Paula
Alcé las cejas por lo que acababa de oír, su mirada no transmitía arrepentimiento pero si vergüenza.
- ¿Me quieres? —dije aún cerca de él—
- No lose, de lo único de lo que estoy seguro es de que no quiero estar lejos de ti. —susurró—
Iba a besarle, pero la voz de su hermano nos interrumpió.
- Pedri! Tienes que irte a entrenar!! —dijo desde fuer, el chasqueó la lengua—
- Ve, luego hablamos. —le sonreí y besé su mejilla, asintió resignado y se fue—
Pedri
No podía quitarme de la cabeza lo que le había dicho a Paula, pero era lo que sentía. Llegué al entrenamiento y todo parecía normal, menos la cara de Ferrán y los cuchicheos de todos.
- ¿Le has dicho a Ferrán que Paula es tu chica? -dijo Gavi apareciendo a mi lado—
- Es la verdad. —dije seguro—
- Es pronto para que digas eso bro, apenas os conocéis.
- No me importa, y a Ferrán tampoco debería de importarle.
Comenzamos a entrenar y la tensión que había entre él y yo podía cortarse con un cuchillo.
- ¿Qué pasa? Vayas caras traéis. —dijo Xavi mientras controlaba el entrenamiento—
- Ya no se respetan los códigos entre colegas. —soltó Ferrán sin más, provocando que todos le miráramos—
- ¿Cómo? —preguntó Xavi—
- Pregúntale a Pedri. —dijo alzando los hombros—
- Hablas de códigos cuando ni tú mismo respetas nada, ni a tu propia sangre. —dije ya enfadado y Gavi me presionó el brazo—
Él caminó hacia mí con ganas de pelea, y yo no sería capaz de contenerme. También fui hacia él y todos intentaron ponerse en medio, incluido el mister.
- ¿Se puede saber en que estáis pensando? —dijo Xavi frunciendo el ceño—
- Follarse a la hermana de un colega, ¿un poco feo no Pedri? —dijo él en burla lo que provocó que yo tensara la mandíbula y tensara los puños—
- Abandonarla a su suerte como hizo tu padre hubiera sido mejor, ¿no? —eso fue la gota que colmó el vaso, fue a golpearme pero Araujo pudo pararlo, pero lo agarré del cuello de su camiseta— Aléjate de Paula, te estoy avisando.
- Suficiente! —dijeron Gavi y Xavi al unísono, el primer mencionado me sacó del campo llevándome a los vestuarios—
Entré en los vestuarios furioso, estampé las botas contra las espinilleras cuando me las quité.
- Estás arriesgando mucho por una chica que conoces de menos de una semana, tío. —dijo Eric, no sé en qué momento había aparecido—
- Y arriesgaré más si es necesario, dejadme en paz. —suspiré frustado por no haberle partido la boca a Ferrán— La abandonó, no es quien para darme lecciones de moral.
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Un amor por casualidad.
FanfictionSe conocen de la forma más inesperada y una amistad repentina que ella hace con la novia de uno de sus mejores amigos consigue unirlos. Ambos con un pasado; - El nunca se enamoró de nadie y no tiene interés por hacerlo. - A ella la traicionaron de l...