19. Zugzwang

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La vez que Jimin llegó a su habitación con un juego de ajedrez, justo después de haber bebido por la noche y haber besado a Yoongi, Jungkook le sonrió a pesar de estar sintiéndose mal física y anímicamente.

Y a pesar de querer llorar por el revoltijo en su cabeza.

— ¿Cómo es que están con esa cara, pero a Yoongi no se le nota? — pregunta Jimin riéndose por la resaca de su hermano— ah, yo también tengo ganas de beber— le dice acariciando su abultado vientre— será en unos meses

— Y creo que él bebió más que yo, ni siquiera lo recuerdo bien

— Pues se ve fresco como una lechuga— menciona Jimin, Jungkook sonríe, algo así solía decir su madre— ¿quieres jugar? — pregunta Jimin mostrando el tablero en sus manos— Yoongi lo tenía en su habitación

— Ah, pero siempre me ganas

— Te enseñaré algunos trucos mientras tomas agua y un par de aspirinas

Jungkook tomó dos pastillas y Jimin le trajo una jarra de dos litros de agua que le dijo que debía terminar ese mismo día.

Y le explicaba diferentes movimientos del juego que él mismo había aprendido de libros viejos.

Jungkook intentaba prestar atención, pero sus ojos se iban al vientre de su hermano, donde estaban los gemelos, sus gemelos, de Jimin y Yoongi, y lo hacía sentir inquieto.

Extremadamente culpable.

— Jimin...— le llamó en ese momento, su hermano levantó la vista y lo miró a los ojos

— ¿Sí?

— ¿Qué se siente estar embarazado?

— Mmm... es pesado— dice— muy incómodo y me da miedo que termine también, el parto no suena a una buena experiencia y tu sabes que no estoy seguro de quien son— comenta en voz baja— es una intriga horrible ¿Qué tal si me equivoco? Aun puedo retractarme, pero ¿si me equivoco? todo se va a la mierda, es más, no importa si tengo razón, igual es una mierda— suspira

— Lo sé, lo siento mucho Jimin, si yo pudiera tomar tu lugar, lo haría

— Ya es tarde para eso— dice su hermano— he pasado por mucho como para comenzar a arrepentirme ahora, he tenido que perder... todo, para llegar aquí

¿Y todo lo que he perdido yo? Quería preguntar Jungkook, pero Jimin solía hablar en primera persona, y Jungkook entendía, porque Jimin era quien perdió la razón enamorándose de monstruos una y otra vez.

Aunque luego los monstruos perseguían a Jungkook, él aún tenía pesadillas.

— Incluso si esta no es la vida que quiero— continúa Jimin

Es la vida que me gustaría. Piensa Jungkook, porque él quiere hijos, un esposo y un hogar cálido.

— Pero Yoongi es... ¿es otro más como ellos? — pregunta Jungkook— ¿es una mentira? ¿Es tu destinado?

Ve a Jimin mirar a sus manos, luego sonríe, y aquella chispa de esperanza que él mismo desconocía desapareció cuando escuchó su respuesta.

— Afortunadamente si

Entonces no había nada que hacer, nada que intentar, tan solo mantenerse alejado de Min Yoongi y aquella extraña sensación que él le causaba, fuera deseos, fuera ideas raras, fuera traición, no hay más de eso.

— Pero él te engañó— menciona Jungkook— algunos días regresa con el aroma de un omega encima ¿cómo es posible que...?

— No lo hizo, hablé con él— le interrumpe Jimin— es parte de su plan, él no podría, los destinados no pueden engañarse así

Zugzwang | Yoonmin | OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora