Kaia [Un Oscuro Despertar] ✓ Wattpad #PGP2023

28 | League Of Leyends

28 | League Of Leyends.

Alan Hayes.

—¡Joder, está sangrando!

—Bajen la voz, nos van a pillar...

—¡Duele...!

—Llevémoslo al hospital...

—¡No! Mi madre está ahí, de seguro le dirá a su madre lo que ocurrió.

—Creo que en estas circunstancias no debemos pensar en quien se meterá en problemas, Peter. —dice Charlie mientras me mira desde arriba.

Estar tirado en el suelo gimiendo de dolor y tus dos mejores amigos viéndote desde arriba con muecas es algo vergonzoso. Quisiera taparme el rostro con cualquier cosa, pero a mi tacto no se encuentra nada más que asfalto y la suave mano de Dana.

—Vamos, bebé... Aguanta un poquito más.

El encontrarme sangrando en la pista de skate, definitivamente no fueron las consecuencias que me planteé al escaparme del instituto para venir aquí.

Debí practicar mejor ese giro, antes de intentarlo en la rampa.

La mano de Dana, mi casi novia, sostiene la mía. Su cara a centímetros de la mía, su cabello rojizo cayendo a los lados de su cara.

Sus ojos están cristalizados. Está realmente preocupada e igual de asustada que mis amigos y compañeros de clase; Peter y Charlie.

—Peter, tu madre trabaja en la tercera planta. Llevémoslo a la entrada principal. Ahí se encuentran los pediatras.

—¿Pediatras? ¡Estás loco! —exclama, Dana, al mismo tiempo que presiona más mi mano—. Tu tranquilo, Alan. Vamos a solucionarlo.

—Necesitamos ayuda.

—¿Ayuda? —bufa Peter.

—Sí, ayuda. Creo que has olvidado que solo tenemos 16 años. —Charlie le da un para nada amistoso golpe en la cabeza. Sin embargo, el castaño no se resigna y le parece mejor seguir discutiendo.

—Habla por ti, yo casi tengo la mayoría de edad.

—Si, y todavía no sabes leer bien. 17 años malgastados —niega Dana—. Pobre de tu madre.

Ante lo que mi visión borrosa me permite ver, Peter acaba de volcar los ojos y Charlie suelta una carcajada de inmediato. Dana, por otra parte, ella está muy preocupada como para andar bromeando a estas alturas de la situación.

Joder, soy patético. Se supone que ese giro sería para impresionarla antes de pedirle que fuera mi novia. Ahora la vergüenza me sobrepasa.

—Llamemos a Maddie. —como puedo, saco mi celular de mi bolsillo. Lo arrojo al piso porque el dolor me está segando y dudo poder ver bien el contacto.

Dana suelta mi mano y toma el celular, marca el número y se lleva el celular al oído.

—¡No contesta!

—Intenta otra vez.

—Joder, no...

Escudriño en mi memoria para saber a quién puedo llamar sin estar en problemas después.

Si llamo a Benjamin seguro va a preocuparse y no creo que guarde el secreto por mucho tiempo. Si llamo a mis padres, no quiero imaginar que pasaría. Lisa, jamás está a nuestra disposición. Solo puedo pensar en una persona capaz de guardar mis secretos a la perfección, omitiendo como profesional cada detalle que pueda perjudicarme.

Lo digo por experiencia.

—Adam.

—¿Adam qué?

—Solo... Adam.