Old Black Magic

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Canción: That Old Black Magic.
Intérprete: Michelle Williams.
Película: My Week With Marilyn (2011)




Hyoga había llegado a los estudios Nikkatsu en Kyoto con la intención de consolidar su carrera en el mundo del cine.

Criado en Rusia, Hyoga Alexeyevich Lebedev fue hechizado por la magia del cine a la tierna edad de cinco años, cuando su madre lo llevó a una proyección de Rusalka en 1910. Tras ver el trabajo de Vasily Goncharov, el pequeño rubio quedó prendado del mundo cinematográfico.

Edwin Porter y Georges Méliès eran sus héroes, y en cuanto tuvo edad suficiente para trabajar, buscó iniciar su camino como estrella de cine.

Actuar era lo que más amaba, aunque no necesariamente lo que hacía. Había tenido la oportunidad de trabajar a lado de grandes personalidades como Lev Kuleshov; también había fungido como mensajero en la producción de El Acorazado Potemkin, y había logrado cruzar una o dos palabras con el director Eisenstein. Aún con sólo haber tenido pequeños trabajos tras bambalinas, Hyoga creía que iba por buen camino.

Desgraciadamente, su condición mestiza le cerraba varias puertas al presentarse en audiciones. Su padre —a quien jamás había conocido— era de ascendencia japonesa, y los filmes soviéticos no deseaban a un mestizo como protagonista en la pantalla grande.

Así fue como decidió probar suerte en Japón, quizás ahí le darían una oportunidad.


That old black magic has me in its spell
That old black magic that you weave so well


'Chimei-tekina tsubaki'* era la más reciente producción de los estudios Nikkatsu. Una película de misterio protagonizada por el dúo más celebrado del género en todo Japón:

Fujita Shun, un chico de cabello castaño y piel blanca, con hermosos ojos verdes y un rostro excepcionalmente bello. Y Hashibira Inosuke, un chico de cabello negro y piel clara, también con ojos verdes y un físico de ensueño.

Dado el obvio atractivo de ambos, sus carreras se habían desarrollado de maravilla, y después de su primer film juntos, todas las producciones con temática misteriosa y detectivesca los querían como protagonistas.

La filmación estaba a punto de iniciar, por lo que Hyoga había descartado por completo la posibilidad de actuar en ella; no obstante, había conseguido un trabajo más importante que los que había tenido antes: asistente del director.

Esta vez, Hyoga Alexeyevich estaría en primera fila en lo que a la producción y logística se refería; y muy seguramente, despampanar a todos con sus increíbles habilidades de actuación sería pan comido.

Excepto que no...

'Asistente del director' era simplemente otro título para 'mandadero', sólo que en esta ocasión, en vez de servirle a la producción entera, únicamente lo hacía para el director. Justo como en su tierra natal, nadie le prestaba atención.

-Su café, Mizoguchi-san.- Hyoga entregó de mala gana el café al director, Mizoguchi Shion. Tal vez si este no hubiera estado tan inmerso en la plática con el camarógrafo, habría notado y reprendido el tono de su asistente.

-Gracias. ¡Ah! ¡Hyoga! ¿Le avisarías a las dos estrellitas que estamos por comenzar? Qué amable.

El rubio refunfuñó y se dirigió a los camerinos. Estaba tan irritado que no se molestó en tocar, simplemente abrió la puerta. Shun e Inosuke estaban sentados frente a frente teniendo una conversación, una que terminó abruptamente al ver al ruso.

-Los esperan en el set.- escupió hostilmente, si hubiera tenido más cerebro, podría haber entablado una amistad con los actores para que estos le abrieran algunas oportunidades. Pero el ruso era terco y en ocasiones algo imbécil.

Hyoga x Shun Songfic CompilationDonde viven las historias. Descúbrelo ahora