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-"La situación actual no se ha salido de control. Se mantiene en curso" Makima comentó observando hacia la ventana desde su oficina, con su rostro apoyado en una de sus manos, una sonrisa dibujada en su rostro con gusto "El aroma a sangre llega hasta aquí..."

-"Se supone, que eres inmortal o algo así, no es cierto?"

Cuando escuchó tu voz, simplemente se volteó para recibir una bala en su craneo, la cual pronto se recuperó y te dedicó una sonrisa.

-"Sigues viva? Juraría que tendrías que haber muerto..." murmuró y dirigió su mirada al arma que tenías en tu mano

Se mantuvo un segundo en silencio al notar que contabas con algo bastante familiar, un arma de fuego muy peculiar. 

-"Eso es algo bueno que tengo" le sonreiste volviendo a disprarle "Soy terca para morir"

Continuaste disparandole sin parar, mientras te ibas acercando.

-"No tiene caso que continues con eso, solo sigues matando gente en lugar de matarme a mi" comentó recibiendo todos los disparos sin darle importancia "Esa arma... Aún no se le han acabado las balas..."

-"Te diste cuenta ahora?" Quedaste frente a ella, el cañón del arma en su cuello "Te presento a mi nueva arma, el demonio pistola"

Apoyaste tu frente contra la suya, mirandola fijamente a sus ojos.

-"Te mataré tantas veces que no vas a querer volver a vivir de nuevo" le dijiste con suavidad

Sangre cayó de tu boca, esta llegando a manchar a la mujer que estaba frente a ti.

-"No creo que te quede mucho tiempo de vida" mencionó ella sonriendo "Podrás matarme antes de morir?"

Cuando acabó con esa frase disparaste enseguida de nuevo en su cabeza para luego llenar de agujeros su cuerpo con más balas.

Quizás te molestaría el hecho que simplemente estaba recibiendo los ataques, pero estabas alegre de lo engreida que era.

Estaba haciendo justo lo que querías. 

-"No vas a poder-" empezó a decir y vió su camiseta, sus heridas aún sangrando sin detenerse, miró a los lados y luego a ti

-"Nadie va a venir por ti, no vas a tener a nadie más a quien controlar o que muera por ti" dijiste "Todos en este edificio han muerto con una bala entre sus ojos..." volviste a disparar

En ese instante, Makima intentó hacer un movimiento para esquivarlo, pero su cuerpo se lo impidió por un instante.

-"Las balas no han salido..." ella murmuró

-"No... Están rebotando en tu interior haciendo mierda todas tus tripas" sonreiste "Vamos a probar algo..."

Murmuraste alzando el arma de nuevo, apuntando a su cabeza. 

-"Puedes controlar a las personas si tu cerebro queda hecho puré?"

Cold - Aki x LectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora