Pablo Gavira no se imagina del abuso que empieza a generarle su más grande amor... Robert Lewandowski.
A lo mejor su inocencia o ingenuidad no lo dejan notar que cada vez su relación con el mayor ya no es igual que antes.
¿Qué tan lejos puede llega...
Al parecer durante el transcurso del camino me quedé dormido, mi buen ánimo había tenido un cambio drástico, me sentía triste por el cambio de actitud de Robert y porque ya me había acostumbrado a estar casi o todo el día al lado de mi pequeña bebé. Solo faltaban algunos minutos para llegar al aeropuerto y despegar a ¿Estados Unidos? Creo que algo así escuché.
- Mi vida, perdóname, no era mi intención hablarte así, no se que me pasó - ... Rob ya lo habíamos hablado, se supone que intentarias cambiar. - Gavi, sabes que no es fácil para mí, así es mi instinto, yo te lo dije cuando decidiste enlazarte a mi. - Pero Rob, si realmente me amas puedes cambiar por mi. - ¿Porque yo tengo que cambiar y no tu? Así soy Pablo, así me tienes que aceptar... - yo no tengo que cambiar porque yo no te he hecho daño, yo no te he lastimado y... Yo no te he cambiado...
Su expresión tuvo un cambio radical, giro su rostro hacia todas las direcciones revisando que nadie nos estuviera viendo, todos se encontraban dormidos y no lo podía creer..
Sus largos y fríos dedos presionaron alrededor de mi cuello y el paso de aire hacia mis pulmones se hizo más lento.
- ¿Qué parte de supéralo no entiendes? Yo te di mis razones del porque lo hice, nunca lo había hecho y solo fue esa ocasión. Supéralo Gavira y agradece que aún sigo contigo
Su agarre se hizo cada vez más fuerte y sentía la falta de aire que me hizo tratar de respirar por mi boca.
- N-no puedo s-superarlo Robert, t-te di todo de m-mí y así me p-pagaste.
El iris de sus ojos cambio, ya no eran de ese color azul precioso que yo tanto amaba, eran rojos éste Alfa no era el mío, a éste Alfa no le importa acabar con mi vida en este instante; mis lágrimas comenzaron a derramarse por mis mejillas y soltaba pequeños sollozos con el poco aire que estaba tomando, colocó su otra mano sobre mis labios con el fin de callar los hirpidos que soltaba.
Una desesperación entro en mi, me estaba bloqueando la manera de respirar y, en mi miedo, mordí uno de sus dedos para que me soltará, y así sucedió, soltó su agarre de mi cuello y solo pude toser por el repentino pase de aire a mis pulmones.
Me sujeto de la sudadera y de una manera brusca me acercó a él.
- Te conviene no decirle nada a nadie y si lo haces juro que la próxima vez que estés entre mis manos no voy a dudar en dejarte sin respirar.
No podía con el miedo, me acababa de amenazar y su actitud había logrado intimidar me ¿realmente la muerte nos separaría? Si...
Pero esa muerte lo más probable es que sea la mía.
Cuando escuchó que nuestros compañeros del al lado despertaban (Ferran y Balde) me besó, pero de una manera tosca, olvidaba que aún seguía en celo y al parecer usaria eso de excusa para que nadie descubriera lo que acababa de hacer.
- ¡Pero no coman delante de los pobres!, Que no todos tenemos la ventaja de tener pareja - Cállate Ferran que nadie tiene la culpa de que tú estés solteron - Que gilipollas eres conmigo Araújo, mejor duérmete otro rato
Si yo llegase a morir ¿Quién se daría cuenta?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Perdón por no haber actualizado el día de ayer, tenía demasiado sueño y desperté hasta el día siguiente, una disculpa 😪
