Pablo Gavira no se imagina del abuso que empieza a generarle su más grande amor... Robert Lewandowski.
A lo mejor su inocencia o ingenuidad no lo dejan notar que cada vez su relación con el mayor ya no es igual que antes.
¿Qué tan lejos puede llega...
Había pasado la noche y me encontraba en el sillón que había en la habitación de Klara, me dormí con mi bebé en mis brazos, realmente estaba triste por mi situación con Robert, pensé que a lo mejor durante la noche me pediría perdón y arreglaríamos este inconveniente.
Pero no sucedió, ¿Acaso este era el fin? Yo sabía que cuando Robert decidiera romper nuestro lazo sería lo más doloroso. Realmente tenía miedo de que eso pasara, pero, ¿Cuánto más podría soportar los desprecios de él? ¿Le rogaría que no se fuera de mi lado?, No lo sé, realmente lo amo aún sobre todo lo que últimamente me ha hecho, yo le pertenecía desde el primer momento que nos unimos.
Con temor abrí la puerta del cuarto y baje a la cocina, deje a Klara en la cuna, al parecer ella también había sentido mi tristeza y se quedó despierta conmigo hasta tarde.
Cuando llegue, lo encontré en el desayunador al parecer estaba tomando el almuerzo, me miró y sentí un escalofrío
- ¿Te hiciste de almorzar tu? - Ajam... - Pero, ¿no prefieres que te haga algo yo? - ¿Qué me puedes ofrecer tu, que no me pueda ofrecer cualquier otro Omega?
Auch... Eso me dolió, ¿Me estaba descalificando? ¿Realmente existía Omegas mucho mejor que yo? Por supuesto, no le contesté y solo procedí a preparar el biberón de Klara, en la madrugada le había comentado a Ansu lo que había pasado por medio de mensajes y el me invitaba a salir a despejarme, no quería seguir atormentando me con la situación presente, así que acepte, dejaría a mi bebé con mamá debido a que no quería exponerla tanto y luego me iría con él.
Robert se levantó del lugar donde se encontraba y me tomo de los hombros sin una pizca de delicadeza.
- Con respecto a lo de ayer... - No quiero hablar de ello Robert.
Frunció su entrecejo y con una cara de molestia me sujetó más fuerte de los hombros.
- Te callas y me escuchas. -... - No quiero que le digas a alguien sobre lo de ayer y pobre de ti si me llegó a enterar. - No lo haré. - De una vez te comento que mañana partimos a lo del torneo y Klara se va a quedar con tu madre desde hoy. Así que vete despidiendo de ella. ¿Entendido? - Si Robert.
¿Porqué me dejaba manipular por el?, Simplemente no lo entendía, a lo mejor solo era mi Omega obedeciendo a su Alfa sin que yo lo deseé, tome el biberón preparado y cuando estaba a punto de salir, él me tomo de las mejillas y las presiono con fuerza.
-Eres mio Omega, que te quede claro - Si Alfa
Me beso, pero no de la manera suave que lo solía hacer, era un beso brusco y ni siquiera me dejaba respirar. Me soltó y subí corriendo a la habitación de mi bebé; ese no era mi marido, él no hacia esas cosas, él me trataba con amor y delicadeza, él me prometió ser fiel hasta la muerte.
¿Pero la muerte de él o la mía?
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