Capítulo 13

1K 109 19
                                    

─Uh, genial...

Murmura para sí mismo antes de sentarse en el pequeño y acogedor banco de la calle, mirando hacia arriba y observando por tan solo unos segundos el gran árbol que le concede algo de sombra, optando por apartar la mirada hacia el frente cuando el sol realmente lo ciega, centrándose en los pequeños niños que corretean y gritan debido a la diversión a escasos metros de él y en las hojas que caen a su alrededor a cada tanto.

Asi que por supuesto que es genial, un clima totalmente veraniego, pequeños infantes jugando de aquí para allá, un refresco en su mano izquierda, el sonido de los pájaros y el olor a protector solar que Jisung está seguro de que puede oler aún y cuando no tiene a nadie lo suficiente cerca para ello. Perfecto.

¿A quién quiere engañar?

Jisung odia el calor, odia el verano, odia sudar cuando el motivo no es ejercitarse, no le agradan los niños ruidosos, siente que está apunto de derretirse y el refresco que escogió ni siquiera le gusta tanto, por no hablar de que acaba de notar que algunos de esos pájaros que vuelan de un lado a otro y aterrizan a su alrededor son palomas, las cuales le repugnan lo suficiente como para querer irse.

Pero no puede. Aunque su jornada en el trabajo haya terminado antes de lo esperado y se muere de ganas por ir a casa a darse una ducha refrescante y sentarse en su sofá, se convence de no hacerlo.

Porque hoy es día de trabajo de Minho en su hogar, y a Jisung no se le olvidan las palabras que le dedicó al chico asegurándole que lo más seguro es que ellos no coincidirían en la casa, y teme incomodarlo si aparece de la nada, a fin de cuentas él entiende que debe sentirse más cómodo haciendo las cosas tranquilo y a sus anchas que si él estuviera allí.

Oh, y para nada es la primera vez que pasa, ya está por cumplir algo más de un mes desde que el agradable muchacho trabaja para él y ya son tres veces en las cuales termina antes de trabajar y opta por no volver a casa, yendo a ver a Chan hasta que se asegura de que Minho se ha marchado para así él regresar.

Pero esta vez su amigo lo sorprendió con la noticia de tener visita en casa, obligándolo a esperar en el ya mencionado banco perteneciente a un parque a unas cuadras de su empresa. De verdad que lo intenta, dando pequeños sorbos de la lata y mirando su reloj cada tantos segundos, pero lleva varios días sin descansar debido al trabajo, siente las gotas de sudor comenzar a aparecer en su cuello y todo su cuerpo comienza a sentirse ansioso, terminando por levantarse con total rapidez y dirigiéndose a su coche, casi suspirando de alivio una vez que está ahí.

Para Minho tampoco ha pasado desapercibido el hecho de no haberse encontrado ni una sola vez con su ahora jefe desde la última vez que se vieron, decidiéndose por no darle mucha importancia al recordar que él mismo le advirtió que eso podría pasar debido al trabajo del contrario.

Hablando del trabajo, no puede decir otra cosa aparte de que está encantado, no solo es tranquilo y adora la casa, se siente totalmente cómodo en el lugar, incluso consiguió amistarse un poco con el chófer que lo acompaña y del cual ya sabe el nombre, y no porque el chico sea muy hablador, eso para nada, pero sin duda ya no está esa atmósfera de incomodidad y desconfianza, varias veces Minho le lleva algunos refrescos o algunos snacks desde que descubrió que se queda fuera en el coche esperando en lo que él hace su labor. Claramente le ha insistido varias veces para que espere en el interior de la casa, pero no funcionó.

Bien, admite que su curiosidad pudo con él y no consiguió acallarla a tiempo, acabando por preguntarle al corpulento hombre por el desaparecido castaño, recibiendo como escasa respuesta que tan solo estaba muy ocupado.

Sigue perdido en sus pensamientos por un poco más cuando oye el sonido de la puerta y frunce el ceño confundido, sorprendiéndose al creer que su conductor por fin se resignó a esperar dentro y saliendo de su escondite, caminando hacia la entrada con la balleta en la mano.

Can i be your stepdad? | hanknowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora