1.:Boda:.

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*

Según sabía, el viaje duraría casi un mes y medio, eso porque no podían ir a todo galope, debía ser algo relajado y tranquilo.

-Prem, me duele la cola tanto estar sentado-

-A mí también, el palanquín es lindo, pero nada cómodo, joven... Perdón Jimin-

El nombrado sonrió y trató de estirar su cuerpo, llevaban al menos unas 8 horas de lento viaje, la tortura más grande que podían darle al joven.

-Me harté, me niego a estar un mes metido en esta caja-

-Jimin que piensa hacer- lo vio quitar parte de su traje, lo que era más pesado y seguido abrir la puerta- espere!-

-¿Joven necesita algo?-

-Si Tae, veraz, necesito salir de aquí, esto es lindo, pero un tanto incómodo, sería mucho problema si mi acompañante y yo viajamos a caballo con ustedes?-era una petición extraña, hasta donde sabían los donceles eran más recatados.

-No sé si sea lo correcto, ya que usted....-

-Yo qué?- si tan solo el mayor mencionaba algo respecto a su condición de doncel, conocerá quién era en realidad Park Jimin.

-Bueno, usted es el futuro esposo de su majestad, así que no sé si sea correcto que viaje así, creo que estará mejor en el palanquín-

-Pues no, es incómodo, me duelen partes de mi cuerpo que no deberían...-

Yoongi miraba las expresiones de Jimin, sin perder detalle, era lindo como cualquier otro doncel, y parecía tener un poco más de carácter.

-Es lindo su majestad-

-Silencio Boun pueden oírte-

-Sigo sin entender por qué hace esto, si al final sea de su agrado o no su padre lo unirá a, el igual?-

-Al menos quiero saber bien con quien estoy siendo unido, este tipo de personas ve en estas uniones solo riqueza, y poder-

-Lo sé, muchos y muchas se le han acercado con esa intención-

-Solo un poco por favor! De verdad que esto es todo menos cómodo- miraban el berrinche y Yoongi solo rodó los ojos, era un niñato caprichoso, genial, lo que más odiaba, Tae miro le miro de reojo buscando aprobación o negación, consiguiendo la primera.

-Está bien joven, pero solo un momento es peligroso...- ni bien terminó de hablar cuando el menor salió del palanquín y estiró su cuerpo, respirando profundo, con aquella gran sonrisa en su rostro- que esté fuera -

-Ven Prem caminemos un momento, nunca he visto el exterior y posiblemente esta sea la única vez que lo haga, quiero aprovechar!-dijo mientras tomaba del brazo a su amigo, quien con suerte tenía un pie fuera del palanquín.

-E... ¡Espere Jimin, ha! No me tire o caeré al suelo- parecía un niño, Tae sonrió se le hacía tierna la actitud del prometido.

-Yo creo que es el diferente, al menos no se ve como los demás, majestad-

-Eso el tiempo lo dirá-

Y lo que debió ser solo un momento se volvió horas.

Horas que Jimin camino junto a Prem hablando y emocionándose de todo lo que sus ojos veían, para él todo era nuevo, llamativo hasta la más fea maleza era hermosa a sus ojos.

-Tenga cuidado Jimin, no esté tocando nada, no sabe si es venenoso-

-No te pongas igual que Jin por favor, déjame disfrutar mis últimos momentos libres, sí?-

-Su Doncel tiene razón joven - una voz amistosa resonó tras su espalda haciendo a ambos girar- eso se llama ortiga y si lo toca le picará e hinchará, los viajeros siempre la evitan-

-Ortiga, que nombre curioso- para Boun era un niño, uno que estaba descubriendo el mundo.

-Nunca la había visto?- lo vio negar- crece mucho en estos caminos, en especial en esta parte del reino...-

-Ni así creciera frente a mi puerta, hubiera podido verla, jamás había salido de la casona, a mi padre no le gustaba- Boun miro a Prem y este como entendiendo asintió.

-Entiendo, lo cuido...-

-No, cuidar y esconder son dos cosas muy diferentes...-

-Boun, dígame solo Boun -

-Pues tú solo dime Jimin, odio en verdad el "Joven"-se acercó y le tendió la mano al soldado que no supo qué hacer, no podía solo tocar al prometido de su amigo y majestad- oh, por favor, no se va a enterrar - Jimin la tomo y movió en el gesto de saludo - no está aquí así que no creo que le duela-

-Tuvo que atender...-

-No importa, tampoco es como si me encantará la idea de verlo, me da curiosidad, pero a la vez rabia-

-Jimin...- Regaño Prem- está hablando de la majestad de Boun no sea sin respeto-el menor miró al soldado y solo sonrió.

-Olvídalo- retomaron la caminata seguido de su doncel, dejando a Boun sorprendido, sin duda ese joven no era igual a nadie que haya visto.

-Terminaste?-

-Celoso?-

-Para nada, me da lo mismo, incluso si se fija en ti sería mejor- el mayor sonrió.

-Deberías darte un momento y hablarle, puede que te sorprendas majestad- lo dejo parado, pensando un poco en sus palabras, sorprenderse? Porque se sorprendería por un niño caprichoso y sin modales.

Cuando la tarde comenzó a caer, buscaron un lugar seguro para hacer un campamento provisorio, siendo el palanquín el lugar central, Tae y Boun miraban como el prometido ayudaba codo a codo con los arreglos, incluso con la leña para el fuego, no quería ser un estorbo, y más aún demostrarles a esos soldados que él no era un doncel débil, aunque sus manos dolieran por el trabajo.

-Sal de ahí rama, te necesito...- tiraba y tiraba, pero la rama no cedía, respiro profundo y tiró con todas sus fuerzas- te dije que cayeras - en cuanto tiro esta se soltó del árbol haciéndolo caer de trasero con la rama sobre él, y lejos de reclamar solo se echó a reír, el mundo exterior era increíble- de cuerdo te vengaste, lo admito-

-¿Está hablando con el árbol?- miró a su derecha notando la mirada de aquel al que llamaban Suga, esa mirada juzgadora, la que él tanto odiaba, esa que su padre siempre le daba.

-Son seres vivos, no sabías, tienes que hablarles para que así ellos te cuiden- y si, la mirada de Yoongi no fue la más amistosa- necesita algo?- así como tampoco lo fue la actitud de Jimin.

-No, solo...-

-Pues en ese caso, con permiso - tomó nuevamente la rama, y comenzó a caminar de regreso al campamento, dejando al mayor con una ligera molestia, su futuro esposo sería sin duda un dolor de cabeza.

-Te equivocaste papá, este niño no es digno de reinar a mi lado-

Lo siguió con la mirada hasta que lo vio llegar junto a Tae, a quien le regaló no solo la rama, sino una gran y tímida sonrisa, fue entonces que aquella tonta idea pasó por su mente.

-Creo que ya sé cómo evitar esa boda- cuidado Yoongi no siempre los planes salen como uno quisiera.

*Un Viaje Directo Al Amor*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora