¡One-shots de Genshin Impact!

Cyno x Malereader

La justicia falla

-¡Argh!-

Sentiste como tu cuerpo completo sufría un gran impacto contra el suelo y tus dos brazos detrás de tu espalda, aprisionado completamente, ¿La causa? Una de las personas más influyentes en Sumeru. Cyno, el juez supremo. Sabías que no te debías meter con él, pero fallaste. Después de todo, cada vez que veías un tesoro, te desconocías. Eras un ladrón bastante experimentado, pero, sabías que la única persona que puede hacerte daño y encarcelarte de por vida era Cyno. Lo último que recuerdas era el dolor en tu pecho, después de eso, no recuerdas absolutamente nada. Hasta que despertaste. Te encontrabas en un tipo de camilla, pero en una celda oscura. Habías sido encarcelado.

Cuándo intentaste moverte, notaste que tus piernas y muñecas estaban sujetadas a unas cadenas de hierro.

-¡Maldición!-

Maldeciste en voz alta, intentaste nuevamente de zafarte de esas cadenas, pero tus intentos eran en vano. Aunque sabías que no podías rendirte así como así tan fácilmente, así que seguiste intentado, hasta que unos pasos sonaron afuera de la celda, inmediatamente, cambiaste tu pose a una de guardia. No pudiste ver quién era, pero se notaba su silueta en la oscuridad. Era un tanto pequeño y notabas que tenía los brazos cruzados, estaba mirandote fijamente, lo sentías.

-¿Quién está ahí? Si eres uno de esos estúpidos guardias, te voy a-

Callaste tus palabras inmediatamente y abriste los ojos de par en par cuando aquella silueta salió de la oscuridad, era Cyno. Una de las pocas personas a la que le tenías temor.

-Es mejor que ni intentes escapar. Sabes muy bien que te he perseguido en estos 6 meses...y ahora la justicia te está llegando.-

¡Mierda! Estabas en un gran problema. Ni siquiera las palabras te salían, estabas inmóvil y callado, siquiera su presencia era lo suficientemente imponente como para que te deje sin siquiera alguna reacción. Cyno solo te miraba en silencio y soltó un suspiro.

-¿Por qué haces esto? No dañas a tus víctimas. Solo les robas. ¿Por qué? ¿Acaso querías que te atrapara a propósito?-

Solo te quedaste en silencio. Y tenías una razón para robar y no dañar a la gente: tenías una deuda. Específicamente, una deuda que tu familia te había pasado a ti y bueno, si no lo hacías... iban a hacer una masacre con toda tu familia. No es que le tengas miedo a la muerte, si quisieras, podrías morir por tu familia pero...no te iban a dañar a ti, iban a dañar a tu familia...tu salvación de este mundo de mierda. Solo desviaste tu mirada. Él solo mantuvo el silencio y, nuevamente, dió un suspiro.

-Escucha, si no hablas no te podremos ayudar. Solo dime la razón del por qué estás robando y eso es todo. Haré todo en mi poder para ayudarte, así que, empieza a hablar.-

Su voz era neutral pero, por alguna razón, sentías que sus palabras eran verdaderas y sinceras...de alguna manera...confiaba en él, por más que fuera tu enemigo. Retomaste el contacto visual con él.

-Si te digo...¿Qué podrías hacer?-

Cyno se te quedó mirando por unos segundos, al parecer, estaba planeando que decir.

-Ya lo dije, haré todo lo que pueda. Así qué, empieza a hablar.-

Te estabas debatiendo en tu interior: ¿Le deberías decir si o no? ¿Y si estaba mintiendo? Y después de unos pocos segundos, ya tenías tu respuesta.