Mrr (05)

971 125 3
                                    

Solo habían pasado unas semanas desde la llegada de las personas del cielo, una semana en que el insomnio atacaba a Eyi con el miedo de volver a ese tan oscuro lugar.

Solo había alguien que podía darle respuestas, y era la Gran Madre, solo, si tan solo respondiera, allí conectada al árbol de las almas tontamente sola, se sentía como si la gran madre le hubiera dado la espalda.

Anteriormente sentía cosas extrañas en Pandora, como los animales la buscaban, como las plantas se aferraba a ella, la manera sin importar que siempre estaba a salvo, y el como las semillas del árbol sagrado se acercaban a ella cuando se encontraba sola. Los espíritus puros las buscaban y ella no entendía el porqué.

Y luego de estaban sus sueños, sus malditos sueños, su Pandora perfecta solo lograba confundirla más. Allí se sentía tan poderosa, ella y el bosque eran uno, las plantas se movían como ella ordenase,  el agua de levantaba cuando ella lo pedía.

Incluso habían sido sus sueños quienes les habían indicado la manera correcta de lidiar con si Ikran.

Y desee esa noche sus sueños eran simplemente dolor, una y otra vez.

Sin poder evitarlo comenzó a llorar a los pies de la Gran Madre pidiendo por ayuda.

—Eyi.— La voz de su abuela a su espalda la asustó, rápidamente seco sus lágrimas y volteo a ver a la mayor— ¿Qué sucede niña?

—Abuela, yo, no lo sé, estoy muy confundida y, algo raro me está pasando, necesito respuestas de la Gran Madre.

—Niña, parece que olvidas quien es la Tsahik, cuéntame que te atormenta.

—Creo que es Eywa abuela, algo quiere de mi y no sé que es.

Eyi lo soltó todo, las experiencias, los sueños y el como sentía a Eywa en todos lados, y sabía que su hermana también, aunque no parecía darse cuenta.

Mo'at escucho todo atentamente, cada palabra que su nieta decía confirmaba las sospechas que ya tenía, Eywa las había elegido y aunque hace años que lo sabía, no se imagino que tal regalo lastimara de esa manera a su nieta.

—Abuela ¿La Gran Madre me odia?

—Oh, dulce niña, Eywa no odia, ella te ha dado un regalo, un don, que debes prometerme mantener en secreto hasta que la Gran Madre revele sus planes, debes practicar, perfeccionar, y pronto Eywa se revelará ante ti.

Y esa noche Eyi le prometió a la Tsahik que nunca hablaría del asunto hasta que Eywa se mostrase, y la canción que marcaría a la joven Na'vi fue cantada esa noche, un futuro de desafíos se abría ante ella.

Y esa noche Eyi le prometió a la Tsahik que nunca hablaría del asunto hasta que Eywa se mostrase, y la canción que marcaría a la joven Na'vi fue cantada esa noche, un futuro de desafíos se abría ante ella

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Hi, mañana publicaré el "Acto 2" y de allí tal vez dure unos días sin publicar para poder adelantar la historia.
Muchas gracias por todo el apoyo que le están dando.

AVATAR: El camino de Eyi.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora