Forget me not [Teen Wolf]

5. Espejos y ventanas

5. Espejos y ventanas

Era extraño. La palabra "Stiles" me sonaba muchísimo, pero por alguna razón no sabía si era algo relacionado con esta persona desaparecida o si era otra pista relacionada en sí con los Jinetes Fantasma y la Cacería Salvaje. Acordamos todos descansar esa noche y mañana continuar con la búsqueda de esa palabra, a qué podía referirse o qué era exactamente.

No era la pista que esperábamos, eso está claro. Al menos, no la que yo esperaba. Me resonaba la familiaridad de la palabra, pero no podía definir nada de aquello. Tan confundida me sentía que incluso hasta comencé a dudar de si esta persona que nos faltaba era realmente mi hermano desaparecido o simplemente yo estaba leyendo mal las pistas. Sentía un vacío, sí, y podría ser un hermano ya que he estado incluso perdida dentro de mi propia casa... Pero nos faltaban tantas piezas que no sabía ya qué pensar.

Prometí a mis amigos que intentaría indagar algo en mi casa. No iba a contarles aún a mis padres sobre este posible hermano desaparecido ni sobre la pista "Stiles". Ellos, papá más que nada por su puesto de shérif del condado, sabían sobre los Jinetes y su plan. Sabían de su existencia y que estaban en Beacon Hills, pero no les he contado nada más. Y no pensaba contarles aún sobre esto porque sentía que, sin suficientes pruebas o conocimientos, iba a ser difícil de creer. Hasta donde sé, ellos no han sentido esta pieza que falta. No como yo. Entonces, aún cabía la posibilidad de que estuviera equivocada.

Scott se ofreció a acompañarme. Supuse que podía oler mis emociones. Sí, me sentía algo triste y decepcionada, aún confusa y culpable. Le indiqué que estaría bien, que necesitaba algo de tiempo a solas para pensar. Scott no pareció muy de acuerdo con esa respuesta, pero la respetó. Me dejó irme a casa sola, en mi bicicleta. 

Al llegar, ya era casi media noche. Dejé mi bicicleta en el garaje y entré a casa. Escuché a mamá tarareando una canción. No estaba el coche patrulla de papá, por lo que supuse que hoy le tocaba el turno nocturno. Mamá detuvo su canción al verme en el marco de la puerta.

—Hola, cielo. Pensé que te quedarías a dormir en lo de Scott. —expresó. Observé que estaba ordenando algunas cosas de la cocina, tenía en sus manos un trapo y habían algunas compuertas abiertas. Mamá frunció el ceño—. ¿Estás bien? ¿Ocurrió algo, Sari? —preguntó. Era inútil ocultar que me encontraba afligida. Pero me mantuve firme.

—Sí, sí... —expresé aunque no sonó convincente. Tenía que rápidamente inventar una excusa, para evitar preocuparle y soltar todo lo que había ocurrido. Me pasé una mano por el rostro—. Es el estrés. Los exámenes, qué hacer después de la graduación...

Mamá dejó el trapo que usa para secar y se acercó a mí. Colocó sus manos encima de mis hombros. Me miró con suavidad — ¿Sabes que puedes decirme cualquier cosa, verdad? Y que nunca te juzgaré... —mencionó con voz tercia. Y por un momento, quise soltarlo todo. Pero me contuve.

—Lo sé, ma. —sonó un poco brusco, pero no era mi intención. Mamá alejó sus brazos e hizo un poco de espacio entre ambas. Me sentí un poco culpable. 

—Está bien —alzó sus manos, casi como mostrando su inocencia. Luego sonrió—. ¿Qué te parece si mañana hacemos tarde de chicas? Podemos ir a ver una peli... Así te despejas, del instituto y de otras fechas... —fruncí el ceño ante sus últimas palabras. Ella notó mi confusión. Suspiró—. Sé que el aniversario con Derek sería en unos días... 

Eso me heló la sangre.

Se me había olvidado por completo aquello. Mi mente estaba tan ocupada con los actuales problemas que me había olvidado por completo que en unos días se cumplía aquél aniversario. Aniversario que por razones obvias, no festejamos. Ni siquiera sé si llamarlo "aniversario". Pues era un día hipotético, no el día real de cuando comenzamos a salir, pues tuvimos altos y bajos. Después de ser mordida, nos besamos pero luego ocurrió todo aquello donde él tenía miedo y me ignoraba, y fue más tarde cuando él mismo se adjudicó el título de ser mi novio. Por lo tanto, no teníamos una fecha en sí.