Desde Las Sombras.

03 Momentos Y Promesa.

Vas muy bien, continúa con todo… —La voz de Itachi estaba de fondo mientras Ryuko entrenaba sus sentidos. Aún le quedaban un par de dias para retomar sus clases. Ahora vendría el Clan Yamanaka.- Concéntrate en los sonidos.

Ryuko estaba en un pequeño entrenamiento con Itachi, había decidido pasar sus últimos dos días libres con los Uchiha, así que ahora jugaba, o más bien se sometía a un instructor estricto. Itachi Uchiha.

Pero Ryuko decidió que ya era suficiente de entrenamiento, así que se quitó la venda y sin avisarle a su mayor, se avalanzo había éste. Siendo recibida por el mayor, ambos callejón al suelo, pero Ryuko se vio protegida por Itachi, ambos rieron y sin hablar decidieron dejar de lado el entrenamiento. Ambos comenzaron a caminar por el recinto Uchiha.

¿Y si vamos por unos dulces? —Ryuko preguntó feliz mientras se subía a la espalda del mayor.- También podríamos llevarle unos dulces a Sasuke-Chan y a tus padres.

Itachi había comenzado a realizar algunas misiones de bajo rango y siempre bajo la sipervision de un miembro de su clan. Por lo que el menor había comenzado su vida como un Shinobi.

Vamos, quédate en mi espalda si quieres. -Itachi sonrió, la única a parte de su hermanito, es Ryuko. Aunque por los dos siente algo especial, con Sasuke es un amor de hermanos, pero con Ryuko, no lo sabía, solamente sabía que daría su vida por ella, sin dudarlo.- Agárrate fuerte, Ryu-Chan

Cuando estuve con el clan Inuzuka recibí un guardián, se llama Ryuu. Y… —Ryuko narraba las múltiples aventuras, ella iba muy cómoda en la espalda del mayor. Itachi iba en silencio, escuchando a la menor.- Pero mi papá iba a necesitar ayuda de un gran o faltó para ésta misión, así que mañana conocerás a mi precioso Ryuu.

Seré paciente. —Sonrió mientras llegaban a la zona donde podrían comer algunos dulces.-

Dango y té… —La menor saltó de la espalda de Itachi, ambos se tomaron de la mano, un gesto habitual e instintivo.- Vamos Itachi-Kun.

Ambos niños entraron al lugar, pidieron su té y los dangos. Siempre inmersos en su propio mundo. Siempre juntos mientras no hubiera otras actividades por realizar. Faltaba poco para el medio día, así que después de pagar, Itachi se llevó a Ryuko. Ambos saltando entre los árboles. Hasta llegar a un hermoso prado. Se acostaron debajo de un árbol.

Me encanta la paz de éste lugar… —Sonrió Ryuko mientras veía al mayor.-

Si, mañana por la noche saldré a una misión, será cercas, pero no sé cuándo regrese. —Itachi no quería romper el momento, pero es necesario ser honesto.-
¿Ryuko? —Se lamentó ser honesto al ver el rostro triste de la menor.-

Dame un año. —Susurró en un suave destello de brisa, esperando no haber sido escuchada, pero el mayor había escuchado con claridad.-

¿Un año? —Preguntó intrigado pero sostuvo con más firmeza la mano de la menor.-

—Ryuko decidió darle frente. Sonrió y se sentó para que Itachi siguieran su acción.- Dame un año y me convertiré en una ninja capaz de ir contigo a las misiones. Protegeré tu espalda.

Itachi se sorprendió, gracias a su padre sabe los avances que Ryuko había tenido, así como también sabe lo hábil que es, pero no deseaba ponerla en una posición de peligro. Sin embargo, también sabía que la menor en algún momento sería enviada a Anbu, su padre había sido líder de Anbu y Anbu Raíz, siendo la mano derecha de Lord Hokage. Así que sabía que la menor iba a seguí ese camino. Por lo que entonces el tenía una meta.

Yo también me haré más fuerte, seré tu sombra. Te protegeré. —Prometió con firmeza.-

Y yo haré de la aldea un lugar seguro. Seré Hokage algún día. —Sonrió y abrazo al mayor.-

Ambos se vieron, se abrazaron y dejaron que el tiempo pasará.

Pasó el tiempo acordado, Ryuko comenzaría su entrenamiento con el clan Yamanaka, bajo la sipervision del líder Inoichi sensei.

Ryuko, él es el líder del clan, comenzarás tu entrenamiento hoy. —La voz suave de Ibiki hizo que Ryuko sonriera, ahora debía cumplir una promesa, pero sobre todo, cumplir con su entrenamiento.-

Es un placer líder del clan. Mi nombre es Senju Uzumaki Ryuko. Es un honor estar bajo su sipervision. —Sonrió dando un reverencia suave y elegante.-

Ryuko, un buen nombre para la nieta del segundo y para la hija de unos buenos amigos. —La voz tranquila del líder del clan Yamanaka se escuchó, alegrando la paz de Ryuko. Ella había escuchado grandes hazañas narradas por sus mentores y otros miembros de los clanes que ya había conocido, pero desde el principio supo que Yamanaka Inoichi, Nara Shikaku, Uchiha Fugaku y Hyuga Hiashi eran los más unidos a su padre. Así que ellos tendrían más anécdotas por contar.- Eres muy linda.

Gracias sensei. —La menor sonrió feliz. Muchos le habían dicho que su cabello era como el de su madre, pero con las puntas plateadas como su padre.-

Bueno, primero entra a desayunar, mi esposa hizo una deliciosa recepción, después, cuando de el medio día comenzarás tu entrenamiento, antes de esa hora deberás tener tu habitación y haber meditado al menos 30 minutos. —Dio las instrucciones. La menor tenía una buena concentración según la información de los anteriores mentores y de su padre adoptivo, pero para el clan Yamanaka esa habilidad solo superaba al promedio, la menor debía alcanzar un nivel más alto para logras el objetivo.-

-El es Ryuu el guardián que le dio el clan Inuzuka cuando concluyó su entrenamiento con ellos.-