Capítulo 7: La Gala

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AndreaLightning Dragonfly, Sábado, 9:00 am

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Andrea
Lightning Dragonfly, Sábado, 9:00 am

Observé a mis empleados, algunos lucían nerviosos, preocupados e incluso algunos estaban aburridos. La noche anterior había hablado con Elijah sobre hacer una reunión con los empleados.

—¿Alguien sabe por qué el jefe nos reunió? —cuestionó Andrew cruzándose de brazos—. En este momento podría estar trabajando en el diseño y no estar aquí perdiendo el tiempo. 

—Cuidado te escucha el jefe —dije con una sonrisa y alzando una ceja.

—La verdad no sé qué haces aquí, esta reunión es para los empleados, no para los pasantes —mencionó Andrew con una sonrisa falsa—. Además, sigue practicando porque tus diseños no son tan buenos como los míos.

Sonreí y lo miré fijamente, unos cuantos jadeos se escucharon.

—Eso no fue agradable, señor Mills —se escuchó el tono serio de mi tío—. No toleraré estos comportamientos en mi empresa. Después de la reunión, lo espero en mi oficina, ¿le quedó claro?

—Sí, señor —respondió Andrew con tono serio y apretando sus puños. 

—Los reuní porque quiero felicitarlos, las cosas en la empresa marchan bien... —expresó Elijah con una sonrisa—. Nuestra última colección ha sido todo un éxito, en la siguiente tenemos que impactar un poco más... Por favor un aplauso porque sin ustedes, esto no sería posible.

Los aplausos no se hicieron esperar, le guiñé un ojo a mi tío. Elijah dio unos cuantos anuncios y luego les dijo a los empleados que regresaran a sus puestos.

🌌

Supervisé a Andrew desde mi oficina secreta. El comentario que había hecho, no me afectó en nada, las cosas tarde o temprano saldrán a la luz.

—Que no vuelva a pasar, se puede retirar, señor Mills —Andrew se levantó y avanzó hacia la puerta.

Elijah soltó un suspiro y masajeó un poco su frente.

—¿Estás ahí? ¿Escuchaste todo?— preguntó.

—Lo hice, no me cae bien —comenté para luego soltar una pequeña risa—. Te imaginas cuando se de cuenta que yo soy la verdadera jefa.

—Me gustaría ver eso, ven a la oficina —unos minutos después salí de la habitación secreta.

Caminé hacia el sofá, Elijah se levantó y se sentó junto a mí.

—¿Qué pasó en la cena? ¿Cómo te fue con los términos y condiciones?—acepté la menta que me ofreció.

—Me divertí mucho en la cena... Baltasar es un viejo zorro cómo mi padre —musité con una sonrisa.

—Conozco esa sonrisa, ¿qué fue lo que hiciste? —preguntó Elijah un poco nervioso.

—Está vez nada tío, solo sonreí y luego todo explotó —dije mientras sacaba el celular.

Noche Estrellada: La estrella más solitariaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora