Tras los trágicos sucesos del 31 de octubre y la muerte del menor de los primogénitos Black, Helena y Sirius tienen que tomar las riendas de su vida una vez más y hacerse cargo de dos pequeños que han quedado a la deriva sin sus padres; siendo ellos...
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El Rowl camino hacia la rubia que se encontraba dándole la espalda mientras leía un par de pergaminos bastante antigüos
Las manos del Slytherin sujetaron los hombros de su compañera haciendo que está de un leve saltó en su lugar para después ocultar con rapidez los escritos que leía
- Soy solo yo - sonrió viendo a la mujer respirar tranquilamente - ¿Qué haces aquí?
- Leer - contesto con obviedad, logrando una sonrisa en su mejor amigo
- ¿Has dormido algo? - la mujer asíntio poco convencida, haciendo que el castaño desconfiara
Alex Rowl conocía perfectamente a sus amigos, sobre todo a la rubia frente a él y a su esposa; ellos habían sobrevivido a todo juntos y siempre se cuidaban mutuamente, al igual que lo hacían con el pequeño Black, hasta que esté empezó a alejarse
- Ly te conozco - sentenció - ¿Ocurre algo? - no recibió repuesta - sabes que siempre te apoyo
La mirada verdosa tembló ante las palabras del castaño, jamás le había mentido y odiaba hacerlo pero Helena y Sirius le habían pedido mantener el secreto, al menos hasta que tuvieran más información
Porsupuesto que estaba en los planes de los Black contarle al Rowl, quien no había echo más que confiar en ellos, pero querían tener información suficiente para empezar a trabajar
- Estoy bien Alex - anuncio - no te preocupes - tomo su mano para reconfortarlo
- ¿Si finjo creerte irías conmigo a comer? - pregunto con una pequeña sonrisa
La chica asintió y comenzó a juntar los pergaminos con un movimiento de varita haciendo que estos volarán directo a sus manos
Lyra comenzó a caminar pero un mareo la golpeó a mitad del pasillo, haciendo que está callera de lleno en los brazos de Alex, quien impidió el impacto con el suelo
- ¿Estás bien? - pregunto notablemente preocupado - ven aquí
La levanto en sus brazos llevándola a uno de los sillones de la biblioteca Black
- Estoy bien tranquilo - anuncio al ver al auror pasar su varita sobre ella verificando que no hubiera rasguño alguno
- ¿Qué fue eso Lyra? - pregunto suavemente - ¿Has comido bien? - para este punto el hombre ya estaba hincado en el suelo
La chica asíntio ante todas las preguntas rutinarias que Alex realizó por los siguientes diez minutos
- Le llamaré a Alice - anuncio levantándose - también hay que avisarle a Remus
