Capítulo XVII

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La Corporación Cápsula nunca había estado tan ocupada. Fiel a su palabra, Tights hizo todos los arreglos necesarios e incluso más para que los artículos de la fiesta fueran entregados allí mismo en el recinto a la mañana siguiente. Los camiones de reparto estaban estacionados justo en frente de la entrada y los trabajadores de la mudanza llevaban todo directamente a los grandes patios donde se llevaría a cabo la fiesta de reunión. Las tareas se dividieron entre toda la familia Briefs y muy pronto, todos estaban trabajando juntos como un equipo.

Se instalaron parlantes en el patio, y un DJ estaba sentado en una mesa en la esquina con una computadora portátil conectada a los parlantes. Después de terminar las tareas que se le asignaron, Trunks se encargó de llevar las mesas y sillas restantes a todos los lugares disponibles que pudo encontrar, dejando a algunos de los trabajadores de la mudanza desconcertados sobre cómo un niño pequeño podía poseer tanta fuerza. Las mesas de buffet más largas estaban colocadas fila por fila en el medio del patio. Bulma y Tights eran responsables de colocar manteles sobre ellos, así como de arreglar los platos y los cubiertos. También instalaron sombrillas en cada mesa para proteger a los invitados del sol. Se había pedido tanta comida, aperitivos, bebidas, dulces y postres que requirió el mayor esfuerzo de equipo para prepararlo todo y en un estilo buffet para que todos los invitados pudieran servirse cuando ellos quisieran. Frente a las mesas y sillas había un escenario para la actuación de La Banda de la Estrella Naranja con una cortina roja carmesí.

El Dr. Briefs subió a una escalera para colgar algunos adornos en la parte superior mientras su esposa Panchy se aferraba a la escalera con fuerza para evitar que su esposo se cayera. Después de poner un frasco frío y helado de ponche de frutas sobre la mesa, Bulma dio un paso atrás con una sonrisa y se secó el sudor de la frente mientras su hermana mayor daba instrucciones a los trabajadores de la mudanza ayudándolos.

El único que no contribuyó fue su obstinado esposo que estaba pasando el tiempo que le quedaba en la Cámara de Gravedad antes de que comenzara la fiesta. Bulma negó con la cabeza mientras pensaba brevemente en él. Tratar de involucrarlo en los preparativos estaba fuera de discusión, ya que resultaría en una gran pelea entre ellos que ella quería evitar, por lo que pensó que era mejor dejarlo solo hasta que todo estuviera hecho.

Tights: "¡Uf! ¡Supongo que esa parte está terminada!"

Bulma: "Pareces realmente agotada, hermana", comentó.

Tights: "Lo estoy. Hacer todos los arreglos es mucho trabajo", remarcó mientras miraba a su madre y su sobrino ahora llevando y poniendo manteles plateados sobre las mesas. "Pero vaya, armar todo antes de que lleguen los invitados consume todas tus energías".

Bulma: "¿Quieres que te traiga un poco de agua? Parece que te vendría bien".

Tights: "Eso sería genial"

Su hermana se apresuró a entrar al edificio y regresó en poco tiempo con una botella de agua fría.

Tights: "Gracias", dijo mientras tomaba la botella y se la bebía casi al instante, para luego arrojarla a un basurero cercano y siguió observando el resto de la acción.

Bulma miró a su padre que estaba bajando la escalera después de terminar una parte de su trabajo. Se dirigió a ellos con una sonrisa cansada pero orgullosa.

Dr. Briefs: "Bueno señoritas, creo que he terminado de poner todas las decoraciones. Al menos las de arriba".

Tights: "Hiciste un trabajo maravilloso, papá", elogió antes de darle una palmada en la espalda. "La empresa de mudanzas se encargará de todo lo demás, así que no tienes que preocuparte por hacer nada que te exija más".

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