Uɴᴛᴏᴜᴄʜᴀʙʟᴇ -[Tabi x Agoti]

#21

Estirando la enorme camiseta que Agoti le había comprado, el ruso observó cómo dentro de esta misma prenda podría caber perfectamente otro Tabi, ¿por qué su amigo estaba consiguiéndole ropa tan grande últimamente?

— ¿Me estás llamando gordo? —Preguntó con cierta indignación.

— No, es que.. Vamos, Tabi. Tu panza debería empezar a crecer más, necesitará espacio y es mejor tener la ropa precisa para ese momento.

— Pero esto es excesivo. —soltó el pliegue de la camiseta, observando cómo quedaba totalmente grande.

Estirando sus brazos a sus costados se observó en el espejo, definitivamente parecía un chiste, se negó a ir a la clínica así, y tras quitarse aquella camiseta volvió a ponerse una de sus sudaderas, su vientre había crecido muy poco, era casi imperceptible el hecho de que había un bebé ahí, o al menos eso quería creer.

De camino a la clínica, el más bajo jugaba un videojuego en su teléfono, su acompañante y alpha vinculado se mantenía a su lado, observando la pantalla de su teléfono para cuando llegó un mensaje ambos llevaron la vista a dicha barra de notificación, frunciendo el ceño al mismo tiempo al leer algo totalmente malinterpretable enviado por uno de sus amigos en común. Tabi miró de reojo al chico a su lado, notando cómo este desviaba la mirada mordiéndose el labio inferior tratando de aguantarse la risa, pero era evidente que había pensado lo mismo que el, definitivamente iba a desactivar las notificaciones del chat que tenía con Whitty, ese sujeto se expresaba muy mal a veces y en algún momento podría meterle en un problema.

Llegando a aquella clínica, ambos bajaron del vehículo que les transportaba, caminando a la par en dirección a la sala de espera para aguardar en cuanto su médico de seguimiento les llame.

Estaban esperando hacer unos exámenes de ecografía, necesitaban checar constantemente que el bebé no tuviera ningún contratiempo, el doctor que les había atendido con la anterior emergencia dijo que tenían que hacer una ecografía lo más pronto posible para evitar más sorpresas más adelante, y ahí estaban.

Mirando a su alrededor, él omega observó cómo una pareja totalmente mimosa estaba unos cuantos asientos más allá, la panza de ese omega era grande, definitivamente no quería terminar así, pero estaba seguro de que no podría evitarlo.

— ¿También quieres amor? —Preguntó Agoti atrayéndole un poco al notar que observaba a la pareja cercana.

— No, no quiero. —Se cruzó de brazos.

— ¿Ni siquiera un besito? —Insistió.

— No, aquí no. —Se separó un poco.

Ladeando su cabeza, el más alto iba a seguir insistiendo, pero para suerte del omega el médico les hizo pasar.
Separándose, ambos siguieron la misma rutina de siempre, saludar al médico, y acomodar a Tabi en la camilla.

— Oí que tuvieron un contratiempo. —Dijo el doctor, levantando la camilla para más comodidad.

— Sí, por eso estamos aquí más temprano. —Respondió él omega, alzando su sudadera y bajando un poco su pantalón.