BDSM ¿Quieres ser mi Sumiso? | MINSUNG

Capitulo 13

Jisung había hecho lo que Minho pidió.

Quito su ropa, se colocó unas medias de encaje que llegaban por encima de la rodilla, y espero arrodillado sentado sobre sus propios talones.

Dudo sobre ponerse el antifaz, así que decidió esperar a Minho para ver si también era necesario colocarlo.

A los minutos Minho entró.

Vestido con el pantalón de su traje y la camisa blanca de botones totalmente abierta, dejando ver su trabajado abdomen y una pequeña cicatriz en su costado, que para Jisung había pasado desapercibida hasta hoy.

Caminó con Paso seguro hacia él, llevaba consigo un vaso con whisky a las rocas.

-Te dije que te colocarás todo lo que estaba en la cama- lo miro con dureza.

Pero Minho entendió la duda de Jisung. Hizo una señal con su dedo índice y medio.

Jisung entendió y gateo hacia él, al llegar a la orilla de la cama aún arrodillado Minho le habló con voz pausada y suave

-Tienes que confiar en mi Jisung- lo besó en los labios sin profundizar mucho.

Pero el beso fue suficiente para dejar a Jisung sin aliento.

- Voy a colocarte esto- tomó el antifaz.- recuerda que siempre podemos parar-

-Sí, lo sé-

- ¿cuál es la palabra de seguridad?- preguntó Minho.

-ROJO- dijo el menor con seguridad.

- Muy bien.

Minho colocó el antifaz y besó nuevamente a Jisung.

Comenzó a admirar el cuerpo del contrario, su piel, cada Lunar o cicatriz.

Comenzó a besar su cuello, bajó su boca hasta las clavículas, oliendo el aroma natural de Jisung mezclado con ese rico y tenue perfume que utilizaba.

Bajó sus manos y recorrió su torso desnudo, pasó la punta de sus dedos acariciando suavemente los muslos del contrario hasta llegar al elástico de las medias que halo con un poco de fuerza y las dejó ir, golpeando con estas las tonificadas piernas de Jisung.

El menor dio un pequeño brinco en forma de sorpresa.

- Puedes hablar pero no moverte, ¿Entendido? - preguntó Minho.

- Sí, Minho-

Minho lo tomó del mentón ejerciendo un poco de fuerza en el acto.

-Sí señor Lee- repitelo.

-Sí, señor Lee!- reitero Jisung.

Jisung pudo sentir como Minho se había alejado de él, escuchaba los pasos. A falta de un sentido los cuatro restantes comenzaban ha agudizarse, y pudo escuchar como había abierto algún cajón del buró que se encontraba cerca de la cama.

Y no se equivocaba, Minho había sacado una fusta de cuero, con el que comenzó a dar pequeños golpecitos en el trasero respingado de Jisung.

Lo sorprendió y puso en alerta, pero trataba de repetirse que tenía que confiar y aprender a ceder un poco.

Jisung escuchó cómo Minho se colocó frente a él, movió su vaso con whisky y le dio un trago.

Pudo sentir cuando Minho abrió su boca con la mano derecha ejerciendo presión, chupando su lengua y a la vez depositaba un trago del alcohol desde su boca.