CAPÍTULO IV

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♦️Amor y deseo son dos cosas diferentes; que no todo lo que se ama se desea, ni todo lo que se desea se ama
___Miguel de Cervantes♦️

______

   Después de una fuerte, larga y exasperante conversación con Dixom y que éste se despidiera de mi –no quería despedirse en dos días–, me encerré en mi habitación más confusa de lo que me gustaría.

   Me había confesado que me quería, no como amiga o como ligue casual, si no como algo más. Pero para nada, porque igual me iría y no le volvería a ver en un futuro cercano.

   Estaba vuelta un lío emocional y de nervios. Él tenía razón, más allá de querer irme porque debía, estaba huyendo.

   Finges que no te importa, pero en verdad te mata por dentro

   Sí, me mata tener que irme y todo por estar de estúpida y meterme en ese lío.

Lo hiciste por amor

   No, lo hice por estúpida. Por eso lo hice, por querer dármelas de malota. Por eso estoy metida hasta el fondo, ni siquiera recuerdo que quería demostrar en ese momento, pero lo hice sin pararme a medir o pensar las consecuencias. Ahora tenía que huir para que mi familia no se enterara de lo que había hecho y no ponerlos en peligro.

   Se supone que soy la niña buena, la más educada, responsable y bondadosa; así fue como me criaron, pero de eso no tengo nada o bueno, no queda nada.

   En el mundo real no se puede sobrevivir siguiendo las reglas y para mi conveniencia o destrucción, nunca me gusto acatar órdenes de nadie.

   No puedo evitar pensar en las últimas palabras que salieron de la boca de Dixom

"—Te voy a extrañar, pequeña. —Pude notar que se le formo un nudo en la garganta.

—Yo también te extrañaré, grandulón.  —Lo abrazo fuerte, no quiero soltarlo.

—Llámame seguido y, cuando quieras regresar sabes que te esperaré con los brazos abiertos.  —murmura en mi oído.

   Le coloco una mano en la mejilla y le doy un beso conteniendo las ganas de llorar. El me toma una mano y se dirige a la puerta, a medida que se va alejando me suelta de la mano y esta queda suspendida en el aire mientras yo le voy irse."

   Cierro los ojos con fuerza, no me puedo desplomar así de fácil. Trago el nudo que se me formó en la garganta y me tumbo en la cama. Al cabo de unos minutos me quedo profundamente dormida.

♦️♦️♦️♦️

   "Abro los ojos y no veo más que oscuridad, trato de parpadear para acostumbrarme a la falta de luz pero aun así no logro alcanzar a ver nada.

   Al cabo de unos minutos, alguien abre una cortina y la luz repentina hace que cierre los ojos.

   Miro en todos lados buscando orientarme y saber dónde me encuentro, deduzco que es un despacho. El escritorio y la manera en la que está organizada no da para más; miro hacia abajo y me doy cuenta que estoy atada de pies y manos a una silla. Intento forcejear para liberarme pero es inútil.

   Recorro todo el lugar con la mirada buscando indicios que me digan quien es el responsable de que este allí y... en mi recorrido, mi mirada capta a la persona que corrió las cortinas. Un hombre bastante atractivo, piel blanca aunque se ve que está bronceado, facciones finas, ojos azul cielo, su cuerpo bastante trabajado (se ve que va al gimnasio), y tatuajes en sus brazos dándole el aspecto perfecto de chico malo. Su cabello cae hasta sus hombros.

   Niego con la cabeza y trato de centrarme, no es momento para fantasear con el hombre que me desafía con la mirada. Pero no me inmutó y le sostengo la mirada.

—Esteffania, es un placer conocerte al fin. —Esa voz, Dios mío. Es tan varonil que me recorre un escalofrío por todo el cuerpo.

—¿Que hago aquí? O no mejor, déjame cambiar mi pregunta ¿Quién eres tú? —Le digo a la defensiva.

—Ya me habían dicho lo irrespetuosa que eres, no pensé que tuvieras tan poco aprecio por tu vida. —Dice dedicándome una sonrisa que en otro momento me habría derretido.

   Santo Dios, este hombre es precioso. Debe ser un delito ser así. Aun así, me mantengo intangible e indiferente. Ignorando su discursito vuelvo a mi postura defensiva.

—¿Que hago aquí?

—hvað elur á meira pirrandi (que cría más molesta)
—murmura por lo bajo.

—Hvern kallaðirðu "krakki", hálfviti? (¿A quién llamaste "cría", idiota?) —Respondo en el mismo idioma Islandés.

   No se lo esperaba, porque me mira con asombro en los ojos y la boca entreabierta. Yo me limito a sonreír de lado y escanearlo descaradamente con la mirada.

—A sí que hablas mi idioma.  —Dice recomponiendo su expresión indiferente.

   Yo me limito a encogerme de hombros y sonreír. —Ich kann mit Ihnen in der Sprache sprechen (Puedo hablarte en el idioma que prefieras)
—Dije en un alemán perfecto.

—Idiomas, entiendo. Es tu especialidad.

   Sonreí orgullosa y levante la barbilla. —Ahora dime para que me has traído. Pero ahórrate el discurso y las amenazas.

   Sé que por fuera era un témpano de hielo indestructible pero por dentro estaba muerta del miedo y muy nerviosa, obvio no le iba a dar la satisfacción de saberlo, de eso nada.

   En visto de que se quedaba callado volví a hablar — ¿Y bien?, me tendrás mucho más acá, me están entrando ganas de hacer pis y se me están durmiendo las muñecas.

   El monumento griego salió de sus pensamientos y tras recomponer su temperamento me miró y se dispuso a hablar.

—Respondiendo a tus dos preguntas, mi nombre es Jóhann y te hemos traído acá para que seas la nueva mafíudrottning, (reina de la mafia)".

   A lo lejos escucho una música que cada vez se hace más fuerte, luego me doy cuenta de que es mi celular y que me están llamando. Descuelgo la llamada sin siquiera molestarme en ver de quien se trata

—Diga
—murmuró somnolienta.

   Pero no obtengo respuesta, solo se escucha la respiración en la otra línea. Extrañada aparto el celular para ver quien es pero caigo en cuenta de que es un número privado y que no le tengo registrado.

—¿Aló?
—vuelvo a decir pero es el mismo resultado, silencio.

   Sin saber que pensar cuelgo la llamada y me paso una mano por la cara. Frustrada me levanto de la cama y a paso lento me encamino al baño a asearme un poco. Una vez listo reviso el celular y me percato que tengo un nuevo mensaje, al abrirlo casi se me cae la mandíbula al suelo por su contenido.

Número desconocido:
Espero no pensaras irte sin decirme nada, Esteffania.

♦️♦️♦️♦️

Nota de Autora

¡Gracias por leer!
Uhhh... ¿Quién creen que sea el causante de las pesadillas?
En el próximo capítulo lo veran🤭

◇Dangerous Rhombus◇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora