Tights: "Ah...eso fue refrescante...", pensó mientras cerraba la llave y salía de la bañera con una toalla rosa envuelta alrededor de su cabello mojado.
Se sintió descansada después de varias horas de sueño, pero después de una relajante ducha. Se sintió mejor que nunca y lista para la acción. Al final, su familia tenía razón cuando dijeron que necesitaba descansar antes de hacer los arreglos para esta gran fiesta. La hermana mayor de Bulma pronto apareció de nuevo en su habitación y se puso la ropa que había elegido antes de meterse en la ducha. Rápidamente se secó el cabello y se miró en el espejo para asegurarse de que no le faltaba nada y estaba presentable para su familia.
Sentada sobre su colchón, Tights abrió su maleta para asegurarse de que había sacado todas sus cosas. Todos sus atuendos, chaquetas, maquillaje y otras prendas habían sido desempacadas tan pronto como se despertó y las colocó en los cajones. Extendió la mano a través de la cama en busca de su bolso, buscando en él y sacando la hoja de papel que contenía toda la información sobre la fiesta que había anotado mientras aún estaba en la Isla Omori. Se sintió aliviada de que no se le hubiera caído del bolso mientras viajaba a la Ciudad del Oeste, ya que todo eso era crucial para la planificación de su fiesta.
Ya había caído la noche y era el momento perfecto para simplemente dar un paseo por el recinto para descansar. Después de haber estado ausente durante años, sintió la necesidad de salir y tomar un poco de aire fresco. Pero no sin antes echarle una mano a su hermana con esta gran fiesta. Escuchó a Bulma y a su sobrino Trunks riéndose abajo en la sala de estar y, por lo que oía, ambos se estaban divirtiendo. Queriendo estar cerca de su familia en este momento, Tights se levantó de la cama y salió de su habitación después de asegurarse de que todas las luces estuvieran apagadas.
No había tardado mucho en aparecer en el pasillo. Después de oler el aire, se dio cuenta de que su madre ya había comenzado a preparar la cena. La única comida que tuvo hoy fue un pequeño almuerzo que le proporcionaron después de abordar su vuelo hace horas, por lo que su estómago se sentía realmente vacío. Ahora podría volver a saborear la cocina casera de su madre después de tantos años. Tights se apresuró a la sala de estar donde su hermana y su sobrino se estaban divirtiendo.
Madre e hijo estaban sentados uno frente al otro en la sala de estar con un juego de mesa sobre la mesa de café. Dos dados, algo de dinero, fichas pequeñas, una pila de cartas y otros elementos colocados sobre un tablero. Tights se paró cerca de la entrada y los observó un rato mientras jugaban uno contra el otro. Por lo que parecía, debían haber estado en eso durante horas mientras ella dormía. Ambos habían estado tan distraídos que ni siquiera la habían notado allí de pie con los brazos cruzados. Cuando Trunks estaba a punto de lanzar un dado, giró la cabeza y finalmente notó a su tía parada cerca de la entrada con una gran sonrisa.
Trunks: "¡Tía!", gritó antes de levantarse de un salto de su asiento y correr hacia su tía para abrazarla. Tights se arrodilló y abrazó a su sobrino, usando una mano para revolver su cabello lavanda.
Tights: "Jejeje ¿Qué pasa, chico?", preguntó mientras lo liberaba del abrazo y con sus ojos mirando sobre su complejo pero divertido juego.
Trunks: "Mamá y yo estábamos jugando varias rondas de este juego", explicó señalando con el dedo hacia su juego de mesa. "Comenzamos a jugar en algún momento después de que salimos de tu habitación y no hemos parado desde entonces. ¡Este juego realmente te atrapa!"
Tal como estaba pensando, Tights pensó con una sonrisa, feliz de verlos pasar tiempo juntos como madre e hijo. Bulma se dio la vuelta para mirar a su hermana mayor, con el brazo colgando sobre el sofá en el que estaba sentada.
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Aprendiendo a Amar
FanfictionDespués de la derrota de Majin Bu, Gokú y Milk deciden separarse, lo que deja a la familia devastada. Todos intentan ayudar al Saiyajin, pero él se niega a hablar con sus amigos. Hasta que sucede un sorpresivo reencuentro con Suno, una vieja amiga d...