CAPÍTULO XVIII

34 32 0
                                    

♦️“La vida nos coge desprevenidos y nos obliga a caminar hacia lo desconocido cuando no queremos, cuando no lo necesitamos.”
___Paulo Coelho♦️

__________

  Desperté con un fuerte dolor de cabeza. Mira a mi lado y Jóhann no está en su lado, froto mi cara con ambas manos incorporándome, veo la hora en mi celular y son pasadas las 11:20 am. Veo que tengo tres llamadas perdidas y una serie de mensajes de textos.

Benjamín Ruiz:

Señorita Young, tengo lo prometido. 8:30am

He intentado dar con usted, seguro está ocupada pero lo que le tengo es de suma urgencia.
Comuníquese cuando pueda. 9:10 am

   Ya era hora. Habían pasado días desde que le encargué encontrarme la información. No es que yo no pidiese hacerlo, tenía los métodos y el conocimiento informático para saber todo de esa persona, la cuestión era que hacerlo por mi cuenta tendría muchos pros y contras que no estaba dispuesta a experimentar.

    Me incorpore sobre mis pies dirigiéndome al cuarto de baño. Hice mi debido aseo higiénico, volviendo a la habitación abrí los cajones de la mesita de noche uno a uno hasta dar con una caja de pastillas para el dolor de cabeza.

   Entre la ropa que tenía guardada en el closet agarre mi pantalón roto en las rodillas lanzándolo a la cama, tome una camisa de tirantes color gris con rallas blancas formando cuadros. Entre los cajones encontré una malla y también la lancé a la cama junto a lo demás.

   Abrí nuevamente el cuarto de baño tomando una toalla, me despoje de mi ropa y metí bajo la ducha. Al terminar con mi ducha matutina procedí a vestirme.

   Coloque mi pantalón sobre las mallas marcando el número de Jóhann dejándolo en altavoces a un lado de la cama. Al tercer pitido contestó.

Bonita, pensé que aun dormías –Dice distraído

—Desperté hace poco, ¿Dónde estás? –Inquiero metiendo mi pie en uno de los zapatos.

—Tuve que venir al trabajo, Bonita. Las cosas no andan tan bien estos días –Suspira pesadamente

— ¿Necesitas ayuda? –Inquiero

—Te lo haré saber de ser así –Asegura.

— ¿Donde esta Samantha? –Pregunto terminado de ponerme la camiseta.

—Le deje en su casa antes de venirme para acá, bonita. –Contesta. — ¿Saldrás o esperaras a que regrese? –Inquiere curioso.

—Tengo unos asuntos que atender por ende saldré a por ello. –Comento– También iré a la peluquería, quiero hacerme un cambio de look

— ¿De verdad? –Pregunta anonado– ¿Que te harás?

—Me cortaré el cabello y quizá me haga unos reflejos o algunas mechas. –Añado.

—Oh ¿me mandaras fotos? –Murmura

—Cuenta con eso, cielo. –Aseguró.

—Bien bonita, te dejo para que hagas tus cosas y bueno, yo tengo que terminar de revisar unos documentos –Lo escucho suspirar– ¿Nos vemos para cenar?

—No lo creo, cielo. Hoy tengo una agenda súper atareada y tú tienes que terminar tus asuntos. –Refunfuño colocándonme una cadena.

—Tienes razón –Dice derrotado– Igual esperare tus fotos, bonita. Un beso, si necesitas algo no dudes en llamar ¿ok?

◇Dangerous Rhombus◇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora