Un Secreto En La Sangre (Libro 1 - Corrigiendo)

II - SUEÑO

Oscuridad. Oscuridad es todo lo que veo. ¿En dónde estoy? ¿No estaba recostado a un árbol? Entonces, ¿qué hago aquí? No, más importante: ¿ya no siento dolor?

A lo lejos puedo apreciar una tenue luz naranja que se va apagando poco a poco, por lo que siento una necesidad de correr hacia ella y eso hago; sin embargo, mis pies no pueden avanzar, simplemente me quedo en el mismo lugar y corro sobre este.

─¿Qué demonios?... ─murmura mirando el "suelo" para después, alzar la vista con desconcierto y toparse con un dragón.

Debido a la impresión, me sobresalto e intento retroceder, pero es en vano. Realmente no puedo moverme hacia ningún lado, estoy estancado en el lugar. El dichoso dragón simplemente me observaba detenidamente como si me estuviese evaluando de forma meticulosa para después, abrir la boca.

"Se acerca..." "Se acerca..."

─¿Se-Se acerca?... ¿Qué se acerca?... ─dice nervioso, ya que el dragón se estaba acercando y ya se encontraba a pocos metros de él. Cosa que le tenía con los nervios de punta, ya que el dragón sí podía moverse y él no.

"Se acerca... El día..."

─¿El día? ─murmura más para sí mismo que para él─ ¿Qué día? ─pregunta con clara confusión, sin entender nada.

"Se acerca el día..." "Se acerca el día..."

─¿Qué día se acerca? ─pregunta nervioso y con impaciencia.

"Se acerca el día..." "Se acerca el día..."

─¿¡Qué día!? ─dice, exasperado.

De inmediato me arrepiento de haberle gritado, puesto que este deja de hablar y para mi terror, se empieza a acercar a mí mientras da pequeños gruñidos de forma amenazante.

No me dio tiempo de reaccionar cuando este de manera repentina abrió la boca dejando ver sus afilados dientes acompañados de su lengua y se acercó rápidamente a mí con la intención de comerme mientras soltaba un gran rugido que hizo que el miedo y el pánico llenaran mi ser.

Cerré los ojos y me tapé el rostro soltando un grito asustado mientras intentaba con todas mis fuerzas huir, sin resultado.

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─¡¡¡AHHH!!! ─grita mientras se despierta exaltado y sudando.

Me toco el rostro y veo mi mano la cual contenía sangre seca proveniente de mi nariz, la cual toco quedándome congelado al sentir que ya no dolía y ver que ya no sangraba.

─Pero, ¿qué?... ─se toca la cabeza sintiéndose exhausto a pesar de haberse quedado dormido─ ¿Qué ha sucedido?... ¿Por qué?... ¿Qué?... Es... Es tan... Extraño... Ah, mierda... ─suspira, intentando mantener la calma y hacer que su respiración agitada vuelva a la normalidad.

Miro nuevamente mi mano y observo la sangre seca que se encontraba en esta. ¿Qué ha sucedido? Se supone que tenía la nariz rota, ¿Por qué ahora solo encuentro sangre seca y mi nariz está en perfecto estado? Incluso mis piernas... ¡Mis piernas!

Me levanto y doy unos cuantos pasos aún sintiendo un poco de ardor, pero no como antes.

¿Qué ha sido eso? ¿Un sueño? ¿Por qué era tan realista? Nunca me había pasado eso antes, ¿tiene algún significado o solo es un sueño cualquiera? De tantas cosas que me pasan, ya no se si eso se denomina como algo normal.