He aquí, damas, caballeros, terrícolas, extraterrestres y entes no identificados con ninguna dimensión de la existencia: la adivina con menos fortuna de este mundo y el otro. Me presento. Diré que mi nombre es Madame Ceyene, porque no es conveniente...
Estoy tan emocionado. He dejado mis tareas listas, por adelantado, con el único propósito de tener esta noche para mí.
Después de analizar el lugar que voy a visitar, he tomado todas las precauciones. El mundo de los humanos puede ser difícil si uno va a caminarlo desprevenido, pero estoy dispuesto a sacar lo mejor de la experiencia. Solo con esconder mis alas, ya me veo como uno de ellos. No puede ser tan difícil.
Así, con un cambio de mi túnica celestial por un atuendo de eso que llaman cuero y una camiseta antigua que me prestó uno de los guardianes de «abajo», creo que ya estoy listo. Hace un tiempo, conseguí una entrada para este concierto a cambio de un favor a uno de los humanos a los que protejo. Desde entonces, mis ganas de que llegara esta noche han ido creciendo más y más.
La noche me cubre, me ayuda a mezclarme con la masa de personas que esperan con entusiasmo a las puertas del club donde tocará la banda elegida. Nadie me mira más de un momento, mi traje no tiene nada de extraño al lado de algunos que puedo notar por aquí, creo que he elegido el mejor lugar para dar un paseo sin ocultarme a los ojos humanos.
Siento que ni siquiera necesito averiguar la forma de entrar. La fuerza de la cantidad de gente que ansía estar adentro del club tan pronto como abren las puertas me empuja en la dirección adecuada. Todo aquí son sensaciones intensas y crudas: el roce de brazos y piernas enfundados en el cuero o el jean, las voces que conversan sin cesar, la música que nos envuelve hasta el aturdimiento. No puedo estar más feliz con todo esto. El intercambio valió la pena.
De pronto, un par de desconocidos se me acercan y son tan amables de convidarme de sus bebidas. El concierto termina y mis nuevos amigos me invitan a seguir la fiesta en otro club, más exclusivo. Me siento un poco mareado, sé que mi paso por este mundo solo está permitido por una hora más, pero decido disfrutar hasta el último minuto.
Así, cuando me doy cuenta, mis amigos y yo nos tambaleamos y cantamos con alaridos desafinados en un callejón. Esta es la mejor noche en toda una eternidad. Ni siquiera la arruina el momento en que mis compañeros se giran hacia mí con rostros ceñudos y mostrándome un par de cuchillos. Me están pidiendo dinero, pobrecitos. Yo quiero pedirles algo, también: disculpas por darles la impresión equivocada, por ser la causa de un desperdicio de energía, pero mi lengua no responde. Balbuceo incoherencias, mientras noto que revisan mis bolsillos, inútilmente. Es una pena, ya casi debo irme.
Lo que sea que haya bebido, me está quitando la capacidad de contener mis enormes alas. Mi camiseta y mi chaqueta se rasgan, a la vez que siento el alivio de quien ha soportado la respiración por mucho más de lo que debía. Mis pobres amigos ahora han soltado los cuchillos y olvidado la necesidad de dinero extra, solo me miran con ojos desorbitados y retroceden. Me provoca tanta ternura. Ojalá pudiera explicarles.
Sé que en cualquier momento estaré de vuelta allá arriba y que puede que hasta reciba algún castigo, pero me alegra que nadie haya salido lastimado esta noche. Mis ojos se cierran y mis rodillas ceden, mientras escucho que huyen.
Esta noche entre humanos me ha confirmado lo que ya sabía. La tierra está llena de seres interesantes. Con cada siglo que intento estos paseos, la cosa se va poniendo mejor. No puedo esperar a ver qué me espera la próxima vez que venga.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
♦ Está difícil mantener la estabilidad dentro de las fuerzas que gobiernan este libro. A veces, siento que estoy en la tela de araña de los acontecimientos y no sé si soy la araña o la mosca. Puede que me esté influyendo el ambiente mágico de esta dimensión. O, tal vez, me estoy creyendo mis propios cuentos. Seguiré luchando por encontrar la forma de salir de aquí.
Si lo encuentra en su tirada:
Al derecho: Si usted siente que necesita tomarse un descanso, hágale caso al cuerpo. El dibujo de este arcano, en algunas versiones, tiene un par de copas en la mano y parece que le está dando fluido a la bebida, pero no se confunda. Recuerde el cuento de los monitos para ilustrar las etapas de la borrachera. Tome agüita y dé un paseo.
Al revés: Aproveche que esta carta del revés tiene el agua por encima y piense en lo que significa. ¿No será hora de ir a darse una buena ducha?
***
Nota: La finalidad de los significados de cada carta es entretener al lector y a la loca que escribe estas cosas. Ningún dato de este libro debe ser tomado como referencia seria, ni aplicarse a situaciones de la vida real. Dicho esto, sean libres de enviar sus propias interpretaciones de este arcano.
