Capítulo 10

21 1 0
                                    

Por fin es viernes. He quedado con Luke, y a las cuatro y media vendrá a mi casa, para irnos él, Harry y yo a dar una vuelta. Se va a traer los sprays, o sea que seguramente haremos algún graffiti en algún rincón de la ciudad. Estoy comiendo con Harry en mi casa, y me disculpo para ir a cambiarme. Decido ponerme unos pantalones vaqueros muy cortos, lo suficiente como para insinuar, y una camiseta de tirantes blanca entera y un poco abierta por los costados, sin sujetador. Con unas Converse blancas. Informal. Y hace un muy buen día, así que tengo que aprovecharlo. Aunque Luke ha dicho que ha oído que iba a llover, pero por ahora se está bien. Bajo las escaleras, y está Harry recogiendo los platos. En cuanto se da la vuelta y me ve, se congela, y abre mucho los ojos mirándome de arriba a abajo.

-No... ¿no va un poco destapada? -Se acerca lentamente, y veo cómo se acelera su respiración. Aunque aún así permanece serio y dominante.

-No, ¿por? -Río, y doy una vuelta sobre mí misma para que me admire. Me pongo el pelo a un lado, sonriéndole. Me encanta causar esta sensación en él.

-¿Va sin... sostén? -Se muerde el labio sin dejar de contemplarme.

-Sí, hoy sí. -Me encojo de hombros.

-No me extraña que le rapten luego... Dios.

-Algunas veces con algunos tops no se pueden llevar sujetadores, porque quedan fatal, pero por ejemplo hay algunos días que voy sin él porque me apetece sentirme... libre? Y a algunas camisetas les queda bien llevarlo así, ¿no cree usted?

Ya me ha visto sin sujetador, no sé por qué está así. Supongo que no está acostumbrado a verme sin él un día de diario.

-Sí... está genial.

-Gracias. -Río.- Le veo nervioso... -me acerco a él lentamente- le sonrío y me pongo de puntillas, rozando mis labios con los suyos sin llegar a besarle y pegándome a él.

-Yo... no estoy nervioso -se le agita aún más la respiración, y me coge de la cintura suavemente.

-¿No está nervioso? -Me pego completamente a él y bajo despacio sus manos a mi trasero.- Su respiración dice lo contrario.- Respiro en sus labios y me pongo aún más de puntillas para morderle el lóbulo de la oreja.

Gime. Oh, sí.

-No lo estoy -sus manos masajean mi culo, y parece disfrutar mientras lo hace. Mueve sus caderas contra las mías, lo que me enciende, pero ahora debo controlarme.

-Ya sé que tiene unas ganas inmensas de devorarme, ¿no es así? -Le susurro con voz sensual. Sus manos en mi trasero hacen que note punzadas de placer en mi vientre, pero debo parar porque si no, sé dónde acabará esto. Ahora soy yo quien le da un empujón con mis caderas, pero para separarlo.- Pero ahora no puede ser, detective... -me separo completamente y sonrío triunfante, disfrutando de su expresión frustrada.

Si no fuera porque está a punto de llegar Luke, juraría que ahora mismo me haría sentir tanto placer que le sentiría dentro de mí durante un mes entero.

-Pero ahora no puede dejarme así... -respira rápido, excitado.

-Le debo una desde la ducha en el Palacio de la Reina -le sonrío pícara y suena el timbre.- Además, ya está aquí Luke.

Abro la puerta, y me tiro a sus brazo. Él me devuelve el abrazo, y cuando nos separamos me recorre con la mirada de arriba a abajo.

-Hola, Anna. ¿Por qué te has puesto tan... guarra? Hacía tiempo que no zorreabas. -Luke y su fino vocabulario.

-Cállate, idiota -le pego un puñetazo en el hombro.

-Vale -ríe.- Hola, detective -le extiende la mano y Harry se la devuelve a forma de saludo.

Shoot MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora