Capítulo 20: Regreso a Clarksville pt 1

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Maraton 1/4

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Andrea

"Bienvenidos a Clarksville, somos un pueblo amistoso"

No podía creer que estaba de nuevo aquí, con mucho anhelo recordé la vez que le dije a mi tío que no me quedaría mucho. Al llegar tan temprano casi nadie sabía de mi llegada, así era mejor. Después de unos minutos de caminata, llegué a mi lugar favorito, el mirador.

Le quité la correa a Vincent y sonreí al ver como empezaba a correr por todos lados. Solté un suspiro y me dediqué a mirar el paisaje.

El primer lugar que decidí visitar fue el mirador ya que fue el primer espacio que compartí con Olivia. Todos dicen que los besos se olvidan, pero yo jamás podría olvidar mi primer beso con Olivia. El sitio me traía alegría y muy buenos recuerdos. Buenos recuerdos que guardaba y atesoraba en el fondo de mi pobre corazón.

—Aquí fue donde nos dimos nuestro primer beso, su majestad —susurré al viento—. Pero también el último. 

Unas cuantas lágrimas empezaron a rodar por mis mejillas, la verdad es que ya entendía el consejo que me había dado Lily.

Cuando llegué a Clarksville mi vida seguía siendo la misma, pero todo cambió cuando conocí a Olivia y también cuando nos dimos nuestro primer beso. Desde ese momento, mi vida empezó a tener sentido, mi corazón gélido y muros se desmoronaron.

Observé el pueblo por segunda vez y luego llamé a Vincent. Mientras descendía de la colina me di cuenta que mi celular estaba descargado.

—Vamos Vin, es hora de ir a visitar a Sally —murmuré con una sonrisa traviesa.

Al llegar a la tienda, pude darme cuenta que Sally había seguido uno de los consejos que había dado. Años atrás, le sugerí que le cambiara el diseño a la entrada.

El sonido de la campana hizo que saliera de mis pensamientos, entré junto a Vincent y no me sorprendí, el lugar seguía siendo el mismo por dentro.

—Buenos días, ¿en qué podemos ayu... —no terminó la frase—. ¿Andrea?

—La misma —comenté con una sonrisa—. Necesito un cargador para iPhone y tranquila, esta vez sí pagaré.

Noté el rostro sorprendido de Sally, pero aún así, sacó un cargador de uno de los muebles.

—¿Qué estás haciendo aquí? ¿Elijah vino contigo? —preguntó mientras agarraba la tarjeta que le ofrecía.

Noche Estrellada: La estrella más solitariaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora