Los omegas por instinto tenían una gran conexión con los cachorros. Un lazo fraternal, rozando lo paterno, nunca uno pasional y romántico. Esto, claramente, era un problema para Lionel.
Jamás lo pensó, realmente nunca consideró la diferencia de edad entre él y Guillermo. Ahora, sentado en su cuarto de hotel tomando un mate en completo silencio, era evidente que esto era un gran elemento a tomar en cuenta desde el inicio. El omega lo consideraba no un alfa, sino un cachorro de alfa.
Suspiró, ahora no solo tenía que averiguar cómo cortejar al omega, también debía demostrarle que era un alfa adulto, hecho y derecho. Necesitaba consejos de alguien que sí tuviera experiencia.
Y creía saber quién podía ayudarlo.
☁️☁️☁️
Rafael Márquez era un popular alfa, un jugador exitoso que estaba entrando a sus treintas en el pico de su carrera. Todo parecía marchar bien en la vida del jugador, una vida envidiable. Pero esa era una imagen demasiado superficial de la situación del alfa. En realidad, Márquez sentía que todo se desmoronaba.
Fue su culpa, completamente suya.
Se dejó llevar por el éxito, su ego se elevó hasta los cielos y separó sus pies de la tierra. Sentía que se podía comer el mundo, sin consecuencias.
Gran error.
Guillermo y él se conocieron cuando ambos tenían tan solo veintiún años. Sus carreras estaban despegando y casi instantáneamente forjaron una buena amistad. Fue con el paso de los años que los sentimientos de ambos jugadores evolucionaron en algo completamente diferente. Y fue cerca de su cumpleaños número veintitrés que en un arrebato de valor provocado por los celos, Rafael besó a Guillermo a la luz de la luna en medio de una discusión.
El resto solo fluyó.
Iniciaron una relación, miel sobre hojuelas. Márquez solo se enamoraba más cada día y el chico de cabello rizado se veía cada vez más radiante. Sin embargo a pesar de llevar una relación estable, esta nunca se hizo pública. Guillermo siempre había querido anunciar su relación, mas él nunca quiso hacerlo porque consideraba que la prensa los acosaría aún más de lo habitual, y marcar al omega solo lo haría evidente. Así que se abstuvieron de hacer ambas.
Cuatro años después Rafael le pidió matrimonio, prometiendose mutuamente una vida juntos.
Tal vez fue eso, el compromiso hizo que tomara al omega por sentado, dejándolo de lado y enfocándose solamente en su carrera. Fue ahí cuando, para el alfa, ser públicamente "soltero" comenzó a traerle otros beneficios.
Su versión de veintitrés años seguramente lo golpearía al enterarse de la infidelidad.
Era un omega superficialmente bello, un modelo, se sentía bien estar a su lado. Se asemejaba a un trofeo para mostrar. Tal vez confundió esa sensación de superioridad y poder que le brindaba el omega con felicidad. No lo sabe. Lo que sí sabe es que él mismo declaró estar enamorado de aquel chico.
Creyó que ya no amaba a Guillermo, su relación era monótona y aburrida. Pensó que ese modelo era lo que encajaba en su vida, ahora llena de éxito. Así que poco después de cumplir veintinueve años y dos años después de comprometerse con el omega de rizos, lo citó a una cena privada y rompió el compromiso.
Fue hasta que vió a Guillermo levantarse sin protestar y salir de su vida sin dedicarle una sola palabra que se dio cuenta de su error.
Gran error.
Claramente el alfa mexicano no era un gran ejemplo a seguir cuando de relaciones se trataba.
Pero esto no todos lo sabían.
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Cachorro de Alfa [Messi x Ochoa]
FanficLionel Messi, el alfa y joven promesa del fútbol, ha pasado la mitad de su cortos veintiún años de vida interesado en una sola persona, el portero mexicano, Guillermo Ochoa. Había soportado años queriendo acercarse al omega, sin embargo había un peq...