CAPITULO XVI

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Pasadas las 9 de la mañana un conjunto de SUV's negras pararon frente a un conjunto de pulcros edificios y de ellas, de forma completamente ordenada, descendieron un conjunto de 4 figuras, una de ellas claramente diferenciable a causa de su complexión más pequeña. A pesar de las miradas curiosas se encaminaron con determinación hacia el edificio gubernamental y una vez dentro el joven, claramente humano, se dirigió a la recepción para hacer saber la razón de su visita. Pasando cerca de 10 minutos unos tacones se escucharon en el piso en el piso de cerámica, rítmicamente y con estilo acercándose a los invitados. Justice, Tiger y Fury se levantaron con rapidez ante la mujer, que con su postura firme reafirmaba lo que sus insignias ya expresaban al mundo.

– Bienvenido señor Justice North, es realmente un placer atender a su llamado, pero por favor, acompáñenme hasta mi despacho. Estaremos más cómodos y lejos de oídos indiscretos. – miro hacia atrás, hacia los sofás donde esperaban hasta recién – Jack, también es un gusto reencontrarnos después de que ¿4 años? Ay qué pena, no recuerdo – menciono con una risita disimulada, como si hubiera hecho una broma que solo ella entendiera – Si... casi son 4... – dijo Jack sin mirar a nadie en particular – Bueno, manos a la obra. Si tienen la amabilidad de seguirme hasta el ascensor, mi oficina está casi en el último piso para usar las escaleras y como seguro se dará cuenta a medida que nuestro contacto aumente: no soy alguien a quien le gusta perder tiempo innecesario – dándose la vuelta con una ligereza impropia para alguien con esos tacones y sin fijarse si sus invitados la acompañaban se dirigió con gracia a pedir el ascensor y solo cuando este abrió sus puertas es que giro su cabeza encontrándolos a unos pasos detrás de ella.

Oficina de Emilia Bernnes, Washington DC

Justice entro a la oficina, era espaciosa y con muebles elegantes, con toques femeninos pero sutiles y todo organizado con un minucioso orden. Deje de mirar los alrededores para concentrarme en la mujer frente a mí, quien esperaba pacientemente a que nos acomodáramos

– Por favor: tomen asiento – dijo mientras señalaba hacia un conjunto de sillas de caoba y mientras ella también se sentaba detrás de su escritorio – A pesar de que no tengo la menor duda de que saben quién soy me tomare el atrevimiento de presentarme de igual forma – su postura paso a ser mucho más militar – Soy la Teniente General Emilia Bernnes, bajo mi cargo se encuentra un equipo táctico especializado en misiones de orden confidencial. Nuestro tiempo no se gasta en simples misiones de reconocimiento o trabajos de campo, o no, a nosotros nos llaman cuando se necesita atrapar a verdaderas mierdas de la humanidad: Tráfico de órganos o de personas, cárteles criminales, Mafia italo-americana y por supuesto mantenemos un seguimiento de carácter personal sobre del caso de la ONE, aunque entiendo que su justicia es más que eficaz, no quita que nos agrada estar pendiente para cuando necesiten cualquier tipo de ayuda de parte de este gobierno... cosa que al parecer ocurre en estos momento – un ligero suspiro escapo de sus labios y mientras se recostaba en su asiento paso la mirada por todos para volver hacia donde yo estaba acto que tome como el final de su parte.

– Teniente Bernnes, en nombre de mi gente quiero agradecer su tiempo y su predisposición hacia este caso. Es verdad, la ONE comúnmente no recurre mucho al gobierno pues son nuestras batallas y estamos orgullosos de saber cómo lucharlas... pero hemos caído en una situación que se nos va un poco de las manos, al macho humano que buscamos castigar no es uno más del montón, es alguien con influencia internacional y se nos ha dicho que incluso tiene sobre su cabeza la etiqueta de "intocable" – la joven Bernnes se movió hasta su librero y saco una carpeta de archivos – Ah sí, Robert Hilliard, el magnate de oro del Reino Unido – dijo abriendo la carpeta – el único caso que le hizo bajarle los humos a la SIS lo suficiente como para pedirnos colaboración para seguirle el rastro y atraparlo – Miro sobre sus papeles hacia nosotros – cosa que claro es más fácil decirlo que hacerlo. Aun así me equipo se ha mantenido como águila sobre él y todos los resultados de dicha investigación están en esta carpeta, carpeta que con gusto compartiré con usted Sr. North para que se dé una idea del nivel de poder que ejerce esa escoria. El tipo es astuto y tiene contactos por toda Europa y Asia. De nacimiento humilde, logro con el tiempo ganarse un el favor de una familia mafiosa de importancia italiana, por lo poco que se sabe al parecer salvo a la hija de un alto mandatario de un ataque rival y eso le abrió varias puertas al seno de la familia por una deuda de vida. Se elevó en estatus y se hizo de colegas por su aparente encanto y mente ágil, cuando el jefe de la familia murió, y al contrario de lo que dicta la tradición, lo nombro como su sucesor y ese fue el último empuje que necesito: con eficacia empezó a aumentar su capital y sus influencias, nada parecía detenerlo, ni siquiera las barreras internacionales. Negocios acá, negocios allá y al cabo de una década estaba por encima de la cabeza de todos, incluso, y aunque no quieran admitirlo, del mismo Gobierno Inglés. – un ligero silencio se hizo presente en la habitación – Bueno... diría que ahora sería el momento en que usted me comparte a mí el por qué la ONE está interesada en Robert Hilliard y en los servicios de mi equipo.

Me gire hacia Tiger quien me paso un sobre desde su chaleco y yo se lo entregue a ella mientras empezaba a hablar – Teniente Bernnes, seré sincero, a pesar de que no puedo concederle la totalidad de los datos ya que son confidencia total de mi pueblo, en este sobre encontrará detalles específicos de la relación que tiene Hilliard con mi gente. Para ser escueto, tenemos en nuestras manos una confesión firmada que lo ancla como el principal benefactor de una Instalación de pruebas recientemente descubierta y también como el culpable de un atentado que el Homeland sufrió hace apenas 3 días a manos de un grupo de mercenarios altamente calificados. – La joven tomo el sobre y empezó a inspeccionar los detalles – ¿...Mercenarios...? Vaya...de los 2 años y medio que llevamos investigándolo jamás había echo una movida tan arriesgada ¿Por qué será? ¿Qué lo trae tan desesperado como para moverse contra la suerte de dejar rastros de sus acciones? – ambas preguntas dichas más para ella misma que para otra persona. Levanto su mirada hacia mí – Muy bien Sr. North, acaba de entregarme los principios de las pruebas más irrefutables en contra de Hilliard, que no le entre dudas que mi equipo está completamente a su servicio – sonriendo añadió – cosa que hubiéramos hecho incluso sin esto –dijo alzando los papeles – pues no hay miembro de los míos que no simpatice completamente con su causa. Se dará cuenta, cuando nos conozca, que sabemos muy bien lo que es maniobrar contra la burocracia para ganar nuestro merecido lugar.

Completamente complacido por cómo habían ido las cosas Justice miro a sus a sus hombres buscando su opinión y lo que encontró solo fueron miradas de aprobación y que confiaban en su juicio. Parándose de su asiento le tendió la mano a la Teniente Bernnes – Entonces es un hecho, la ONE le brinda nuestra confianza y nuestros recursos a usted y su equipo. A partir de ahora estarán bajo la jurisdicción y protección de nuestra gente – la Teniente le tendió la mano sin miramientos y manteniendo una sonrisa. Yo me gire hacia mi costado, hacia donde estaba Fury – Como entenderá es necesario que todo el equipo firmen una serie de acuerdos de confidencialidad, con respecto no solo al caso sino a todo lo referente a lo que presencien dentro de los muros del Homeland. Seguro entenderá que lo que más apreciamos es mantener nuestra privacidad ante todo – Ella fue a tomar la carpeta – Por supuesto Sr. North, no esperaría menos. Tendrá todo el papeleo en regla en menos de una hora. ¿A dónde deberá ser enviado? – Pregunto y fue el hermano de Jessie quien respondió – Los papeles por esta ocasión envíamelos directamente a mí – le tendió una tarjeta – Esta es mi dirección – Ella miro por unos instantes la tarjeta para luego sonreír de medio lado y decirle – Vaya... ¿Al fin cambiaste de oficina? Y pensar que nunca quisiste darme la razón cuando te decía que el lugar tenía una pésima ubicación.

De acuerdo... esto es interesante. Sin dudas le preguntare a Jessie mas tarde qué onda con estos dos. Mire a Tiger y por su sonrisa disimulada sé que llego a la misma conclusión, le hice una ligera seña hacia mi reloj, luego incline ligeramente mi cabeza hacia la pareja de enfrente para terminar tocando mi anillo de casado. Ambos sonreímos con total complicidad: Ahora Jessie nos debe a ambos el chisme amoroso.



Hola mis Estrellitas bonitas ¿Como se encuentran? Oficialmente vuelvo a publicar después de un año. Vengo a darles un regalo doble ya que publicaré en breve los 2 capítulos que ya tengo listos para no hacerlas esperar mas. He tenido unos días ocupados entonces no tengo mucha cabeza ni tiempo para seguir mas que algunas oraciones y pues así no se avanza muy rápido que digamos...

Bueno, mis queridas estrellas espero que les guste como sigue la historia y espero volver a engancharlas con esta. 💕

 Lxs amo! Nos vemos entre las constelaciones.✨☄️Estrella Mayor ☀️

OriónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora