𝐒𝐓𝐀𝐍 𝐓𝐖𝐈𝐓𝐓𝐄𝐑 | heesun au.

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Las siguientes semanas para Sunoo pasaron casi volando, entre las prácticas intensivas, las visitas a Sunghoon durante su recuperación, los mensajes con Heeseung y su amistad creciendo en Jungwon no notó lo cerca que estaba su tour, faltaba solo una semana para el primer concierto y los nervios le quemaban, más por todas las preocupaciones que dejaba en su país que por otra cosa.

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—¡Buenos diaaaaaas!—Entró a la habitación en la que Sunghoon había estado internado el último tiempo viéndolo sentado sobre la cama.

»¿Cómo dormiste?. Preguntó al no obtener respuesta, ni siquiera lo miró.

—Bien, ¿Él no vino cierto?—Sunoo frunció el ceño.

—¿Quién, Jungwon?, Creo que justo ahora está en la universidad, ¿Quieres que le hable?—Sunghoon negó.

—No, hablaba de Jay.

Jay.

Bien, era probable que incluso si Jongseong no iba volver a acercarse a Sunghoon él terminó de encargarse de que definitivamente estuviese lo más lejos posible hace unos días.

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Bajó de la camioneta y cerró la puerta con más fuerza de la debida, entró al edificio en búsqueda del ascensor y marcó el piso que se sabía de memoria. Jay le había llamado ese día para preguntar si Sunghoon estaba bien, porqué él sabía, maldición, Sunoo estaba seguro de que sabía lo que pasaría después de haber estado en su casa y ni siquiera lo pensó, nuevamente el mayor solo estaba pensando en él.

El tono de llamada se escuchó tres veces.

"¿Hola?"

"Estoy afuera, ábreme" El trigeño del otro lado de la línea percibió la voz tensa del menor pero sin ánimos de preguntar simplemente obedeció.

"¿A dónde vas?" Preguntó la chica que yacía a un costado de su cuerpo en el sofá viendo una película.

"Sunoo está en la puerta, vendré en un segundo, me cuentas que pasa mientras no estoy ¿Sí?" Ella asintió cerrando los ojos y él dejó un beso sobre su frente.

Se acomodó un poco la ropa antes de aclararse la garganta y abrir la puerta, lo siguiente que sintió antes de siquiera verle el rostro al que solía ser su amigo fue un golpe. Toda la extensión de la mandíbula le ardió y por el sonido pensó que tal vez se la había sacado de sitio.

Aún así se mantuvo quieto, no sabía si por la sorpresa o por el miedo. Sunoo jamás había golpeado a nadie o por lo menos eso tenía entendido, él ni siquiera sabía que el contrario tenía idea de cómo usar los puños pero por la fuerza de su golpe temió que de empezar una verdadera pelea terminarían bastante heridos.

"Casi se mata por tu culpa..."

Jay sabía que Sunghoon cargaba con una depresión agravada desde antes de conocerlo, sabía que solo hacía falta un detonante para hacer que perdiera la poca estabilidad que tenía pero aún así, él había sido el detonante y eso jamás se lo perdonaría, mucho menos cuando a pesar de la rabia que parecía tener Sunoo en su mirada de su ojos bajaban lágrimas a borbotones.

"No quiero que vayas a verlo, no quiero que te acerques, no quiero que le hables, haz como si jamás lo hubieses conocido porqué tu explicación de mierda casi me lo quita..."
El más bajo sentía el temblor de sus labios y como su rostro ahora parecía ser un desastre pero no importaba, nada era más importante que Sunghoon.

»Y te juro Jongseong que si por tu culpa me lo arrebatan, con mis propias manos voy a matarte a golpes.

Park quiso decir que eso sería un premio en lugar de un castigo pues de esa manera no tendría que cargar con todo eso, pero Sunoo no quería saberlo, no le importaba ahora y él lo sabía, así que simplemente asintió.

"Bien Seonwoo, lo lamento"

El menor se secó las lágrimas y antes de darse media vuelta para salir escupió en la entrada, porqué quería dejar en claro lo que pensaba de él y de toda su mísera farsa. Estaba seguro de que el contrario también sufría, nadie puede amar tanto a una persona y solo dejarla ir sin sentir nada pero no podía perdonarlo por eso, incluso si Sunghoon alguna vez lo perdonaba para él sería casi imposible hacerlo.

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