Todoroki Shouto [I]

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Todas eran paredes conocidas. Hacía tiempo que no había puesto un pie en esa casa. Se encontraba en la entrada, para ser más precisos.

Mientras se adentraba un poco más en la casa, podía sentirse observado. A fijar la vista al frente, vio una silueta blanquecina asomarse detrás de la esquina de una de las paredes del pasillo.

—Fuyumi —llamó él—. ¿Eres tú?

Algo en él le decía que debía acercarse a lo que sea eso fuera.

Trató de llegar a aquello, pero por cada paso que daba, aquella figura parecía dar uno hacia atrás. Terminó a mitad de un pasillo sin ventanas ni puertas cercana, salvó por una que se encontraba frente suyo.

Al abrir la puerta lo que encontró del otro lado fue una habitación totalmente blanca, y sobro sus paredes colgaban cuadros los cuales reconoció.

Al adentrarse a la habitación y mirar de cerca, se percató de que aquello cuadros mostraban escenas de su vida, las cuales se reproducían como películas.

—¿Madre?

En uno de aquellos cuadros se hallaba su madre sonriendo muy felizmente mientras abrazaba y jugaba con sus hijos. Sonrió ante el dulce y pequeño recuerdo de su infancia.

Mientras recorría lentamente los cuadros con la mirada una extraña calidez llegó a su pecho.

En aquellos tiempos todo parecía estar bien.

—Mamá los ama mucho.

Todo parecía estar bien, al menos en la superficie.

—Papá solo está un poco estresado. Papá trabaja mucho por nosotros.

Poco a poco... La dulce voz de su madre comenzaba a atenuarse. ¡No! ¡Él no quería eso! ¡Quería escucharla un poco más! ¡Realmente la necesitaba! ¡Él la extrañaba demasiado!

Con la esperanza de seguir escuchandola continuó buscando en el resto de los cuadros, pero lo único que encontró fueron los tristes y horribles recuerdos de días malditos.

—Enfócate en tus estudios, Shouto. Tu y tus hermanos son muy distintos.

—Ya lo oíste, Shouto. Tu y yo somos distintos.

Sentía difícil respirar. Se apoderó de su piel aquellos dolores fantasmas, como un cruel recordatorio de lo que era.

—¡Talvez seas un monstruo y es por eso que ella se marchó!

Aquellas voces comenzaban a apoderarse del silencio, volviéndose más fuertes y repetitivas.

—¡No! ¡No soy un monstruo!

No importaba cuanto gritara y pidiera silencio, ninguna de esas voces cesaban.

Y como si la presión que esas voces causaban en él no fueran suficientes, de los cuadros colgados sobre la pared, un viscoso y oscuro líquido comenzó a brotar.

Era difícil salir de ahí. Era como si aquella oscuridad deseara devorarlo. Sumergirlo en una profunda desesperación...

Y lo estaba logrando...

Se sentía pesado y sin fuerzas. Y no había nadie que le ayudará...

—¿Te encuentras bien?

Una auténtica preocupación habitaba en aquella voz.

—¡Estas ardiendo! ¡No debiste haber venido si estabas enfermo!

Un suave toque en su frente.

—¡Esto es malo! ¡Pero no te preocupes que yo me haré cargo!

Cerezos... Era en abril... Aquello ocurrió en un hermoso abril.

—Dicen que estarás mejor en muy poco tiempo, pero que debes descansar. Ellos dicen que no hace falta, pero... Me quedaré aquí para cuidar de tí.

De nuevo ese toque en su piel. Ahora su muno se sentía cálida.

—No tienes que preocuparte. Me quedaré a tu lado para cuidarte. No me iré a ningún lado.

Lo recordó. Esa persona se quedó ahí, con él.

—¡Todoroki-kun!

Los cerezos otra vez... Cuan efímera era la vida de aquella pequeña flor.

—Por favor...

Sonaba como una dulce súplica... Una súplica que estaba dispuesto a cumplir y seguir.

—Mirame a mí.

Eso fue suficiente... Esa voz tan suave vuelta susurro lo hizo lucha con fuerza para librarse de esa oscuridad solo para poder alcanzarle.

Extendió la mano tratando de aferrarse de lo que sea para poder perseguirlo esos nuevos  susurros.

—¡Espera! —gritó con fuerza.

Con la respiración agitada y mente confusa, miró a su alrededor, hallandose en su propia habitación.

Se sentó sobre el borde de la cama un poco aliviado por descubrir que aquello había sido un sueño. Aunque mucho de aquello había sido parte de sus memorias.

Definitivamente tenía que encontrar a la persona que habia cuidado de él tiempo atrás.

Definitivamente tenía que encontrar a la persona que habia cuidado de él tiempo atrás

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16/01/2024

Holaaa. ¿Qué tal? ¿Cómo han estado?

Se los dije, que habrían nuevas actualizaciones pronto. Aquí tiene una de ellas. Esperen muy pronto la siguiente. Este es el sueño que había tenido Shouto en el capítulo pasado. Pronto des traeré el nuevo capítulo, primero dejen que publique capítulos en mis otros fanfics.

Hasta al rato, vatos (⁠≧⁠▽⁠≦⁠).

Luces, cámara y... ¿SEXO?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora