ᴢᴀɪɴᴏ ˗ˋˏYoonmin/Vminˎˊ˗

19: nefelibata.

Viernes, 9 de marzo. Cumpleaños
De YoonGi.

Habían pasado solo tres días después de que todo saliera a la luz, tres días horribles en todo sentido para los dos amantes. JiMin ya no estaba con él, si estaba presente físicamente pero su mente se iba a otros lados.

A pesar de que su esposo le dijo que todo estaba bien, YoonGi sabía que no era así. Porque aunque se duerma abrazado a él por la noche, al despertar está al otro lado de la cama, porque le da un montón de excusas para no besarlo o tocarlo. Y aunque le sonría tan dulcemente, sus ojos siempre estaban tristes.

Tenía claro que JiMin estaba herido, por eso hacía lo que podía para animarlo poco a poco, no quería presionarlo para nada. Si ya de por sí le sorprendía que el menor haya decidido quedarse a su lado a pesar del engaño.

El engaño... Seguramente JiMin no sabe todo. YoonGi cree que es mejor así, prefiere no poner más en peligro su relación contándole otras cosas.

Ahora solo debe volver a recuperar a su esposo.

El viaje donde tenía pensando hacer y decir muchas cosas se canceló, por petición de JiMin. Y él se sentía lo suficientemente mal y culpable como para llevarle la contraria, aún así, tienen sus vacaciones de tres meses. Namjoon ya estaba tomando su puesto y el padre de JiMin ya tenía su reemplazo.

Hoy era el día de su cumpleaños y le importaba menos que nada. Sin embargo, sus padres siempre le organizaban una reunión con mucha gente. JiMin también participaba ayudando, pero ahora se había negado a ayudar a sus suegros ya que no estaba en el mejor momento.

Lo entendió completamente.

—Despierta bebé... —había preparado el desayuno favorito de su esposo. A pesar de que era su cumpleaños y JiMin siempre le preparaba su desayuno aquel día, tenía en claro que el menor no iba a hacerlo y no lo culpaba.

El hombre más pequeño se removió en la cama, pasando las manos soñolientamente por sus ojos, luego los abrió con lentitud.

YoonGi quería tirarse de la ventana al ver los ojitos tan rojos.

—¿Qué es esto? —JiMin se sentó apoyando su espalda en el respaldo de la cama y observó fijamente el plato de comida.

—Quise consentirte —le sonrió dulce, esperando una de su esposo pero no recibió nada.

—Gracias. —Agarró el plato y lo apoyó en sus piernas. No debía comer en la cama, ensuciaría y no era nada educado.

Aunque ni siquiera quería comer.

—Mis... Mis padres me avisaron que harán la reunión a eso de las seis... —habló lentamente sentándose en la esquina de la cama. JiMin asintió mientras agarraba el tenedor—. También... También invitaron a algunos de la prensa, ellos quieren que... Que hablemos sobre los rumores.

Ensalada de frutas. Demasiadas, demasiadas calorías. No lo soportaría.

—JiMin... Si no quieres ir, no iremos. Ellos lo entenderán.

—Iremos, es tu cumpleaños. —YoonGi no pudo evitar soltar una sonrisa leve pero derrotada, creyó que JiMin lo había olvidado.