◇ Donde el Juez de la Matra es salvado por su antiguo amor de la infancia
◇ O donde nuestra protagonista recuerda poco a poco su pasado.
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◇ Hola! Este es un Fanfic de Cyno x Lector, espero les guste!
◇ Fem!reader
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________ se encontraba admirando el cuadro que no había terminado de pintar hace días, aún no encontraba la inspiración suficiente para terminarlo. Algunos pensarán: Que termine de pintar el paisaje no? No es tan difícil. Obviamente no era difícil si uno lo veía de esa manera. Pero para nuestra artista era lo menos original que podía hacer. Para ella, la pintura se veía muy "plana", y no plana de que fuera literalmente plana, si no que se veía muy básica.
Le faltaba su toque, su brillo, la cereza del pastel como dirían algunos. Así que estuvo por un buen rato sumida en sus pensamientos. Pero no tendría de que preocuparse, porque ya habían desayunado y almorzado con Cyno, por lo que tendría toda la tarde libre para pensar en una solución.
Cyno se situaba en la mesa de la cocina resolviendo un libro de sudokus que le había prestado la peliazul para pasar el rato. Nunca antes había resuelto un sudoku, por lo que al principio le costó bastante, a pesar de hacer los mas fáciles pero gracias a su ingenio se las arregló para completarlo. Ahora que había completado los mas fáciles, le faltaba avanzar al siguiente nivel. Se lo veía muy concentrado y esa imagen le parecía de lo mas chistosa a _________.
La peliazul sonrió internamente al ver esta imagen del moreno. Espera, ¿que? ¿Desde cuando sonreía por ver a una persona? De manera instantánea su tema de interés fue otro, ahora intentaba descubrir porqué se sentía de manera distinta cuando estaba con Cyno, es más, desde cuando eso había empezado a surgir. Es cierto que ella se había comportado de manera extraña últimamente, como el suceso de ayer, el cual totalmente agradecía de que no hubieran tocado el tema. En el cual básicamente le coqueteó (de manera indirecta) sin pensarlo 2 veces.
Algo hizo "clic" en su cabeza tras este tema de interés, y estaba segura de haber encontrado la última pizca de inspiración que le faltaba. Automáticamente tomó su paleta de colores y la empezó a llenar de las pinturas que necesitaba. Daba trazos pequeños y suaves, como si el movimiento incorrecto fuera a arruinar todo su trabajo. En ningún momento desvió su mirada del lienzo, no planeaba distraer su inspiración así como así.
Por otro lado, estaba Cyno, que se había dado cuenta que ________ había comenzado a pintar después de estar un buen momento sin hacer nada y probablemente divagando entre sus pensamientos en busca de algo. Se alegró por la chica, ese cuadro llevaba días sin terminar y dejarlo a medias no era una opción. Le daba cierta curiosidad ver lo que la peliazul estaba pintando, que era aquello que tanto faltaba para terminar el cuadro? Pero se quedó en su lugar para darle espacio a la chica, además ella le había pedido que no la observara mientras hacía cualquier cosa porque se ponía nerviosa.
Dirigió su atención nuevamente al libro de sudokus con el que tanto había sufrido mentalmente, pero sin demostrarlo físicamente. Estaba atascado en los últimos cuadros cuando se dió cuenta que lo había hecho todo mal solo por poner un número en un lugar equivocado teniendo que borrar todo y empezar todo de nuevo. Internamente se estresó pero no se dejó llevar y estaba decidido a terminar por lo menos ese maldito sudoku.
