque no sentía nada por mí, ¿crees que no lo he buscado?, ¡por supuesto que lo he hecho!, pero me está evitando—. A su mente llego el recuerdo de su amigo llegando a su apartamento para entregarle el anillo que le había dado a Gulf —Ni siquiera fue capaz de darme la cara para entregarme el anillo en persona.
—Bueno, allí si te doy la razón, pero mi hermoso novio me convenció de hacerlo por él—. En ese momento Kao lo miro mal — ¿Qué?, yo no puedo resistirme a la cara de súplica que me pone Prem cuando quiere que yo haga algo—. Se defendió el rubio tomando un trago de su café.
—Sí, gracias por eso... perdí una oportunidad de verlo, de que me explicara que había pasado.
—Bueno Kao te voy a decir algo y espero que no te lo tomes a mal—. Dejo la taza sobre la mesa, para apoyarse colocando sus manos debajo de su barbilla —Pero, ¿que tenía que explicarte?, se supone que ustedes dos tenían un trato, el cual termino en el momento que se realizó la fiesta de cumpleaños de tu padre, ambos cumplieron con su parte, ¿qué esperabas que hiciera?
