Solo tú (+13) Daryl Dixon

O N C E

El ruido de la madera del suelo me hace despertar del sueño, me siento en la cama viendo el reloj de al lado de mi cama, son las tres de la mañana.

Escucho el ruido de la ventana cerrándose y es cuando logro despertarme del todo, agarro el cuchillo que siempre tengo en la mesita de luz, prendo la lámpara la cual alumbra un poco la habitación pero no logro ver nada.

Me levanto de la cama aún con la guardia en alto y prendo la luz del cuarto, esto hace que le moleste a mis ojos y los achino un poco.

Cuando mi vista se hace clara puedo ver el culpable de los sonidos, y si, ya todos sabrán quien es. Daryl.

— ¿Que carajos haces aquí? — mi tono es enojado.

— Solo quiero hablar. — su aliento es agitado.

— ¿No te quedó claro que no quiero hablar contigo?

— Solo escúchame. — sube de tono.

Obedezco y me quedo en cilencio, me siento en la cama con los brazos cruzados y con la vista en él, el cual se encuentra parado en frente mío.

— Se que fui un idiota — lo interrumpo.

— Lo eres.

— ¿Me vas a dejar hablar? — no respondo y agacho la cabeza con la vista en mis manos las cuales jugetean nerviosamente.

— Por ti empecé a sentir cosas que con ninguna mujer me paso, no se muy bien lo que siento pero quiero que me entiendas, esto es nuevo para mi — lo interrumpo por segunda vez.

— Me lastimaste y te importo un carajo. — intento contener las lágrimas porque como dije soy una persona bastante sensible.

— ¿Tu crees que lo hice con maldad? — toma mi rostro con delicadeza haciendo que nuestros ojos se encuentren.

Estoy a punto de responderle pero el me interrumpe. — No estoy con una mujer tan hermosa como tu desde antes de esto.

— Eso no me dejaste en claro varias veces. — Corro mi rostro bruscamente para soltarme de su agarre bajando otra vez la vista.

— Solo hablo estupideces para sonar más... — se detiene antes de terminar.

— ¿Más hombre? — mi voz se intenta quebrar.

— Si...

— Si esto te hace más hombre es mejor que no intentes hacer nada conmigo otra vez, yo quiero estar con un hombre que le sea fiel a una sola mujer, no con un hombre que es más hombre solo por acostarse con más mujeres. — auch, eso me dolió, tenía tantas ganas de desahogarme que por fin tuve el momento correcto para hacerlo.

— Yo no intentaba nada serio contigo, y si eso es lo que buscas en un hombre yo no soy el correcto Valeria.

Auch, eso dolió aún más, pero el tiene toda la razón, yo sola fui la que sentí algo hacia el, el solo sintió atracción por mi cuerpo y no por lo que soy por dentro.

— Eso me quedo muy claro, tu no eres el hombre que estoy buscando, o tal vez si, pero ahora me doy cuenta que no eres lo que pensaba. — tomo aire. — Y si eso es todo lo que tenías para decirme vete. — lagrimas amenazan de salir.

Todavía no puedo procesar las palabras que me dijo hace un momento, se que solo intento quedar bien conmigo, pero creo que quedaron aún peor que antes.

— ¿Por dónde vas a salir? Por la puerta como una persona desente o por la ventana como un maldito enfermo. — el se sorprende por mis palabras y yo sigo. — ¿Que tanto te asusta Daryl? — digo y me levanto de mi lugar quedando frente a frente con el.