¡One-shots de Genshin Impact!

Venti x ¡Femalereader

Buenas, decidí cambiar un poco el formato de la escritura, espero que no les moleste mucho.

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-¡Ohoho!-
Venti río, con sus brazos cruzados y observando sonriente las cartas que estaban sobre la mesa, ustedes dos estaban jugando a "Juego de Sabios" y, de suerte, le estabas ganando.

-¡Si que te lo tomas en serio, eh!-
Tu solo le diste una mueca burlona y sacaste nuevamente tu mazo, la habilidad definitiva de tu personaje, Diluc. Venti solo cambió su rostro completamente a uno derrotado

-Estas acabado, Venti-
Empezaste a reír mientras veías al incrédulo Venti observando como su pequeña actitud "inocente" no había funcionado en ti. Eras una de las primeras personas que no habían caído en sus encantos...pero...la verdad, es que...ya habías caído en sus encantos ¿A quién no le gustaría a un chico bajo, extrovertido y con un increíble sentido del humor y que sabe aliviar el ambiente?

-Bueno, bueno...admito mí derrota-
Venti dijó, pegando su espalda a la silla y suspirando.

-¿Quieres otra ronda? Si quieres te puedo enseñar técnicas.-
Dijiste, ordenando ya tus cartas y la mesa un tanto desordenadas con bebidas (de Venti) alrededor.

-¡Bah! Ya no quiero volver a ver ese bendito juego-
Venti se cruzó de brazos, haciendo un berrinche y cerrando sus ojos mientras dirigía su rostro hacía otro lado, tu solo le sonreiste.

-Bien,bien, cómo tú digas... entonces...¿Qué quieres hacer, en ese caso?-
Venti abrió un ojo para observarte y te mostró su típica sonrisa
-¿Está bien si te muestro un lugar?-
Tu te quedaste un poco perpleja al ver cómo su humor había cambiado tan rápido, pero volviste a la tierra.
-Bien... sorprendeme-
Venti solo te mostró su sonrisa, claramente feliz.

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-Este lugar...- dijiste, siguiendo a Venti a un pequeño lago que había justo en la Guarida de Stormterror, era un lugar un tanto peligroso pero, con un chiquillo experimentado en el arco y que tiene una visión, no tendrías problemas...o eso crees.

-Sip, es uno de mis lugares favoritos... ven, siéntate- Venti se sentó en una roca que estaba justo delante suyo y palmeó a su lado para que te sentarás justo al lado de él, y, lo obedeciste. Cuándo ambos ya estaban sentados, se quedaron en silencio un par de momentos, observando el cielo y, estabas específicamente viendo un "castillo" flotante, Celestia, el lugar de los dioses y la entidad que "protege" a los humanos.

-Oye, Venti...-
Aún observando totalmente concentrada a esa estructura. Venti solo te dió como respuesta un : "¿Hm?"
-¿Tu crees que les importemos a los dioses...?-
Venti por un momento pensó que había dejado de respirar y, lentamente, giró su rostro hacía ti, con la boca un tanto abierta. No podía decir nada. No le salían las palabras siquiera.

-Es decir...bueno, ya sabes...ese castillo...se supone que es Celestia, ¿No? Y nos tiene que proteger y todo eso, pero...¿Que rayos habrá pasado en Khaenriah?-
Seguiste sin despegar la mirada de la misteriosa estructura flotante, mientras que el chico solo te miraba, todavía sin el habla devuelta. Hasta que, finalmente, volteaste su rostro hacía el y después tus ojos a su rostro. Mirándolo directamente, el solo te observaba, un tanto impactado y...con miedo.

-Yo...yo...no sé que decirte-
Venti apartó su vista de ti...¿Cómo ibas a reaccionar? ¿Que ibas a pensar sobre él? ¿Su relación cambiaría? No quiere perderte.
-¡Jaja! Está bien, después de todo...eres un poeta, no un filósofo.- reiste un poco, aunque...la reacción de aquel chico era un tanto...¿Extraña?

-B-bueno...este tema ya está siendo un poco serio, ¿No crees? ¡Jaja!- el chico río nerviosamente, tratando de no lanzar algo que delatara su identidad. Sus dotes de actuación habían desaparecido por arte de magia.

-Venti...¿Estás bien? Estás actuando un poco extraño...¿Te incomode o algo así?-
Te acercaste un poco a el, y eso, obviamente lo sobresaltó y solo trató de desviar su mirada de tu rostro y solo pensar en la manera adecuada en la cual podría manejar sus palabras correctamente.

-¡No, no! Es solo que...emm...-
Venti solo se repetía a si mismo de mantener su boca callada, aunque su otra parte le gritaba que lo dijera, que no eras ese tipo de persona.

-¿Es solo que...?-
Trataste de que hablará y, Venti volvió a encontrarse con tu mirada, ¿Por qué estaba tan nervioso? ¿Era por Celestia? ¿Era porque te iba a contar de que era un arconte? O...¿Era solamente porque eras tú?

-Y-yo...-
Nunca habías visto esta parte de Venti, la avergonzada y nerviosa, además de las veces en donde no sabía cómo pagarle al maestro Diluc.

-¿Tú...?-
Te acercaste un poco más a él, sin darte cuenta de la cercanía en la que estaban y esto sobresaltó aún más al pequeño bardo, que gracias a esta acción le permitió mantener un poco más de "control" sobre el mismo

-Yo...¡Creo que es hora de irse!- se paró inmediatamente, se dió media vuelta y caminó bastante rápido, tu tuviste que pararte a la velocidad de la luz para no perderlo, corriste hacía el y trataste de alcanzarlo, pero el era bastante rápido, como el viento. El solo quería esperar la oportunidad perfecta para decirte su identidad, su secreto... quizá pronto te lo dirá y...¿Quién sabe? Quizá otros secretos se revelen...secretos mortales que podrían ponerte en peligro...pero...Venti no es así...¿Verdad?