𝗟𝗼𝘀 𝗽𝗮𝗱𝗿𝗲𝘀 𝗱𝗲 𝗦𝗽𝗿𝗲𝗲𝗻 ❝𝗥𝘂𝗯𝗲𝗴𝗲𝘁𝘁𝗮 𝘆 𝗦𝗽𝗿𝘂𝗮𝗻❞

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━ Más te vale no confundirte de lugar otra vez. Spreen alías Iván de Luque ━ Un castaño le dió una pequeña hoja de papel con una lista de cosas.

━ ¿Se confundió de supermercado? ━ Intento ahogar Juan una pequeña risa eu quería soltar.

━ Más de una vez ━ Mencionó el otro padre de Spreen, haciendo que Juan logré escapar una risa, recibiendo una mala mirada.

━ Sho solo me equivoqué una vez, ni que fuera él fin del mundo ━ Tomó el papel para salir de la casa.

━ Mientras Spreen va a comprar las cosas... Tú y yo iremos a arreglar algunas cosas en la cocina ━ Juan se sentía algo nervioso al tener que pasar a solas con el castaño.

━ Yo iré a traer algunas de mis cosas ━ El siguiente en irse de la casa era el pelinegro de ojos morados.

Ambos fueron a la gran cocina a sacar los platos y utensilios. El castaño informó que también los tíos de Spreen vendrían a pasar la navidad con ellos. Algo que puso más nervioso a Juan.

━ Yo lavo y tú los pones aquí para que se sequen más rápido ¿Okey? ━ El otro asintió a las órdenes de su suegro.

Mientras el híbrido lavaba los platos se acordó de la petición del otro.

━ ¿Aún quieres saber cómo nos conocimos yo y Vegetta? ━ Preguntó mirando al chico.

━ Sí-sí no es mucha molestia, claro ━ Río algo nervioso. Su curiosidad a veces lo hacía avergonzarse sin saber.

━ Fue algo bastante... Extraño como nos conocimos... Creo que empezó cuándo me mudé a Karmaland ━ Alzó su cabeza mirando al techo mientras parecía intentar recordar.

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Un híbrido veía el cartel del nuevo pueblo dónde habitaría. "Bienvenidos a Karmaland, hogar de un bello pueblo y muchos lugares bellos"

El chico bajaba por la gran colina hacía el pueblo, podía ver las casas y negocios que habían. Al entrar veía a las personas pasar mientras el aumentaba el agarre de las tiras de su mochila. Estaba nervioso. Captó su mirada en un pelinegro con ojos morados y una vestimenta algo rara.

Se acercó a él mientras evitaba chocar con alguna persona. Al estar frente a frente se armó de valor para lograr hablarle.

━ ¡Ho-hola! ━ En tan solo esas palabras llamó la atención del pelinegro ━ Eh... ¿Podría indicarme dónde está la alcaldía? Es que recién llegó y... ━ Las palabras no lograban salir sin trabarse o hacer una pausa.

━ ¡Claro! Me llamó Samuel de Luque, pero me puedes decir Vegetta. ¿Y tú? ━ Se presentó Vegetta dándole una suave sonrisa al híbrido.

━ Ah, ah... Rubén Doblas... Pero me dicen Rubius ━ Sonrió algo nervioso mientras sentía sus mejillas algo ardidas por los nervios.

━ Bonito nombre... Veo que eres un híbrido de oso pardo, no solemos tener muchos híbridos por aquí. Ven, te llevaré a la alcaldía ━ Agarró la mano del híbrido sin previo para ir en dirección de la famosa alcaldía.

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━ Fue mejor que la vez que yo conocí a Spreen... Al principio digamos que nos odiabamos y terminamos así ━ Rieron ambos.

━ Luego de eso creo que mande a hacerme una casa, y viví muchas aventuras con él y con los demás, muchas cosas la verdad. Pero fue una hermosa experiencia, hasta ahora ━ Añadió mientras seguía con la mirada en los platos.

━ Seguramente una muy buena experiencia ━ Sonrió Juan mientras seguía colocando los platos mojados en el pequeño estante dónde estaban ya algunos.

━ ¡Volví! ━ Se escuchó una voz con acento argentino. Dando a entender que Spreen ya había llegado.

Spreen se acercó a la cocina para ver a Rubius y Juan lavando los platos y utensilios. Dejo las bolsas en la mesa mientras se ponía al lado de su madre.

━ Más te vale no hayas comprado algo que no estaba en la lista ━ Rubius se quitó los guantes de plástico que llevaba para dejarlos en el fregadero y acercarse a la mesa, seguido por la pareja.

Sacaba las cosas mientras los otros dos solo observaban. Sus ojos se abrieron como platos Informando a Juan y Spreen que había algo fuera de lugar.

━ ¿Por qué hay una lata de Monster... Iván? ━ El nombrado trago duro, pensó que su madre le restaría importancia.

━ ¿Habéis traído ya todo? ━ Spreen agradeció mentalmente a su padre que había llegado.

━ Tu hijo compro una bebida energética sin mi permiso ━ Juan quería reír en ese momento, vió que su pareja se había vuelto de piedra al escuchar su nombre.

━ Déjalo, ya tiene 22 años. No es para tanto  ━ Recibió una mala mirada de Rubius por no estar de su lado.

━ Digo... ━ Captó la mirada de Rubius para mirar a su hijo y ponerse en un semblante "serio" y cruzar sus brazos.

━ La bebida quedará confiscada hasta navidad ━ Desvío su vista de Spreen para agarrar la lata y irse de la cocina.

━ Me siguen tratando como un adolescente de 17 años... ━ Susurró Spreen para avisar con la mirada a Juan de ir a su habitación.

Al entrar Spreen se lanzó a su cama para dirigir su vista al techo.

━ Tus padres se llevan bien a mi vista... Me preguntó porqué se divorciarían ━ Se sentó Juan en la orilla de la cama para colocar su mano en el cabello de Spreen.

━ Y más si es para conspirar en mi contra ━ Logró sacar una risa de Juan. Sus nervios desaparecían de a poco.

━ Quizás mañana les pregunté otra cosa ━ Sugerió Juan para recibir una almohada en su rostro.

━ ¡Más te vale no sea nada vergonzoso sobre mí! ━ Se dió la vuelta para darle la espalda a Juan.

━ Si sigues así sí ━ Advirtió Juan mientras se acostaba al lado de Spreen.

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Hello.
¿Que tal? Espero estén bien.
Aquí el tercer capítulo y espero les guste.
¡Nos vemos!
¡Bye!