La esclava de Kripton (Supercop)

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-¿Héroe o enemigo del mundo?

Leía del periódico en voz alta mientras negaba lentamente, esos humanos eran graciosos. Mientras algunos decían que era un enemigo, una comunista que quería gobernar, incluso una terrorista... otros decían que era una libertadora, una emprendedora a un futuro mejor. Que era la diosa que tanto estaban pidiendo.

-La gente es increíble...

-Son unos tontos, no eres una enemiga o una... villan. Yo creo que eres una buena persona.

Dijo la pequeña Minte, ambas chicas estaban juntas en el sofá. Una miraba las caricaturas mientras que la otra veía el periódico, Catco-Media siempre escribía cosas interesantes.

-¿Cultos a alienígenas? La hacen llamar Supergirl... La mujer que no sangra.. sin debilidades...

Arqueaba una ceja mientras seguía leyendo, Minte solo reía un poco. Había pasado un año y medio desde que ella la había acogido, bueno.... A ella y a  otros más, Kara acogía a varios alienígenas o personas con poderes que eran tachados de monstruos en su hogar y otros más en un área bajo su casa. Un especie de Bunker o instalaciones que ella había construido en poco menos de un mes gracias a sus poderes. Había usado Vibraniun, un metal que consiguió en lo más ondo del mar Atlántico, un metal aún no descubierto por el ser humano. Y uno que ella había minado casi en su totalidad.

-Kara!! Barry tomó mi shampoo... otra vez!

-Frost... No tienes pruebas.

Escuchaba pelear Kara desde la otra habitación, una pequeña risa escapó de sus labios. Había aprendido a tomar a todos como su familia. Por lo que cada pelea le era agradable, pues eran familiares... nada fuerte.

En su hogar había de todo; Velocistas, Marcianos, Marcianos blancos, Coluanos, Naltorianos, de todo un poco. Y era feliz asi... todos habían sido abandonados, dejados de lado, en todos había algo que los unía.

-Vengo ahora, Minte.

Dijo, para ponerse de pie y ir a donde aquellos dos estaban peleando por el shampoo.

-Parecen niños... vamos, luego iré de compras y traeré de todo, pueden acompañarme incluso.

-¿Salir?

Se vería asomado a Cisco por uno de sus portales, interesado en salir junto a ella y comprar quizás algunas piezas electrónicas que necesitaba.

-Ujummm...

-Me apunto- yo también.

Dijeron velocista y su amigo, ganandose un asentimiento por parte de la mujer de acero. Frost solo se había encogido de hombros, prefería quedarse junto a Minte, Brainiac, Nia y John.

-¿Qué esperan?  Los quiero ya vestidos, salimos en di--

-Kara...

Un susurro la llamó, uno debil y asustado... esperen... ¿Eso eran disparos?

-Mierda!! Todos entren al bunker!!! Ahora, entren!! Nos encontraron, ahí estarán a salvo...hay comida para dos años. Sólo salgan cuando les diga.

La desesperación en su tono les asustó, sin perder tiempo fueron al bunker, encerrandose mientras la mujer de acero salía.

- No... Minte...

La pequeña estaba en el suelo, ensangrentada mientras lloraba.

- No, no... No!!!

-Ka...ra...

No tardó en correr a su lado, siendo testigo de su último suspiro, su último larido. No había podido protegerla, ella... No había sido lo suficiente fuerte.

-Malditos!! Van a pagar, os juro que los haré trizas...

Gritaba, mientras sostenía aquél cuerpo pequeño y ahora frío en sus brazos. Sus ojos se llenaron de lágrimas y no tardó en ver a aquellos hombres.

-¿L-Corp? He...

Decía, su tono mostraba total odio. Eran los Luthor, ellos le habían hecho esto a Minte. Ellos... demonios.  No se había dado de cuenta de en que momento lo había hecho, pero ahora estaba ensangrentada. Había atravesado cada pecho de esos hombres, arrancando sus corazones... les había dado una muerte compasiva a comparación de lo que les haría a los Luthor.

-¡Kara!

Escuchó que gritaban, no reconocía esa voz o de donde provenía. ¿Eh? ¿Y esa luz?

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-¿Kara?

Y entonces ella despertó.