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Al día siguiente, Jimin fue el primero en despertar, quien luego de estirar su cuerpo y hacer el saludo al sol, se dispuso a hacer la segunda cosa que más amaba, cocinar.
Era común que a los donceles, se les enseñara a hacer labores del hogar, entre ellas el cocinar, para así atender a quien sería su esposo y acompañante, o como le decía Jimin, su amo, pero este lo llevo un poco más lejos, aprendiendo platos complicados, más para su propio deleite que para satisfacer a alguien más...
-¿En dónde están los huevos?-susurro, mientras hurgaba en la carreta de provisiones.
-Se le perdió algo, prometido?-
-Tae!, me asustaste -
-Disculpe no fue mi intención-
-Tranquilo, eso me pasa por estar haciendo cosas así, sin decirle a los demás -
-Y que está haciendo, qué es lo que busca?-
-Huevos, quiero hacer el desayuno-
-No es necesario, de verdad...-
-Creo que sí: no quiero estar todo el viaje sin hacer nada, desde hoy el desayuno será mi tarea.-
-Prometido, no es necesario de verdad, es un gesto muy lindo, pero que pensara su majestad cuando sepa que lo dejé servirnos...-
-Me importa muy poco lo que su majestad pueda llegar a pensar...-Tae abrió los ojos, sin duda el promedio no era como ellos habían pensado.
-Pues debería, ya que ustedes serán...-
-Prisioneros uno del otro, estoy seguro de que él tampoco quiere este compromiso, por algo no vino por mí, no le interesa conocerme o al menos saber algo- tenía un punto, Yoongi tampoco quería el matrimonio, ya con lo segundo estaba algo errado- así que a mí tampoco me importa lo que pueda llegar a creer o pensar-
-No lo tome a mal, él tenía la intención, pero pasaron cosas...-
-Si esto hubiera sido planeado, no sé, hace dos meses tal vez lo creería, Tae, pero no, esta boda fue planeada antes de que el mismo naciera imposible que algo pasara tan grande como evitar que viniera, así que no lo justifiques-
-¿No le ganaré, verdad?- asintió, Tae solo suspiro era un doncel diferente único, sin duda- en ese caso mejor le obedezco- el menor sonrió.
-Excelente decisión - le ayudó a encontrar los ingredientes para el desayuno así como avivar el fuego, para cuando los demás despertaron un rico aroma los saludo, además de la radiante sonrisa del doncel- Prem ven prueba esto, sabe muy diferente a como lo hacía en casa-
-Jove... Digo Jimin, ¿usted cocinó?-
-Sí, es más, desde hoy seré el encargado del desayuno lo que dure este viaje- Yoongi miro a Tae quien no apartaba la vista del prometido, el plan de Min cada segundo cobraba más fuerza, si tan solo lograba unir a esos dos, no solo salvaría de aquel compromiso, sino que también le conseguiría pareja al menor para que no fuera tan grande la deshonra de su rechazo.
-Pues si sabe diferente, aunque son los mismos ingredientes, Jimin-
-Eso es porque las especias del reino Min son más fuertes y aromáticas, por eso aunque uses las mismas medidas e ingredientes sabrá un poco diferente- hablo Boun- está delicioso, prometido...-
-Ya basta al próximo que me diga así, lo castraré, oyeron!-
-Jimin cálmese- intervino Prem.
-Nada de cálmese, desde ahora soy Jimin, nada joven o prometido, solo Jimin, entendieron!?-
-No podemos solo...-
-Si pueden, no hay nadie aquí a quien sorprender, así que el protocolo está de más, y hablo en serio con lo de la castración-
Tae y Boun se miraron y luego a Yoongi, quien no comprendía el actuar de aquel doncel, tan activo y alegre.
-Si no nos queda de otra- hablo Min, dando a entender a los demás que también podían hacerlo.
-Suga, más respeto- lo regaño Tae.
-Lo lamento señor- tenía que seguir en su papel de soldado o no tardarían mucho en descubrirlo- con permiso daré la primera ronda-
-¿No comerás?- preguntó Jimin, quien tenía el plato ya servido en sus manos.
-No tengo hambre, prometí... Jimin- sin decir más mostro respeto y se fue dejando al menor con la molestia reflejada en sus ojos, ese tipo le recordaba demasiado a su padre, siempre mirándolo como poca cosa, como si su presencia fuera nada.
-Yo si quiero, se ve y huele en verdad deliciosa-
-Jimin tiene talento para la cocina, bueno, muchos talentos, pero sin duda esto es su fuerte...- dijo Prem orgulloso de su amigo mirando a Boun.
-No exageres Prem-
Y así como el pelinegro había dicho, los 6 soldados que habían probado la mano del menor quedaron fascinados, y alabaron el talento.
Jimin se sentía de alguna forma cómodo entre esas personas, en especial cuando los halagos venían del mayor de todos, Tae.
-Todo listo Jimin?-
-Si Tae, ya guarde y ordene todo- la sonrisa no podía evitarla cuando el castaño aparecía.
-Bien, en ese caso partiremos de inmediato, por favor suba...-
-Puedo ir a caballo!? - pregunto rápido - o en la carreta de provisiones, es que en serio no me gusta el palanquín, por favor - puchereo, gesto que dejó sin barrera alguna al mayor, quien sonrió y como por reflejo acarició los finos cabellos del menor gesto que dejó a Jimin con un sentir lindo en el pecho.
-Está bien, pero solo un par de horas, luego regresa al palanquín- Yoongi miraba desde una distancia prudente como aquella situación ocurría, lejos de sentirse molesto o celoso, sonreía satisfecho, no tendría que hacer mucho para que esos dos, sintieran algo el uno por el otro y cuando eso ocurriera se mostraría como su majestad y rechazaría aquel compromiso.
-Gracias- sonrió de aquella forma tan particular, tan única de los Park, esa donde sus ojitos también sonreían, viéndose en parte infantil y también adorable, causando una pequeña punzada en el estómago de Yoongi y una muy fuerte en el pecho de Taehyung.
-Jimin, ya tenemos que... Perdón, no sabía que estaba-
-Tranquilo Joven Prem, solo estaba intentando convencer a Jimin, de ir en el palanquín, pero creo que él me convenció a mí de ir en la carreta de provisiones- el pelinegro suspiro, era sin duda el poder de su amigo.
-Así que viajaremos cómodos al menos por unas horas...-
-Señor, hay rastros de fogatas más adelante, pueden ser arrieros o ...-susurro Boun cerca de Yoongi.
-Ladrones- volvió la vista a su amigo y luego al menor que ya estaba sobre la carreta con correas en mano, listo para guiarla- avísale a Tae, yo me adelantaré con dos más para despejar el camino.
-Bien-
Lo vio alejarse mientras él miró aquella sonrisa una vez más, por mucho que no lo quisiera de esposo, tenía que protegerlo, ya que era de igual forma un aldeano de su reino, y si todo salía como él quería el esposo de su general.
-Tú, ven conmigo!-
-Si majes... Suga! - lo único que Yoongi no sabía es que cuando tratas de unir a dos personas, puede que el enamorado seas tú.
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*Un Viaje Directo Al Amor*
FanfictionJimin y Yoongi jamás se habían visto, solo habían oído hablar el uno del otro, sabían que en algún punto unirian sus vidas en matrimonio porque así sus padres lo habían decidido, pero jamás les preguntaron su opinión. Jimin no quiere tal compromiso...