𝐻𝒪𝒩𝒢 【𝙹𝚒𝚑𝚊𝚗 】

『 𝒱𝒾𝓃𝑔𝓉-𝓈𝒾𝓍 』

Jeonghan
Muchos meses después...

— Yo lo puedo sacar. —Murmuro, aunque si estoy preocupado de que me fallen los brazos.

Mi nuevo doctor dice que tengo nervios dañados que tal vez nunca sanen. Los sueños de cortar cabello como lo hacía mamá quedaron de lado mientras descubro mis nuevas fortalezas y habilidades.

Joshua me ignora y él saca el enorme pavo del horno. Lo deja sobre la estufa y cierra la puerta del horno.

— No se ve como el de mamá. —Piensa en voz alta.

Le doy un manotazo.

— Es una nueva receta. —Le doy un caderazo y él se mueve del camino, no sin antes meter el dedo en el puré de papa. —. No tienes trabajo que hacer?

Joshua me sonríe, grande y masculino. Después de todo este tiempo juntos, como pareja, todavía me es difícil creer que es mío.

— Seungcheol dijo que todos merecemos tener el Día de Acción de Gracias libre.

Sacudo mi cabeza.

— No dijo eso.

Joshua es el contador del resort de Choi Seungcheol. Sus cabañas son de lo mejor y tienen las mejores vistas en Jasper. También nos renta una de las cabañas del área exclusiva por prácticamente nada. Y tal vez yo no sepa nada de contabilidad como mi hermano, pero Cheol me deja ayudarle con su página web y la mercadotecnia. Él ha sido muy paciente y amable con nosotros.

— Dijo, y cito: Disfruta el día libre, ve un partido de fútbol, como pay de nuez, caga y hazle el amor a tu esposo.
Pero no en ese orden, Joshua.
Definitivamente no en ese orden.

Me río porque puedo imaginarme a Seungcheol
diciendo eso. El tipo es un veinteañero millonario excéntrico. No encontraras alguien mas fashionista que él en la ciudad.

— Eso suena como el Cheol que yo conozco. —Joshua se ríe mientras escarba en el refrigerador, definitivamente buscando los bocadillos que hice mas temprano.

El recuerdo de mamá golpeandolo con una toalla por comerse la cena antes de tiempo me tiene sonriendo. Yo no le digo nada, en su lugar me aseguro de que todo este listo.

— Quieres dar las Gracias? —Pregunto quitándome el mandil.

El primer Acción de Gracias sin nuestros padres es difícil, pero Joshua prometió que haríamos nuevos recuerdos. Siempre haciendo nuevos recuerdos.
Así es como seguimos adelante.

Él camina atrás de mi y recarga su barbilla en mi hombro, sus palmas en mi abdomen.

— Señor, gracias por darnos el uno al otro y esta vida perfecta en Jasper. Dile hola a mamá y a papá.

Me río y golpeo su mano.

— y que mas?

— Gracias por permitir que ahora Jeonghan me haga comida siempre, Señor. Seré extra lindo con él.

— Todo lo que tienes que decir es por favor. Te lo dije desde que eramos niños. Solo que en ese entonces eras muy necio. —Le digo para molestarlo. Ambos nos reímos. — Y qué más?